Tsuyu- Sus crushes.

4- Celos

Bakugou usualmente se levantaba antes que el resto de sus compañeros, para así poder aprovechar del patio en paz y utilizar su quirk solo. Pero ahora tenía una novia, y quería incorporarla a su rutina, la iba a llevar con él a todos lados. Claro, no sin antes proponérselo. No iba a simplemente ir a molestarla mientras dormía y forzarla a ir con él.

El chico estaba parado en su puerta, esperando pacientemente por ella. Habían decidido una hora a la que encontrarse, pero el chico se había emocionado demasiado y había terminado de aprontarse demasiado rápido. Suspiró y miró la hora en su reloj. Finalmente faltaban dos minutos para que ella saliera de su habitación y fuera a entrenar con él.

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Tsuyu mientras tanto había estado esperando sentada en su cama, mirando una pared por más de media hora. Ella creyó que le tomaría más tiempo aprontarse para su encuentro con su novio, y por ello terminó teniendo que esperar de más. Había puesto una alarma a la hora que tenía que salir, para no tener que estar chequeando su celular cada dos segundos.

Estaba pensando sobre su nueva relación. Bakugou era en realidad muy dulce. Quién habría pensado que Kirishima estaba en lo cierto, y que él que ahora era su novio realmente era un tsundere. Desearía haberse empezado a llevar bien con él mucho antes. Antes de Midoriya, antes de Kirishima.

Ambos querían pasar mucho tiempo juntos, por lo que Bakugou la había invitado a entrenar con él y seguir su rutina. Y ella alegremente aceptó su propuesta, sin ninguna duda. Ella también deseaba poder pasar más tiempo con él, y llegar a desayunar con el chico ya que creía que sería muy tierno.

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Era hora. Bakugou podía escuchar una canción muy relajante proviniendo del cuarto de su novia. La chica apagó su celular, abrió la puerta de la habitación y se sonrojó al ver que el chico la había estado esperando.

-"Bakugou-Chan, ¿hace cuánto que estás esperando allí?"- la chica dijo mientras cerraba la puerta y daba un paso más cerca a él. Croó.

-"Llámame Katsuki"- Tsuyu sonrió y lo tomó de la mano. Katsuki también se sonrojó un poco. Probablemente les tomaría algo de tiempo acostumbrarse a eso de ser novios. -"He estado esperándote por alrededor de veinte minutos"-

Ella se rió de él y el chico frunció el ceño. ¿Qué le pasaba a la tonta de su novia?, ¿¡era gracioso el que él la haya esperado por veinte malditos minutos!?

-"Katsuki-Chan..."- Él suspiró y fueron directo a desayunar. Ella tenía razón, si seguían con su charla no tendrían casi tiempo de entrenar. Pero no era como si no quisieran quedarse hablando allí por varias horas...

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El rubio se preparó leche chocolatada, huevos hervidos, fruta, cereales y otras cosas... La peliverde estaba sorprendida de que su desayuno fuera tan asombroso. Se podía ver claramente la determinación que él tenía de llegar a ser el mejor de todos. Y estaba algo avergonzada de sí misma por sólo comer algo de gelatina y tomar agua, pero Bakugou no la juzgaba.

Le compartió algo de fruta, a la vez que ella le ofreció algo de gelatina pero la rechazó.

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Ambos rápidamente lavaron lo que usaron y fueron al patio a entrenar. Katsuki no tenía tanto tiempo para entrenar como usualmente, pero no se podía quejar. Era la primera vez que hacían eso juntos, iban a lograr trabajar en los tiempos luego. Por lo menos habían pasado un muy bonito tiempo en el desayuno.