— ¿Como dices que dijiste? — Pregunto y miro a nuestro alrededor asegurándome de que nadie nos ha escuchado y Tom también mira a nuestro al rededor.
— Te he preguntado si estás embarazada. — Dice Tom hablando en un tono más discreto y mirándome expectante.
— ¿Se puede saber por qué piensas eso? — Pregunto y automáticamente caigo en cuenta de que tiramos la prueba de embarazo en la cocina. — ¿Thomas Stanley Holland te has puesto a hurgar en la basura?
— Me acabas de recordar a mi madre cuando me regañaba ... — Lo miro fijamente esperando su respuesta. — En mi defensa diré que fue Harrison y por favor responde a mi pregunta ____. — Entrelazo mi mano con la de Tom.
— Cariño ya sé que te haría mucha ilusión, pero siento decirte que no, no estoy embarazada. — Digo y veo como su mirada se entristece ligeramente así que tomo su mentón y lo levanto para que me mire a los ojos. — Ahora mismo no lo estoy, pero sé que en un futuro lo estaré y sin darnos cuenta, cariño, habremos formado una familia juntos. — Digo y Tom sonríe de lado.
— Tienes razón. — Beso rápidamente sus labios. — ¿Entonces quien lo está? — Me pregunta.
— Yo no puedo decirlo Tom, es algo de ella y tiene que ser ella la que tome la decisión de contárselo a los demás. — Tom asiente dando me la razón. — ¿Así que Harrison tuvo que hurgar en la basura?
— Teníamos que saber el resultado del test. — Responde encogiéndose de hombros. — Pero no le digas que te lo he dicho.
— Mis labios están sellados. — Hago como si los cerrara rápidamente con una cremallera.
— Pero sinceramente creo que si ya hay uno de nosotros con un bebé en camino nosotros también tendríamos que ponernos a ello para que así no se lleven muchos años. — Dice rápidamente.
— ¿Tom se puede saber por qué te han entrado tantas ganas de cambiar pañales? — Pregunto mientras contengo la risa. — Como se nota que a ti te toca lo más fácil en todo esto.
— Lo siento ____ pero es que creo que es lo único que le falta a nuestra historia y cariño no sabes las ganas que tengo de vernos cuidando de una pequeña parte de nosotros, poder disfrutar de su risa, sentir como nuestros corazones se derriten cuando escuchemos a ese pequeño o pequeña llamarnos "mamá" y "papá" y poder oír el sonido de sus pequeños pasos cuando venga a buscarnos las noches en las que haya tenido una pesadilla y quiera dormir con nosotros.
— Te propongo que hagamos esto. — Tomo la mano de Tom con mis dos manos y empiezo a jugar con ella. — Voy a dejar de tomar la píldora y ya veremos que es lo que sucede. — Callo unos segundos y lo vuelvo a mirar. — ¿Te parece bien?
— Me parece perfecto. — Dice y me besa.
— Ahora solo espera a que el tiempo decida las cosas, deja que fluya.
— Lo intentaré.
Comenzamos a hablar con nuestras familias mientras cenamos todos juntos y después vamos a la pista de baile.
Tom agarra mi mano y me lleva hasta el centro de la pista. Entrelazo su mano con la mía mientras apoyo mi otra mano en su hombro y el agarra mi cintura, acercándome a él.
Comienza a sonar thinking out loud de Ed Sheera y comenzamos a bailar al ritmo de la música y mientras miro sus ojos. Inevitablemente no puedo evitar sonreír y recordar todos aquellos momentos que hemos vivido juntos.
*Flashback*
— ¡Dios! Me habías asustado. — Suelto un suspiro al ver que esta el chico de la veterinaria.— Solo estaba caminando hacia mi casa. — Dice mientras me mira como si fuera una demente.
— Bueno pues podrías avisar.
"Soy idiota" Pienso después de decir eso.
— Si claro, no se me había ocurrido, a partir de ahora llevaré una pizarra para informarle a todo el mundo a donde voy. — Dice con bastante ironía.
*Fin Flashback*
*Flashback*
— Págame.— Dice.
— ¿Que es lo que quieres? — Pregunto. Tom me mira , después mira al resto y estos se levantan para irse.
— Bésame.
*Fin Flashback*
*Flashback*
— ¿Crees que estoy enamorado de ti?
— ¡¿Qué?! — Me esperaba cualquier cosa, menos esa pregunta. — No. ¿Como crees? Claro que no.
