¿Que es la felicidad?

El Sonido de la Guerra Parte 4

||La lluvia callo, la sangre se esparció. Los gritos cesaron. Había terminado.||

El ejército Wen había sido forzado a retroceder en la frontera de Gusu Lan.

Fue gracias al apoyo del recién llegado Clan Nie, que se pudo evitar el derramamiento de más sangre.
De no haber sido por ellos, el escuadrón trece habría perecido ante la emboscada del Clan Wen. Quienes habían fingido su retirada para tomar desprevenidos a sus enemigos y atacarlos cuando estuvieran dispersos buscando sobrevivientes.

Fue una suerte en verdad que llegara el Clan Nie.

—Joven Maestro Wei  ¿Esta seguro que ya no le duele su herida en el brazo?

Wei Wuxian levantó su vista. Miró con ternura al joven tímido junto a él, y negó.

—Estoy bien, me siento mucho mejor gracias a tu tratamiento. Eres muy amable.

—No,yo...no tiene nada de que agradecerme. —respondió. Cabizbajo, tímido. —Es debido a usted que aún se me permite seguir con vida.

Wei Wuxian soltó una risa.

—¡Eso debería decirlo yo!! —exclamó sonriente. —si nunca te hubieras dispuesto a sacarnos de la cueva, nadie nos hubiese encontrado y habríamos muerto por un derrumbe causado por la batalla que se libro entre el Clan Nie y el Clan Wen..

Wei Wuxian recordaba con claridad aquel momento.

Él y Lan Wangji habían estado exhaustos, al borde de la inconsciencia. Cuando una pequeña explosión dejó entrar la luz y la libertad, y con ella a un pequeño y frágil cuerpo. Quien no dudo en atender sus heridas y proporcionarles un medio para escapar sin tener que encontrarse con el Clan Wen.

—Aún así.. —el joven se mordió el labio. —sigo siendo parte de ellos....llevo su sangre.

Wei Wuxian bajo la mirada.

No podía negarlo.

Pero tampoco culpaba al chico por ello.

Nadie podía decidir en donde nacer, que sangre llevar.

Que estuviera en el ejército enemigo, se debio solamentente a su débilidad contra la cruel tiranía del gobierno que lo regia.

Él solo era un inocente chico obligado a luchar en una guerra que nunca eligió. Que nunca quizo.

Nadie le dio la oportunidad de elejir

"Como a mi..."Wei Wuxian pensó con tristeza.

Wei Ying se sentía tan identificado con aquel chico. Ninguno había podido elejir en donde nacer, que sangre llevar.

Ambos habían sido odiados por ello.

Sometidos ante la voluntad de un tirano.

" Pero ya no más... "

—Te protegeré, Wen Níng. —dijo. Su voz nunca vaciló. — No me importa lo que piensen los demás, no me importa si creen que eres un mounstro por la sangre que llevas. Se que no eres así, —sonrió con calidez. —Nadie te pidió que salvarás a tus" enemigos", y aún así lo hiciste. Eres una buena persona, puedes llevar su sangre en tus venas, pero no perteneces a ese Clan.

Wen Níng lo miro con asombro, algunas lágrimas cayendo por sus mejillas.

—Ojalá todos pensaran como tú.

Wei Wuxian también lo deseaba.

Desafortunadamente no era el caso, y Wei Wuxian era consciente del trabajo que le costaría mantener al menor con vida en el ejército de Gusu Lan.