Marvel: Seré el Joker en el mundo de Marvel

cap 59

Capítulo 59 - ¡Encantado de conocerte!

"¡Ya dije que no necesito tu protección! Este supuesto payaso puede venir si quiere, pero ¿qué importa? ¿No tenía razón en lo que dije antes? En ese caso, ¿por qué debería ¿Le tienes miedo?!"

Huntley se sentó en su oficina y miró al Capitán América parado frente a él, vestido con mallas rojas, azules y blancas. Llevaba una media máscara con la letra "A".

Por alguna razón, apenas pronunció su discurso en las pantallas publicitarias de toda la ciudad, el Coronel Rhodes llegó a su lugar junto con el Capitán América.

Pero a los ojos de Huntley, el coronel Rhodes era solo un comandante en un ejército que de todos modos no le gustaba mucho.

Y después de que aprovechó la llamada armadura de batalla Iron Patriot creada por Tony Stark, Huntley comenzó a despreciar a Rhodes por completo.

Por supuesto, a Huntley no le importaban las armas de alta tecnología que producía Tony Stark. Pero estaba en contra de que el coronel Rhodes comenzara a apoyar a Iron Man.

En cada una de sus conferencias argumentó que “el mundo necesita superhéroes”.

Pero es simplemente ridículo.

Aún más absurdo, sin embargo, es el hecho de que hoy el Coronel Rhodes se llevó a un superhéroe con él para protegerlo.

Huntley hizo una mueca y levantó la barbilla, mirando al Capitán América.

"Senador Huntley, por mucho que nos gustaría, no hay nada que hacer, por su seguridad debemos hacerlo", dijo el coronel con una voz un tanto impotente.

Si no fuera por este maldito político que hizo un discurso tan loco, nunca habría venido aquí para recibir esas miradas en blanco.

¡Solo Dios sabe lo reacio que estaba el coronel Rhodes a asociarse con Huntley!

"¿Seguridad? Me enfrento a una de las criaturas más peligrosas del planeta en este momento, ¿y me estás diciendo que es por mi seguridad?" dijo Huntley con desprecio.

Después de decir eso, se puso de pie y enderezó su disfraz, "No creo en los superhéroes. Ahora necesito volver y descansar".

Sin embargo, tan pronto como Huntley dijo esto, Rogers se adelantó y lo detuvo. Luego de lo cual, completamente sin ninguna emoción, dijo: "Lo siento, asesor, pero aún no puede regresar".

"¿Qué estás haciendo? ¡¿Vas a limitar los poderes del consejero? ¡¿Encarcelar al futuro presidente ?!" Huntley respondió con algo de ira al ver al Capitán América bloqueando su camino.

Incluso el tono de su voz se volvió notablemente más molesto.

"Estoy tratando de mantenerte a salvo ", respondió Rogers sin rastro de emoción en voz baja.

"¡Así que ahora no me estás protegiendo! ¡Estás infringiendo la ley, ¿lo sabías?! ¡Ustedes, los llamados superhéroes, simplemente hacen lo que quieren porque tienen habilidades que la gente común no tiene!", se enfureció Huntley. Debido a la ira, sus emociones se volvieron locas y su rostro se puso rojo, perdiendo por completo su comportamiento anterior.

"Tengo que asegurarme de que estés a salvo ", sin embargo, Rogers también permaneció completamente indiferente.

Y ni siquiera es que el Capitán América no experimente la ira.

Es solo que en este momento no tenía otra forma de actuar de otra manera.

Nick Fury quería hablar con el Guasón.

Sin embargo, ninguno de ellos pudo encontrar al maldito payaso y todo SHIELD tenía un fuerte dolor de cabeza.

Pero resultó que un miembro del consejo, que no tenía miedo de morir, de repente tomó la iniciativa y provocó al Joker.

Aunque también causó un poco de dolor de cabeza... pero vale la pena señalar que el EA les brindó una gran oportunidad.

Por lo tanto, dada la naturaleza del payaso, definitivamente correría para tratar con este miembro del consejo.

Así, el Capitán América no solo protegió al Consejero Huntley, sino que también esperó al Guasón.

Sin embargo, Huntley le dio una gran cantidad de dolores de cabeza.

"Ya tengo tantos guardaespaldas, ¿necesito tu protección también? Por el contrario, ¡creo que será más seguro para mí si te quitas del camino!" El consejero Huntley gruñó fríamente mientras hablaba y se dirigió hacia la puerta con algo de ira.

El coronel Rhodes lanzó una mirada de impotencia a Rogers y se encogió de hombros.

El Capitán América no dijo nada, simplemente siguió al asesor.

"¡Solo quiero ir al baño! ¿Tienes que seguirme?" Huntley preguntó con severidad, dirigiendo su pregunta a Rogers.

"No voy a ir allí ", respondió el Capitán América.

Se entendía que no entraría en la misma cabina con él.

El concejal Huntley miró a Rogers con rencor en su corazón.

Luego, sin girar la cabeza, fue al baño.

Cuando llegó a la puerta, el senador Huntley miró hacia atrás y miró a Rogers.

Realmente se paró en la entrada.

El concejal Huntley le dirigió una mirada desdeñosa y se volvió para ir al baño.

Los baños en la Casa de Radiodifusión eran compartidos y abiertos.

Sólo había uno en el primer piso. Sin embargo, el interior es relativamente espacioso y está hecho según los estándares de los hoteles de primera clase.

Tan pronto como entró, el Concejal Huntley abrió el grifo del agua, haciendo un fuerte ruido.

Acto seguido, sacó su teléfono móvil y marcó un número.

"¡No me importa de qué manera lo vas a hacer!

……..

¡Este supuesto superhéroe que me está espiando, debe desaparecer!" - tan pronto como se respondió la llamada, el senador Huntley arremetió con rabia contra el hombre al otro lado de la línea.

Sin embargo, bajó la voz deliberadamente porque sintió que su vida estaría en peligro si Rogers podía escuchar esta conversación.

"PERO ......???"

El Senador Huntley continuó hablando cuando de repente sintió que alguien le palmeaba la espalda.

Esto lo hizo estremecerse, e inmediatamente se quedó en silencio.

Luego levantó lentamente la cabeza.

El espejo reflejó un rostro con mucho maquillaje de payaso.

Y no es que el Consejero Huntley no haya visto al hombre antes.

Por el contrario, lo conoce bien, aunque solo en videos.

Sin embargo, estos dos se conocieron en vivo por primera vez.

La boca de color rojo brillante se parecía más a un demonio devorador de hombres de cerca.

Esto hizo que la boca de Huntley se abriera de par en par, lista para gritar.

"Shhhh".

Luo Bing levantó el dedo índice de su mano izquierda y se lo llevó a la boca, emitiendo un leve silbido.

Con la mano derecha, sacó una pistola con silenciador de su cinturón y la acercó a la cabeza del senador Huntley.

"¿¡Pequeño monstruo!?" Se puso tenso, pero reprimió un grito.

Luego respiró hondo.

"Consejero Huntley, hola, es un placer conocerlo".