• 𝙏𝙀𝙉𝙏𝘼𝘾𝙄𝙊𝙉 • | Enzo Vogrincic

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Julia Recalt

—¿Me buscabas,Sis? — estaba en el set, con los demás chicos.

Asintió.

—Estas haciendo caso a lo que te dije, me imagino. — me miro.

—Si, ¿Por qué? — me senté al lado suyo y agarre una galletita que había en el plato.

— Que raro, porque enzo esta en tu camerino. — claro, a este no se le escapa ninguna.

— ¿Enzo en mi camerino? Nada que ver — rei.

— Si si, dale hacete la boluda nomás, yo no nací ayer y sé perfectamente cuando mentis. — se apoyo en el respaldar de la silla.

No me quedaba de otra que darle la razón, pero solo por esta vez.

— ¿Y vos cómo sabes, zapallo? — subí mi  pierna encima de la otra y lo miré esperando una respuesta.

— Ah, tengo mis métodos yo. — río.

— Si, hacete. ¿Quién me buchoneo? Alguno de ustedes — señale con el dedo índice a los chicos.

— ¿Nosotros que, loca? — se señaló Juani. — mira si justo nosostros te vamos a mandar al frente. — río.

— Ah, ya se quien fue. — pensé sola. — claro, fue Agustín. — Matías se quedó en silencio, ese silencio me daba a entender que tenía razón. — ¿Dónde está el zapallo este? — los mire a los demás.

— Seguro en su camerino— respondió Blas mientras boludeaba con Fran.

Me levanté de la silla y fui directo a los camerinos de los actores, acá no tendria porque estar pero quiero hablar con él.

— Chiquita, ¿Que hacemos por acá,eh? — Enzo. Cuando no tenía que aparecer él.

— No jodas, Vogrincic. — seguí caminando tratando de encontrar el camerino de Agustín.  Hasta que ví el nombre “Agustin Pardella” en la última puerta.

Dude si entrar o no.

— Uy, como estamos hoy. — se apoyo en la pared detrás mío. — en la que te vea Bayona acá, ay mamita. — jodió.

Me di la vuelta.

— Para mi que estarías más calmada si tenés un beso mío. — me tomo por la cintura, acercándome a él. Posee mis manos en su pecho, tratando de mantener distancia. — ¿Puedo? Digo, asi no me meten una denuncia por darte un beso. — su mirada estaba más tranquila, miraba mis labios deseando besarlos.

De a poco se iba acercando a mi, casi rosando mis labios con los de él.

— En la que nos vea Matías,Enzo.. — empezó a acariciar mi cintura suavemente, me seguía observando callado. Viendo cada parte de mi cara.

— Si vos querés lo hago, pero sino me voy.. — subió una mano a mi nuca y la tomo delicadamente, Asentí.

Seguramente él quería un beso, pero no lo va a tener.