The Human And Her Wolf - (Lumity/Lumelia Siblings Au)

• Cap 4 •

Alguien corría a una velocidad sobrenatural entre los árboles del bosque que rodeaba el pueblo de Bonesburough.

Cierta persona, era una chica joven de hermosos ojos dorados y caballo teñido de lila, amarrado a una cola de cabello que dejaba ver un corte bajo, mostrando su verdadero color castaño natural.

Tenía un vendaje que cubría su pecho, dejando visibles las marcas simbólicas en su expuesto torso, brazos y espalda, pintadas casi iguales a las que tenía en su cara, específicamente en sus mejillas, frente y nariz.

Sus pies iban libres tocando el suelo húmedo mientras corría alejándose de quienes la perseguían.

La atlética chica misteriosamente hermosa, huía de dos grandes lobos grises de brillantes ojos heterocromáticos que intentaban atraparla antes de que pasara el barranco que estaba cerca de la dirección en la que iban.

A tan solo unos segundos de llegar, uno de los lobos abría su gran hocico para intentar morder la cola de caballo de la pelo lila.

Pero la ágil y audaz chica logro saltar el ancho barranco antes de que los lobos grises la atraparan.

Extendió sus brazos para poder caer de manos y rodar un poco por el suelo, impulsándose para levantarse rápidamente y mirar hacia el otro lado donde dos pares de ojos bicolores la veían con fiereza.

—¡Ja! ¡No lograron atraparme! —hacia una mueca burlona sacándole la lengua a los licántropos.

Estaba burlándose de haber escapado de los lobos, cuando un tercero aparece entre el medio de sus hermanos, saltando con habilidad y experiencia la distancia que la separaba de su objetivo.

La chica vio como un lobo más grande hacía lo que para ella era, el salto más increíble que la había visto hacer, viendo al enorme animal caer a unos metros.

Un lobo de predominante pelaje castaño, gruñía mostrando sus colmillos mientras se acercaba a ella cautelosamente.

La chica de cabello lila empezó a retroceder —Woow... —deteniéndose justo antes de caer al darse cuenta que estaba muy cerca de la orilla.

Viendo que el enorme lobo marrón no se iba a detener, decidió entonces enfrentarla, poniéndose firme mientras extendía sus brazos hacia los lados.

Sus ojos ahora totalmente amarillentos miraron con intensidad los del animal que le seguía gruñendo para intimidarla.

Decidiendo también gruñirle en repuesta, la joven mostro sus ahora afilados colmillos mientras hacía relucir sus uñas en forma de garras y los rasgos de su cara se endurecen casi cambiando a una forma más animal.

Las venas de su cuello se tensaban al igual que las de sus manos, brazos y piernas, por el esfuerzo que estaba haciendo al intentar permanecer firme para no caer en la intimidación del animal.

Pero cuando los ojos amarillos del lobo cambiarán a un intenso color gris, solo duró unos segundos más, antes de caer de rodillas con la cabeza agachada.

Soltando un resoplido, vio como las patas del licántropo se movían hasta estar en frente de ella, tímidamente levantó de nuevo la cabeza, solo para recibir un lametón en su frente que casi borraba por completo la marca de pintura roja que se había hecho.

—Hey... Jaja me haces cosquillas —dijo soltando un risita cuando el lobo pasaba su nariz por su cuello restregando sus mejillas.

Se dio la vuelta solo para ver a los lobos grises saltar con felicidad, antes de que se dieran la vuelta para reunirse al pie de la montaña en la que estaban.