(En proceso).
"Hay personas que son una brisa primaveral; otras, una tormenta sin fin. Pero cuando eres fuego, contaminas el aire del primero, y con el segundo, la guerra nunca terminará".
Josselyn Brown sueña con tener unas vacaciones perfectas con...
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Un grito de frustración se oye desde el despacho de mi padre, y una pequeña yo de diez años escucha y observa todo por la rendija de la puerta.
-¡No puede ser que aún no haya podido resolver un estúpido caso!- dice papá, mientras se pasa las manos por el cabello con frustración.
-No seas tan duro contigo mismo Will- dice Ryan un amigo de él, sentado en una silla junto a la ventana, mientras bebe tranquilamente algún tipo de licor- eres uno de los mejores agentes que tiene el FBI, haces tú trabajo lo mejor que puedes.
-Es que es muy frustrante, esos malditos se desvanecen en el aire. Es como si supieran todos mis movimientos. Como si me vigilaran- culmina arrebatando el trago de las manos de su amigo.
Ryan se pone de pie esta vez y camina hasta él.
-Tranquilo pronto los descubrirás.
De repente las imágenes se desvanecen y el escenario cambia. Mi mamá salió a la ciudad a realizar las compras, así que voy a buscar a papá, pero cuando salgo de mi cuarto él está en el pasillo y me indica que regrese a mi habitación en un susurro casi inaudible, luego me da un anillo y gesticula un "cuídalo" con los labios, me da un beso en mi frente y me deja encerrada con seguro. Lo siguiente que escucho son los gritos de mi padre.
-¡¿Cómo pudiste?! ¡Eres un maldito cabrón!
-Lo siento Will, pero no puedo dejar que compartas nuestro pequeño secreto. Fué un placer conocerte.
Disparos, quejas de dolor y mis gritos es lo que sigue. Todo se desvanece a mi alrededor y me encuentro en un callejón oscuro, tengo mucho miedo y mi cuerpo tiembla por el frío de la noche. De repente una figura encapuchada vestida completamente de negro aparece frente a mí y me dice con voz distorsionada. "Lo siento princesa, pero no escaparás de nosotros" y comienza a acercarse lentamente hacia mí.
-¡No, no, no!- grito mientras despierto asustada y envuelta en sudor.
Angelina se despierta de un brinco y se incorpora rápidamente para bajarse de su cama y caminar hasta la mía.
-Tranquila Jossie, solo fué una pesadilla- me dice mientras me abraza.
Al principio me aparto, pues las imágenes de la pesadilla aún siguen latentes en mi mente y apenas estoy regresando a la realidad. Pero a la final cedo.
Yo solo puedo llorar, porque aunque solo haya sido un mal sueño se sintió demasiado real y no ayuda el hecho de que también sean recuerdos.
-Tranquila- me susurra una y otra vez.
Cuando dejo de llorar ella se separa de mí y se sienta a los pies de la cama.
-¿Quieres hablar de eso?- me dice expectante.
-No- ella asiente y no me presiona, yo continúo- Solo que aveces quisiera librarme de las mierdas del pasado y que no me atormenten en las noches. Que un día pueda levantarme y que todas esas sombras no hayan sido reales.
-Sé de que hablas, a todos nos han pasado cosas dolorosas y sé que es imposible olvidarlas por completo, pero con el tiempo esas heridas dejan de sangrar y se convierten en cicatrices que al mirarlas ya no duelen, pero nos recuerdan que sanamos y el por qué ahora somos más fuertes.
-Estoy de acuerdo contigo- digo-. Pero ¿Qué pasa cuando ya hemos cicatrizado y sentimos cómo esa herida empieza a abrirse poco a poco de nuevo?
-No sé cuáles son las sombras que te están atormentando- me dice- pero si la vida puso esos obstáculos en tu camino, es porque eres lo suficientemente fuerte para vencerlos a todos ellos- me sonríe amablemente y yo le devuelvo la sonrisa.
Sus palabras me reconfortan. Espero de verdad que pueda superarlo todo. Ojalá que en el camino no me pierda a mi misma, que conserve esa chispa de alegría que me caracteriza y continúe siendo yo misma.
-Tienes razón, sé que superaré todos esos problemas y que seré más fuerte cuando renazca de nuevo. Gracias Angelina, significa mucho para mí que aunque apenas me conozcas me hayas dado esas palabras- le digo sinceramente.
-No es nada, me caíste bien y sé cuando alguien necesita apoyo, cuando quieras hablar cuenta conmigo. Ahora voy a seguir durmiendo y tú deberías hacer lo mismo. No queremos llegar tarde a nuestro primer desayuno.
-Tienes razón- le sonrío.
A los diez minutos Angelina se queda profundamente dormida y yo reproduzco todos los momentos felices de hoy siendo consciente de que este verano crearé muchísimos más. Y también me quedo dormida.
*
El golpe de una almohada me despierta.
-¡Josselyn despierta!- grita Angelina haciéndome brincar de la cama y me doy cuenta de que ya está perfectamente vestida y peinada- Dúchate y vístete rápido, el desayuno es en quince minutos.
¡¿Cómo?!
Genial. Gracias Angelina por avisarme. Veo lo buena compañera que eres.
Me dirijo al baño rápidamente y me doy una ducha lo más ligero que puedo, salgo en mi toalla y me pongo unos shorts, una blusa azul y tenis.
-Pudiste despertarme antes- le reclamo mientras trenzo mi cabello.
-Yo no soy tu alarma y eso no importa, vamos.
La sigo fuera de la cabaña y nos dirigimos al comedor bajo el sol mañanero.
