Capítulo 20: Ally está bien

3.9K 266 31
                                    

Desperté por culpa del ruido de un celular. ¿Pero quién...? Gruñí y busqué mi celular en mi velador, lo encontré y lo apagué de mala gana. No tenía ni la menor idea de quién llamaba pero no me interesaba, sólo quería dormir más.

Di media vuelta en la cama y mi mejilla se topó con una suave piel que se me hacía conocida. Sonreí aún con los ojos cerrados y me aferré al brazo desnudo de Harry.

Escuché cómo los labios del chico que había a mi lado soltaron un gemido de cansancio. Solté una leve risita abriendo lentamente los ojos.

-Hola, Harold, despierta- dije suavemente apoyando mi cabeza en su tórax.

Harry suspiró profundamente.

-Buenos días, Jadey- murmuró con su voz ronca, acariciando mi cabello tan dulcemente que un escalofrío recorrió mi espalda y mis mejillas ardieron al instante.

-Buenos días, Hazza- susurré en respuesta, trazando círculos con mi dedo índice en su brazo.

-Mhm- masculló, para después rodear mi cintura con uno de sus brazos, enredar sus piernas con las mías y pegar su frente contra la mía.

Sus ojos seguían cerrados pero... su rostro, sus facciones, sus pestañas, sus labios... Todo Harry era perfecto, de pies a cabeza, y era mío, todo mío.

-Abre los ojos, bello durmiente- tarareé sonriente.

El color verde esmeralda de sus ojos se vio ante los míos castaños segundos después. Amaba el color de su mirada, era un color tan profundo que me hipnotizaba totalmente.

Sonreí para mí misma. Maldito Harry que me ponía cursi en cualquier momento.

-Amor mío, ¿qué haces despierta tan temprano? Mejor duerme- dijo él, para después obligarme a apoyar mi cabeza en su pecho y así él después seguir durmiendo.

Era un flojo de primera, definitivamente.

-Levántate, hombre, es un hermoso día- reí, sobando mi frente con su tórax de manera que le hiciera cosquillas con mi cabello.

-No quiero- rió él en respuesta mientras me apegaba todavía más a él.

Si es que se podía... con lo gorda que andaba.

Recordé a Perrie y a Louis. Bueno... supongo que estaba obesa después de todo.

-No podemos pasar todo el día en cama- me quejé, haciendo un puchero a pesar de que él no viera mi gesto.

-Sí podemos- contraatacó Harry, para después bostezar.

-Flojo.

-Obesa.

-Feo.

-Horrenda.

-Te odio.

-Yo también te amo- dijo sarcásticamente, provocando mi risa.

-Levántate, feo- seguí insistiendo.

Él gimió consentido como un niño pequeño.

-¿Por qué me tengo que levantar?- se quejó.

-Porque es un bonito día- respondí simplemente, pasando mi brazo por encima de su cadera.

-El día está feo- dijo él frunciendo el ceño.

Solté una leve carcajada, entretenida por sus gestos y por el hecho de que Harold no se quisiera levantar por nada del mundo.

Levanté mi brazo y llevé mi mano a su cabeza, para luego acariciar sus rizos lentamente. Su cabello era tan sedoso, me encantaba.

Drunken Night [Jarry]Where stories live. Discover now