𝐌𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐏𝐚𝐫𝐚𝐥𝐞𝐥𝐨 -𝐻𝑎𝑟𝑐𝑜/𝐷𝑟𝑎𝑟𝑟𝑦

𝟏𝟐- 𝑵𝒐 𝒎𝒆 𝒊𝒎𝒑𝒐𝒓𝒕𝒂

Hermione se dio cuenta de lo despreocupado e imprudente que podía ser el otro Harry. No paraba de darle miraditas a cierto rubio en la mesa Slytherin durante el desayuno.

No entendía nada de discreción.

Draco evidentemente evitaba el contacto visual, fingiendo comer con tranquilidad.

Pero los amigos Slytherins de Malfoy no eran ciegos y pronto notaron al Gryffindor. Pansy Parkinson fue la primera en darse cuenta, lo miró con aprensión y se agarró firmemente del brazo de Draco. Theo Nott miro de Harry a Draco con sospecha.

Harry frunció el ceño.

La discordia entre esas casas era una basura. En su realidad nunca hubo ese problema, quien eras y quienes eran tus amigos no dependían del color de tu casa.

Pero ahora, en esta realidad tenía que soportar ser el enemigo de uno de los magos más poderosos del mundo mágico y estar en el bando contrario a Draco.

Cruzó sus brazos y le dio una mirada desafiante a Parkinson, quien abrió los ojos cómicamente.

— Tienes que disimular, Harry. — Hermione aconsejó mientras dejaba su libro cerrado en la mesa.

Resoplo. Volteando su cabeza para mirarla.

— No me voy a dejar intimidar por una niñita que vive en un mundo de fantasías donde cree que se casará con mi novio. — Apretó sus bíceps.

Hermione suspiró.

A Harry ya le habían llegado los rumores de cómo Pansy presumía que en cuanto salieran de Hogwarts, Draco y ella se casarían. Un matrimonio arreglado, que así muy feliz a Parkinson.

— Harry, por favor. No es una competencia.

El Gryffindor sonrió de lado.

— Claro que no. Porque ya hubiera ganado. — Dijo seguro. Hermione giró los ojos.  Harry se descruzo los brazos y se inclinó para hablar en voz baja. —Es ridiculo que ni siquiera pueda tener contacto visual con mi novio.

Ron quien había empezaste a cantar "lalala" cuando escuchó la palabra "Novio" se saco las manos de las orejas y lo miró.

— Amigo, es Malfoy. Se supone que se odian desde 1er año. Todo el mundo sabe eso.

Harry giro los ojos.

— Si, tu Harry. No yo.

Ron hizo una mueca.

— Hermione, extraño a nuestro Harry odiador de Malfoys. — Hizo un puchero.

Hermione resopló.

— Escucha, Harry. No solo sería raro para todos si de repente te ven agarrado de la mano de Malfoy, si no que también pondrías en grave peligro a Draco. Su familia es una aliada de Voldemort, si el Padre de Draco se llegara a enterar que su hijo está saliendo con Harry Potter, el enemigo número 1 de su jefe, la verdad no quisiera saber las consecuencias.

Harry se tensó.

Sabia eso perfectamente.

Draco ya se lo había advertido, que no podían ser públicos cuando había una guerra de por medio.

Y si que le molestaba eso.

"Ese maldito Riddle, no me deja en paz ni aquí, ni en mi realidad"

Gruño.

— Entonces que, ¿pudiste crear el portal para comunicarte con mi realidad? — Preguntó a regañadientes para distraerse.

Había pensado que de ser necesario podría llevarse a Draco a su mundo. Ahí no existía Voldemort.

También podría matar al desgraciado de una vez por todas, le picaba por hacerlo.

Hermione suspiró sonoramente pero sonrió, casi maniaca.

— Ya encontré una fórmula para crearlo, pero se necesita de mucha magia y un ritual con runas. Debemos esperar a la próxima luna llena para que la magia sea más fuerte. —Contó mirando entre Ron y Harry.

El asintió ausente y volvió a mirar la mesa Slytherin.

Draco ya no estaba sentado con sus amigos, ahora estaba de pie hablando en voz baja con Severus Snape.

Harry sólo reconocía al hombre como el ex mejor amigo de su madre en su mundo.

Miro la interacción con atención, Severus tenia una mano sobre el hombro de Draco que apretaba y soltaba de vez en cuando mientras el rubio le susurraba algo con prisa.

Snape asintió una sola vez  y Draco sonrió.

Harry alzó una ceja, tenían mucha familiaridad al parecer.

El hombre se giró y emprendió la marcha fuera del Gran Salón. Harry pensó que podía aprovechar para llamar la atención de su rubio, excepto que no volvió a su asiento, si no que siguió al hombre.

Harry frunció el ceño.

No iba a estar celoso de un profesor y ex amigo de su madre, el no era tan infantil. Claro que no.

Pero... ¿A donde fueron?

¿Y si tenia algo que ver con Voldemort?

Cualquiera podía ser un Mortifago, según le habían contado.

Su pierna se movió con inquietud.

— ¿Harry? ¡Harry!

El se volteo de inmediato para mirarlos.

— ¿Si?

Ron le frunció el ceño y Hermione lo miró con curiosidad.

— De repente te fuiste mientras mirabas a la nada.

Miro la puerta del Gran salón por donde se había ido hace mucho tiempo Draco.

— Solo pensando.

Necesitaba un plan.