Mi héroe. (Mj)

Capítulo 19

Increíblemente no había fila en el baño, esperé unos 5 minutos recostada en la pared con los brazos cruzados y la puerta se abrió.
Me despegué de la pared para entrar y ella salió: Lisa Presley, castaña, ojos azules, cintura de avispa. Estaba vestida de negro.
Cuando salió, me miró de arriba a abajo y sonrió maliciosamente mientras caminaba. Yo me quedé en shock un momento pensando en la puerta del baño.

-Oye, Freebird, ¿vas a entrar?.-me dijo un tipo tras de mí.

Me giré hacia él y moví la cabeza a los lados para decirle que no, el tipo entró y yo seguía pensando, decidí ir hasta el balcón otra vez para ver si él seguía esperándome como dijo.
Caminé hasta allá y lo que vi me devastó básicamente, Lisa lo tomaba del cuello y lo besaba, no pude llegar a ver la cara de Michael porque técnicamente lo devoraba. Me quedé parada ahí un segundo y entendí que no estaba incluida en la escena, así que giré y volví  por dónde vine.

-¡Silvana!.-dijo Michael para detenerme. Tuve que girarme otra vez y eso hice.
-Ah hola.-dije simulando que estaba todo bien con la sonrisa más falsa que pude.
-Ella es mi esposa Lisa.-ella tenía una sonrisa forzada y se le notaban las venas en la frente.
-Creo que no nos hemos presentado.-se levantó y me dio un beso en la mejilla.
-Sil... Kella Freebird.-solo él me llama Silvana.
-Lisa Presley.-caminó como modelo hasta sentarse con Michael. Se sentó con las piernas cruzadas y sostenía el brazo de su querido marido.
-Bien... Yo me voy. Un gusto haberte conocido Lisa, hacen muy buena pareja.-me giraba para irme pero...
-Quédate, Silvana.-me dijo él con su voz dulce.
-Creí que su nombre era Kella.-dijo ella.

Me giré de nuevo hacia ellos.

-Es artístico, pero solo los más allegados me llaman por mi nombre real.-lo dije para molestarla.

-Bien, Silvana.-dijo haciendo énfasis en mi nombre. No sé quién le dijo que es allegada.-Yo y Mikey queremos hablar a solas si no te importa.

¿Mikey? ¿qué carajos?. Me estaba echando y Michael no pronunciaba palabra, solo se quedó viendo al cielo todo el tiempo. Manteniendome cuerda, solo hice lo que me pedía y me fui de ahí. Murmuraban cosas pero no le di importancia.