The Beatles

Eleanor Rigby

Letra traducida al español:

Ah, mira a toda la gente solitaria
Ah, mira toda la gente solitaria
Eleanor Rigby
recoge el arroz
de la iglesia donde ha tenido lugar una boda.
Vive en un sueño
espera tras la ventana con una expresión
que guarda en un jarrón junto a la puerta
¿Para quién es?

Toda la gente solitaria
¿De dónde viene?
Toda la gente solitaria
¿A dónde pertenece?

El padre Mc Kenzie escribe las palabras
de un sermón que nadie va a escuchar
Nadie se acerca
mírenlo trabajando, remendando sus medias
de noche cuando no hay nadie
¿De qué se preocupa?

Eleanor Rigby
murió en la iglesia
y fue enterrada junto con su nombre
Nadie asistió
El padre Mc Kenzie sacude la tierra de sus manos
mientras se aleja de la tumba
Nadie fue bendecido

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 Eleanor Rigby era aquella muchacha humilde, sin familia, pero de una increíble belleza. Era también aquella muchacha sin hogar, a la que el padre Mc Kenzie le había abierto las puertas de su iglesia para que allí viviera, con la condición de limpiar el lugar después de cada boda. Y eso es lo que ella hacía, luego de cada boda, recogía los granos de arroz.

 Una tarde, mientras Eleanor limpiaba la gran cruz de la iglesia, un joven se le acercó.

-Hola- le dijo.

-Hola- respondió sobresaltada ella.

-¿Eres de por aquí? No recuerdo haberte visto.

-Si soy de aquí- recogió un mechón de cabello tras su oreja- no salgo mucho, debe ser por eso.

-¿Te importaría conversar un rato conmigo?

-Claro- dijo algo tímida.

 El joven se presentó en la iglesia todos los días a la misma hora durante meses, solo para hablar con la muchacha. Y por supuesto, al tiempo ella ya estaba a sus pies.

 Un día, el joven se presentó a la iglesia como normalmente lo hacía, y allí, de rodillas, le propuso matrimonio. Eleanor, que había soñado con ese día desde que era una niña pequeña, no dudó un instante, y aceptó la propuesta.

 En la ceremonia, nadie se presentó. Solo la pareja y el padre Mc Kenzie.

 Ella recitó sus votos vestida con un hermoso vestido blanco. Luego, llegó el turno del muchacho:

-Con esta mano, te tomo a ti, Eleanor Rigby, para convertirte en mi esposa- deslizó el anillo por sus delicados dedos-. Tu copa jamás estará vacía, porque yo seré tu vino.

 Entonces, tomó la botella y vació su contenido rojizo dentro de la copa. La muchacha bebió su contenido.

 Una sonrisa algo perversa se dibujó en el rostro de quien ahora era su esposo. Ella le ofreció la copa para que él también bebiera. Pero éste se negó.

-No voy a beber eso-dijo- no me gusta que las cosas que ingiero me hagan tan mal.

 El pequeño cuerpo de Eleanor comenzó a retorcerse.

-En este mundo no necesitamos personas pobres, hace quedar mal a las demás personas, como a mí por ejemplo. Es por eso que me dispuse a eliminarlas. Lo siento, querida.

 Y depositó un beso en la frente ahora pálida y fría, antes de que su cuerpo cayera sin vida.

 Eleanor Rigby murió en la iglesia, y fue enterrada junto a su nombre.

 Nadie asistió.

 El padre Mc Kenzie sacudió la tierra de sus manos, mientras se alejaba de su tumba.

 Nadie fue bendecido.