Minutos después de atravesar el inmenso portón de la inmensa casa que es mi hogar llegamos a la escuela y al atravesar la puerta del secundario mi hermano y yo nos separamos para ir cada uno a su salón, al entrar al mio me senté en mi lugar de siempre, la profesora aun no había llegado.
--buen dia-- me dijo Jimin mi mejor y único amigo verdadero --pensé que no vendrias--
--hola jimin. Es que me retrasé por mi hermanito que se recordó en el camino que había dejado algo en casa-- le respondí sacando mi libro y carpeta.
--bueno, lo que importa es que ya estas aquí, con migo-- dijo en susurro acercandose mucho a mi cuello, eso suele hacerlo para incomodarme.
--ya!-- Le di un pequeño empujón para que se aleje y el solo rió como siempre.
--silencio-- entró la profesora de literatura per nadie le hizo caso --chicos silencio por favor-- repitió, ahora que lo pienso no recuerdo haberla escuchado gritar nunca. Sin embargo aun no le hacían caso --tengo los exámenes para entregarles.
Todos se callaron y miraron fijo a la profesora esperando a que entregue los dichosos papelitos; en mi escuela no importa que tan buena onda seas o que tan despreocupado seas, en el momento que se entrega un examen todos nos volvemos ángeles. La profesora comenzó a pasar banco por banco entregando las notas, 95, que buena nota, papá y mamá estarán orgullosos, eso creo.
--¿como te fue Jimin?-- volte a ver al muchacho que se sentaba a mi lado con su banco pegado al mio.
--jaja, supera esto-- me dijo sonriendo mientras mostraba orgulloso su 84.
Sin decir nada le puse en frente mi examen.
--aish con tigo no se puede-- rodeó los ojos decepcionado.
--felicidades señorita park-- la profesora interrumpió mi risa.
--gracias señora-- le agradecí con una sonrisa de oreja a oreja.
--no puede ser, realmente estudié mucho-- se escucho detrás mio.
Me volte sobre mi silla para ver que había pasado, era un compañero, el cual se había sacado un 23.
--el examen fue muy dificil--
--piensa lo mejor, escuché que en algunas escuela de países latinos la nota es hasta diez y apruebas con un 7-- lo interrumpí a mi sufrido compañero.
--wow Min Jung senpai es muy inteligente-- se coló en la conversación otra compañera de clase.
--¿senpai?-- repitió Jimin.
--eso es japones ¿cierto?-- le pregunté a ella.
--así es senpai-- sonrió serrando sus ojos
--¿y que significa?-- preguntó Jimin poniendo a la chica algo nerviosa.
--nada, nada, olviden que lo dije-- respondió ella con notable nerviosismo.
--además de inteligente Jungie es muy linda ¿no creen?-- dijo Jimin mostrando desde mi celular la foto que me había tomado esta misma mañana.
--claro que si-- dijeron los 2 que se encontraban detrás nuestro al unisono.
--¡Jimin!¿Qué haces con eso?-- traté de quitarle mi celular pero él se paró haciéndome para también.
--muy linda, muy inteligente-- dijo riendo y alzando mi celular evitando que llegue a tomarlo --pero también muy pequeñita--
--park, Min, por favor sientense-- nos regañó la profesora.
--si, lo siento-- dijimos al unisono lo que me permitió sacarle disimuladamente el celular de sus manos.
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El machismo de mi padre
UngdomsfiksjonKorea, un país muy respetuoso, pero dentro de ese lugar en su mayoría respetuoso hay una gran excepción, y para mi decepción, mi padre Park Bon Hwa el dueño de la editorial más resonante de Korea del Sur. Este hombre tan prestigioso, adinerado, int...