Capítulo 4

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De pronto, mi móvil sonó, con la canción de Propuesta Indecente de Romeo Santos, lo miré y vi que el que me estaba llamando era Carlos.Se me aceleró el corazón, a ver que me tenía preparado ahora el tío.

-Bonjour madmuasel, coman sa va?

-¡Hola! - dije riéndome- Bien ¿y tu?

-Estoy abajo.

-¿Abajo dónde?- dije extrañada, pensé que sería en la playa o algo parecido.

-En tu puerta , abréme, princesa.

¿Que? En mi casa, el tío más guapo de mi pueblo va a tocar el timbre de mi casa.¡Qué locura! Fui hacia abajo , dispuesta a abrirle, cuando me di cuenta de que mi madre, suspuestamente estaba en casa, pero no, no estaba, se habría ido a comprar al super o algo.Entoces, corrí a abrir; cuando lo hice, se avalanzó sobre mi y me dio un cálido abrazo mañanero.

-Hola... me alegro de verte - le dije un poco avergonzada ya que mi casa parecía una perrera de lo desorganizada que estaba - No te fijes en lo desorganizada que esta mi casa, es que es sábado y mi madre ha salido a comprar seguramente.

-Osea, ¿que tu madre no está?- dijo esbozando una bonita sonrisa-¿Has desayunado?

-No, todavía no , iba a hacerlo pero como tú me llamaste...

-Pues ya tengo tu menú, croasans rellenos de chocolate,tortitas con nutella y zumo de naranja. ¿Te gusta?

-¡Claro, lo has hecho tú?

-Claro, me encanta cocinar, sobre todo los dulces.En mi casa tengo un libro enorme de recetas , si quieres te lo enseño un día y cocinamos juntos. ¿Te parece bien?

-Sí, pero en estas semanas no , que tengo demasiado exámenes y trabajos pendientes.Y encima hay asiganaturas que no se me dan precisamente bien.

-Yo te ayudo, claso, si quieres sino pues ya puedes buscarte otro profesor de asignaturas- dijo dándose aires de ser importante- ¿Comemos?

Lo miré y sonreí, que guapo es... que ganas tengo de... Antes de pensarlo ya tenía sus labios sobre los míos.

Lo aparté un poco y hablé con él:

-Carlos...¿No crees que estamos yendo demasiado rápido? Ayer mismo, por la mañana nos conocimos y por la noche ya estábamos saliendo, me gustas mu pero...¿No parece una locura?

-Si, pero como ya te dije, las grandes locuras se hacen por amor y ésta es una de ellas.

¿Te está gustando mi historia?Si es así, ¿Podrías comentar en este capítulo o marcarlo como favorito?Gracias <3

-También es verdad, de todas formas , supongo que ya... nos iremos conociendo.Tengo... una amiga que quiere saber uien eres- reí con verguenza, a él pareció haberle hecho gracia y sonrió.

-Bueno, que tal está la comida,¿te gusta?

-¡Me encanta, nunca había desayunado con tanta calidad!

Carlos rió, a lo mejor creyó que lo decía para darle el gusto,pero no .Nuenca he desayunado así, siempre son cereales con leche y chocolate, tostadas o a veces incluso galletas y zumo, pero croasanes y toritas ,nunca.Además, me sorprendía el hecho de que le gustara cocinar, lo hacía muy bien.

Parece que se le dan bien los dulces, a mi madre le va a encantar ese aspecto de él, ya que ella está cansada de cocinar.Siempre dice que mi padre y yo somos muy exigentes y que ella no es una cocinera de primera , sino que es una profesora/ama de casa y que no puede hacerlo todo a la vez. Varias veces he hecho el desayuno, el almuerzo o la cena para que mi madre descanse un poco y se tome unos minutos de relax.

Mientras terminábamos de desayunar,alguien llamó a la puerta de mi casa, me alarmé, podría ser mi madre, o peor , mi padre.Fui a abrir pero antes le dije a Carlos que se escondiera.Como sospechaba, abrí la puerta y apareció mi madre cargada de bolsas, la ayudé a subirlas y la lleve hasta el salón.Tuve que recoger todo lo del desayuno para que no se diera cuenta de nada de lo que había pasado, ella estaba en el salón y yo , fuera del alcance de su vista, así que llamé sigilosamente a Carlos para que me siguiera hasta abajo y se fuera.Íbamos caminando cuando me tropezé con una mesa y el golpe se oyó en toda la casa, por suerte, mi madre estaría tan casada que ni lo pudo oír.Le abrí la puerta y me despedí de él con un abrazo, ¡basta de besos por hoy!

-Adiós , guapa - dijo casi susurrándomelo al oído- No te olvides de mí, después a lo mejor te llamo.

-Shh, que se va a enterar mi madre- dije alarmada y con una pequeñaa sonrisa en la cara- Adiós, vete ya anda, si me pillan me castigan de por vida por no habérselo dicho, por favor.

-Vale,pero antes... ¡TE QUIERO!-gritó con todas sus fuerzas, me miró y se fue corriendo como un lince.

-Maldito...

Estaba furiosa, por qué hizo eso si le dije que no gritara ni hiciera ruido, me sentí tan mal que tenía ganas de gritar, pero que no se me oyera, asi que subí a mi cuarto , cerré la puerta, cogí una almohada me la puse en la cara con rabia y grité lo más fuerte que pude, me deshice de toda mi energía negativa, en realidad la mañana había sido perfecta pero me fastidió que hiciera eso.

-Sé que es muy romántico que no le de verguenza salir con una tía como yo, pero...

Me acosté en el suelo, estaba frío y hacía calor, mucho calor.Encendí el ventilador y me quité la sudadera que llevaba puesta.

-Que ganas de comerme un helado de chocolate, con caramelo y con manices...Bah, me da pereza bajar al pueblo, demasiado calor para hacer ejercicio.-dije con una sonrisa en la cara.

Mientras estaba acostada me estuve replanteando lo de ser novia de un chico al que todavía casi ni conozco, él me gustaba pero no creía que ser novios aún sin conocernos fuera la mejor idea, además si mi madre y mi padre me empiezan a preguntar y no sé que decir pensaran que estoy saliendo con un extraño.Por muy enamorada que estuviese de él, tenía que decirle lo que había pensado , dicen que el primer paso de una relación consiste en ser sincero con tu pareja, yo leía muchos libros de amor, por eso guiaba así mis pensamientos.

Cogí mi iPhone del cajón y lo encendí, escribí mi contraseña y busqué a Marcos en mis contactos, por unos instantes vacilé en si llamarlo o no sería una buena idea, nunca había tenido novio y a lo mejor ahora lo tengo voy y lo estropeo todo.Finalmente, pulsé en el círculo verde y comenzé a llamarle.

-Marcos...tenemos que hablar lo más pronto posible, pero por teléfono no, cara a cara.

-¿María? ¿Por qué dices eso? Estamos muy bien juntos, no hace falta hablar nada.

-Para mí sí hace falta, hoy a las seis de la tarde en la plaza de Guntesti, ¿vale?

-Vale, pero sigo pensando que...-lo interrumpí, mientras más oía sus palabras más me arrepentía y era algo que debía hacer , sí o sí.

-No faltes.

Y colgué, supe que se debe de haber sentido muy mal pero no hay otra solución, no puedo salir con un extraño.

Esa descarada sonrisa...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora