Especial Harry |EDITADO|

19.6K 937 60
                                    

UN AÑO ANTES

Estaba en mi habitación pensando en darle una sorpresa a Stacy, mi novia, ya que hoy cumplíamos un mes de novios.

Decidí comprarle un hermoso ramo con cien rosas rojas.

Caminé hacia su casa, iba a tocar el timbre pero la puerta estaba entreabierta, entré y subí directamente las escaleras que llevaban a su habitación. A medida que me iba acercando se escuchaban sonidos extraños, cuando estuve lo suficientemente cerca escuché algo que jamás me hubiese imaginado.

― ¡Oh sí John eres el mejor! ―gritaba Stacy.

Abrí la puerta y mis sospechas se confirmaron, el tal John encima de Stacy y ella abierta de piernas, haciéndolo como conejos.

Mi rostro mostraba asco y sorpresa. Aunque no amaba a Stacy verla de esa forma fue algo inesperado y a la vez bueno. Ni siquiera sabía porque me molesté en comprarle flores si hace mucho tiempo quería terminar con ella. Definitivamente a mí no me iban las chicas sin cerebro que solo servían para abrirse de piernas.   

― H-a-arry no es lo que parece ―susurró Stacy con la voz entrecortada.

Solté una carcajada sarcástica. Era una desvergonzada.

― ¿No es lo que parece? ―pregunté― Sí claro y yo soy Superman ―dije enojado por su cinismo― Adiós Stacy y no me busques.

Salí de ahí y decidí ir a un parque para distraerme un rato, después de estar ahí diez minutos sentado, una hermosa niña de aproximadamente ocho años apareció frente a mí y me sonrió, le devolví la sonrisa.

―Hola, soy Emily ―dijo con la voz dulce.

―Hola, me llamo Harry ―contesté.

― ¿Esas rosas son para tu novia? ―preguntó inocente.

―No, son para ti ―dije extendiéndole el gran ramo.

Me miró sorprendida a la vez que tomaba las rosas entre sus pequeñas manitas.

―Umm, gracias ―murmuró feliz― ¿Pero por qué? Me acabas de conocer.

―Sí, y me pareces dulce ―mencioné amablemente ―Es un regalo por ser así.

Ella sonrió levemente.

― ¿Viniste sola?  ―pregunté.

―No, vine con mi mamá ―respondió ―Pero ella ahora está hablando con una señora y me escape un rato.

Reí.

―Que niña más linda― pensé.

― ¿Siempre vienes a este parque? ―inquirí.

―Sí, vengo todos los días ―respondió alegremente.

―Bien, quizás mañana te vea ―dije levantándome del asiento ―Adiós Emily.

―Adiós Harry ―dijo ella y me lanzó un beso, qué yo con gusto acepté.

Llegué a mi casa, subí a mi habitación y me acosté en mi cama, hoy había sido un día muy duro.

Al poco tiempo me quedé dormido.

―Sí mi amor también te amo ―susurró ella.

―Pero no más que yo ―dije y después la besé.

Me quedé mirando sus hermosos ojos cafés, me perdía en ellos, en esa hermosa mirada que reflejaba que su amor por mí era sincero.

Me desperté exaltado ¿Qué diablos fue eso? Acababa de terminar con mi novia y ya soñaba con otra chica.

Pero aquellos hermosos ojos, me encantaron.

―Sí tan solo existieras ―susurré para mí mismo.

A las 3:00 pm decidí ir de nuevo al parque a ver a Emily, aquella pequeña era un amor.

Llegué allí y la encontré sentada en la misma banca que estábamos los dos ayer.

―Hola Emily ―sonreí.

Ella volteó su cabecita para mirarme con sus hermosos ojitos cafés qué, extrañamente se parecían a los de la chica de mi sueño. Decidí no darle importancia al asunto.

―Hola Harry ―musitó un poco triste.

―Hey pequeña ¿Qué sucede? ―pregunté sentándome a su lado.

―Extraño a mi hermana ―dijo abrazándome fuertemente.

―Oh cariño, lo siento ¿Dónde está ella?

―En New York.

― ¿Y qué hace allá? ―pregunté curioso.

―Es modelo de Victoria's Secret....

Sueño Contigo |Harry Styles y tú| EditandoOnde as histórias ganham vida. Descobre agora