— ¿Y tú estás enamorada de mi?
— Por supuesto que no.
"Eres una mentirosa". Pienso
— Nosotros solo somos amigos. — Digo haciéndome un nudo en el pecho.
— Entonces si solo somos amigos, no tenemos nada que pensar. Todo está claro. ¿No? — Asiento.— Tú no sientes nada por mi y yo tampoco siento nada por ti.
— Efectivamente. Ya está todo claro entre nosotros.
— Si.
Y sin darme cuenta nos volvemos a besar, pero no como lo habíamos hecho anteriormente. Ahora nos estamos besando con necesidad, como si en cualquier momento nuestro mundo se fuera a acabar y no nos volviéramos a ver.
*Fin Flashback*
*Flashback*
— Te quiero Tom y he sido una completa idiota por no decírtelo antes, cuando era el momento. No se que fue lo que me pasó, la verdad. Se que quiero estar contigo, pero creo que en ese momento tuve miedo de decir algo y equivocarme. Lo cual a sido el caso pero en fin, si te preguntas por qué tuve miedo pues te lo diré. — Apoyo mi cabeza sobre la puerta. — Tengo miedo porque para mí estar contigo es como estar soñando y tengo miedo de que si un día despierto tu no estés o que si te llegas a ir me duela verte partir y esperar a que regreses. ¿Pero sabes? Me he dado cuenta de que por amor todo se puede y que si los dos sentimos lo mismo nunca nos haremos daño el uno al otro.
Me quedo en silencio esperando a que la puerta se abriera, pero no fue así.
— Lo intenté. — Digo un voz baja para mi misma.— Gracias y disculpad por las horas. — Le digo a los chicos y le doy la toalla a Sam.
— No te preocupes. — Dice Sam.
— Siento que no hayáis podido hablar. — Dice Harry que me dio un ligero apretón en el hombro.
Entonces la puerta de su habitación se abre y Tom sale de golpe, me coge de la cintura y me miró a los ojos.
— Lo siento. — Dice y me besa.
— Soy yo quien lo debe sentir.
— ¿Quieres ser mi novia? — Me pregunta y yo lo vuelvo a besar mientras enredo mis dedos por su cabello. — Tomare eso como un si.
*Fin Flashback*
*Flashback*
— Tengo miedo de que te des cuenta de que soy un estúpido que está locamente enamorado de ti, que te ama con toda su alma y que cada vez que te ve hablar con alguien le entran dudas de que te des cuenta de que no te merezco y decidas estar con alguien que si te merezca.
— ¿Me estas diciendo que si me has tratado a las patadas es porque me amas y tienes miedo de que encuentre a otra persona y te cambie por ella?—Le pregunto intentando encontrarle un sentido a todo esto.
— ¿Ves como soy estúpido?
— Si lo veo. — Lo miro a los ojos y él a mi también. — Y también veo que yo soy una estúpida por amar locamente a otro estúpido.
*Fin Flashback*
*Flashback*
— ¿Cuando supiste que estabas enamorada de mi? — Me pregunta.
— Al principio no estaba segura de cuándo ni cómo fue pero ahora si que lo tengo claro.
— ¿De verdad?
— Si. — Le sonrío. — El día del festival, cuando soñaba we foud love de Rihanna y nos besamos. Ahí supe que no solo me gustabas sino que en todo ese verano viendo películas contigo me había enamorado de ti sin saberlo. — Cierro los ojos y me muerdo le labio. — Creo que ahora mismo estoy siendo demasiado cursi.
— Para mi estas siendo la mujer más maravillosa del mundo. — Tom imita mi gesto. — Ahora yo soy el cursi.
— Mi turno. — Le digo y me mira. — ¿Cuando supiste que estabas enamorado de mi?
— La primera vez que nos besamos, esa noche por cosas de la vida estaba sonando una canción de Ed Sheeran en mi ordenador y me viniste a la mente. No sabía exactamente significaba aquello y tenía que descubrirlo por eso te escribí y organicé esa ida a los bolos. Ahora ya sé que aquello era que me había enamorado de ti cuando nos besamos por primera vez. — Sonríe y lo beso.
— Solo por curiosidad. ¿Que canción era?
— Es muy cursi. — Lo miro fijamente. — Perfect.
*Fin Flashback*
— ¿En que piensas? — Pregunta Tom sobre mi oído.
— Simplemente en que la gente se enamora de formas muy extrañas.