El Omega mimado y el Alfa amargado | Kookmin AU|

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Min Yoongi, Kim Taehyung y Park Jimin se conocieron en la escuela secundaria. Iban en cursos diferentes y no tenían nada en común. Pero el día en que se conocieron, fue como si las estrellas se alinearan en los cielos, fue como si miles de fuegos artificiales se esparcieran en los cielos del país.

Muchos dicen que los destinados no existen. Otros dicen que eso solo es para las parejas Alfa - Omega.

Pero ese día en la sala de detención, los tres jóvenes entendieron que nada de lo que conocían los había preparado para encontrarse.

La amistad fue instantánea. Como si de repente supieran que debían de ser amigos, como si toda su vida cobrara sentido, justo en el instante en que se miraron.

Su relación no fue fácil, a pesar que muchos creen que construir una amistad es sencillo. Lo cierto es que no tener nada en común fue un problema de años. Hasta que, una vez graduados, cada uno encontró su propósito de vida. Esa chispa que los hace levantarse por las mañanas y vivir.

Y aún así, seguían siendo muy diferentes. Pero dejando de lado sus profesiones y deseos, al final del día ellos tres se tenían el uno al otro.

Y eso nunca iba a cambiar.

Bueno, eso es lo que creía Yoongi.

El mayor de los tres, joven y audaz; no entendía que era ese sentimiento tan triste en su corazón.

Leyó una vez más el mensaje que Taehyung le escribió.

¿Porqué Taehyung estaba tan frustrado? ¿Que era lo que sucedía con él?

Estaba herido y su corazón estaba roto, y eso era culpa de Taehyung, por supuesto. Pero Yoongi no podía evitar pensar en el menor y preguntarse que era lo que atormentaba a su amigo.

Miró hacia Jimin, que estaba concentrado en la película totalmente ajeno al problema.

— iré por más cerveza — le informa. Y Jimin asiente lentamente sin despegar su mirada de la pantalla.

Yoongi salió del departamento y miró a los dos lados del pasillo. No había nadie.

Así que caminó hasta el ascensor y presionó el botón, sintiéndose cada segundo mas preocupado y ansioso. Quería ver a Taehyung y asegurarse de que no estuviera más molesto de lo que antes ya estaba.

Cuando el ascensor se abrió, Yoongi se encontró frente a frente con Jeon Jungkook, el esposo de Jimin.

No habían tenido la oportunidad de hablar en absoluto, a pesar de que su amigo ya llevaba varias semanas casado con ese Alfa.

— ¿No has visto a Taehyung?— le preguntó, sin preocuparse en saludar.

El hombre levantó las cejas y luego frunció el ceño.

— no— le dice. — pero creo haber visto su camioneta en el estacionamiento.

— vale, gracias Jungkook. — Yoongi pasa por su lado.

— oye — Jungkook le llama. Yoongi mira por sobre su hombro.— ¿Jimin está despierto?

— sí, estábamos mirando una película.

— ¿No fuiste muy cariñoso con él, o si?— Jungkook le da una mirada filuda, como si estuviera celoso.

Pero Yoongi nota enseguida sus ojos. Vacíos y fríos.

— A mi no puedes engañarme — le dice Yoongi. — sé que no amas a Jimin. Se que estás con él por la empresa, así que no te esfuerces en pretender celos o amor. Yo...puedo ver que no sientes nada por él.