Cero, es nada, un número que indica nada. Un número redondo, sin principio ni final.
Me recuerda al Ouróboros, la serpiente mordiendo su propia cola. Un círculo cerrado, sin principio ni final.
Me recuerda a las ruedas de los vehículos, que giran a tal velocidad que no se puede seguir su ritmo, giran y giran sin parar, y dan más vueltas de las que se pueden contar.
Por lo que donde muchos ven nada, otros vemos posibilidades infinitas, sin principio ni final.
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Reflexiones. Escribiendo por temas
RandomEmpecé a escribir estos fragmentos como un reto para mí misma, una forma de volver a escribir, y al final me ha encantado. Cada pequeño "capítulo" o fragmento está escrito siguiendo una o varias palabras como inspiración. Me he propuesto escribir s...