VICTORIA
Al entrar en la habitación cierro con fuerza, camino hacia las ventanas y no uso el control para cubrirlas con las cortinas, lo hago con mis manos, no quiero ver nada más que oscuridad.
Sin molestarme en cambiarme me meto a la cama.
Me duele la cabeza y mi estómago está a punto de salir por mi garganta.
Me escondo entre las sabanas como lo hacía cuando era niña, como lo hice cuando mi madre murió.
Hace mucho tiempo no me sentía así, quiero dejar de sentir todo esto, quiero que no me importe, pero lo hace.
Pienso en mi hijo, es el único que me reconforta, he soportado calumnias y humillaciones por él y no me importa, pero estoy cansada, quisiera descansar por un largo tiempo, no quiero ver a nadie, no quiero hablar con nadie, el único ser humano con el que desearía hablar es con él, pero aún no lo hace.
Limpio mis mejillas cuando mi rostro se humedece y siento un sabor amargo pasar por mis labios.
Intento ser fuerte, pero me derrumbo después de un tiempo, me permito llorar porque me lo merezco, todo lo que he pasado no ha sido fácil.
Es cierto que no soy perfecta y me equivoque al ocultar mi embarazo, pero eso no significa que merezca nada de esto.
Desearía tener los medios para tomar a mi hijo e ir a un lugar alejado de todas estas personas malvadas, quiero protegerlo de tener cerca a su familia.
Por desgracia no puedo hacerlo porque no tengo ni un centavo, además no puedo hacerlo aunque lo desee, no puedo alejarlo de su padre.
No me lo perdonaría.
Cierros esperando que la persona que está tocando la puerta no entre.
Al contrario, entra al no escuchar una respuesta de mi parte, finjo estar dormida para que no me vea con los ojos húmedos.
Escucho los pasos, cercarse a la cama y jalo las sabanas para cubrirme aún más.
-La cena está lista. –Es Rita.
-No iré. –Trato de que mi voz suene lo más firme posible.
-Pero, el señor... -dice después de un tiempo en silencio.
-Me duele mucho la cabeza, por favor, Rita, podrías dejarme sola.
-¿Necesita un médico?
-No te preocupes, solo necesito dormir.
-¿Quiere que suba la comida? –Insiste.
Estoy a punto de ser grosera y pedirle que salga de aquí, pero me contengo porque ella no tiene la culpa de nada, solo hace su trabajo y más de él en muchas ocasiones.
-Solo quiero dormir...
Se retira y me deja en completo silencio aunque mi cabeza no está en el mismo lugar, la conversación con Vivian me dejo con demasiado ruido en mi cabeza.
-No te atrevas a decirle nada a mi hijo, no permitiré que arruines nuestra relación, no tú, no alguien como tú, si lo haces tu padre sufrirá las consecuencias y sabes perfectamente cuáles son esas consecuencias.
La cárcel.
-No seguiré pagando sus deudas, haz lo que quieras.
Lo siento por mi padre, pero ahora tengo que pensar en mi hijo, él está primero.
-Thomas no creerá nada de lo que digas, no después de huir como una sabandija.
-Porque me obligaste, no quiera dejarlo.
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Victoria
RomanceVictoria es obligada a alejarse de su novio y a ocultarle su embarazo, pero cuando un viejo amigo de su familia la descubre en Francia su exnovio la acorrala como castigo.