-dame la botella- dijo ella estirando la mano para aceptar aquella económica botella de champaña.
-¿Por qué brindaremos?- pregunte con una sonrisa, ____ se encogió de hombros.
-En algún lugar del mundo habrá un motivo para celebrar- respondió casi mostrando la encía en una exagerada sonrisa.
-esta borracha- afirme
-solo un poquito-
-tienes razón, ningún borracho aceptaría su estado de embriagues- ella rio- además solo tú podrías emborracharte con un chupito y una copa de vino- frunció el ceño
-oye, tú tienes la culpa por llevarme a cenar a ese lugar lleno de gente rara y observadora- se quejo malhumorada.
-nena, te dije mil veces que iríamos a un restaurant lujoso, ¿que esperabas?, aquellas personas no acostumbran a ver a una chica en tenis al menos que seas deportista o pertenezcas a su club de golf- ella bufo dejando sonar sus labios juntos por más que solo unos segundos
-me dolían los pies- respondió mostrando sus lindo pies mientras movía los dedos de atrás hacia adelante, me acerque para hacerle un masaje, pero, en cuanto mis manos tomaron su tobillo echa comenzó a convulsionar de la risa
-para, Harry me haces cosquillas-
-si apenas te he tocado loca- a esta altura yo tampoco podía estar serio
-déjame, estoy sensible- respondió volviendo a su habitual ceño fruncido, alejando sus pies de vuelta al suelo.
-eres una psicópata-
-gracias, que romántico, ya puedes arrodillarte y pedirme matrimonio- dijo con sorna, aunque sabía que estaba jugando, no pude evitar sentir que mi estomago se contrajera con la mención del compromiso.
-¿aun sigues siendo un idiota inmaduro?-
-cállate gema o no te sigo contando-
-va va, está bien, cuenta-
-tengo que irme ya- dije acercándome a ella, para cargarla y llevarla hasta su habitación
-quédate- susurro con su aliento sobre mi cuello, haciéndome estremecer- prometo no hacerte nada mientras estés inconsciente- dijo riendo, contagiándome de su risa.
-si es algo que me gustara adelante- ella volvió a reír como una niña dejando caer su cabeza hacia atrás.
-wii-
-creo que el tequila y el vino no son una buena combinación para ti-
-tu con lo que sea no son una buena combinación para mí- dijo mirándome fijamente, la deja caer sobre su cama
-¿a qué te refieres?-
-tu, simplemente me haces hacer cosas que nunca creí que haría- encogió sus hombros restándole importancia, pero, para mí no podía ser más importante
-cosas, ¿Qué tipo de cosas? ¿Cosas buenas?- pregunte, sumamente interesado.
-cosas buenas, ya duérmete-