04

145 10 0
                                    

Extraña sensación 

Sofia estaba muy emocionada por la fiesta de bienvenida que se hará en la noche, antes de iniciar un nuevo semestre, todas las facultades preparaban una fiesta especialmente en un salón de la residencia del norte.

No tenia muchas ganas de ir, primero porque hacia frio y segundo porque no tenía nada que ponerme.

—Vamos párate de esa cama, ve a bañarte por favor—suplico Sofia.

—No tengo ganas de ir—hice un puchero.

—Por favor no quiero ir sola.

Después de que Sofia me sobornara con comprarme prostres accedí, me bañe y elegí algo lindo de mi armario.

No tenia mucha ropa de fiesta ya que nunca había ido a ninguna fiesta, así que lo más lindo que encontré fue un vestido azul oscuro, de tirantes.

Me llegaba por las rodillas, así que decidí ponerme ese, me puse tacones y un saco negro.

Me mire al espejo y la verdad me gusto como quedo, mi ojos negros resaltaban el color del vestido, mi piel blanca y mi cabello negro me gustaba, decidí hacerme unas ondas para ir un poco mas arreglada.

—Pero que guapísima vas y decías que no quieres ir a la fiesta—Sofia aplaudió al verme.

—Estas consiente que voy por ti—la mire por el espejo.

—¿segura por mí? —pregunto alzando una ceja.

—Si, ¿por quién más iría? —la regrese a ver.

—No sé, por cierto chico que conociste en la torre y casualmente vive en la residencia donde se va a ser la fiesta.

—Estas loca, es obvio que voy por ti—puse mis ojos en blanco.

—Está bien, no seguiré con el tema—sabía que lo decía en forma sarcástica.

Sofia se arreglo muy rápido, se puso un vestido negro algo apretado, tacones del mismo color y se hizo una cola alta.

Me maquille un poco, agarre mi bolsa y salí junto a mi amiga.

La residencia del norte quedaba detrás de la facultad de medicina, era un poco lejos ya que la universidad era muy grande.

Cuando llegamos ya había bastantes personas, chicos con vasos rojos, otros fumando y algunos simplemente conversando.

La música era muy alta, creo que era música electrónica. Cuando entramos al salón era muy grande, había un bar, el lugar vip que tenia sillones y solo era para personas exclusivas, también había una mesa llena de dulce y golosinas.

Varias personas bailan, saltaban, hacían juegos y todo eso tipo de cosas.

—¿Vamos a tomar algo?—Sofia tuvo que gritar por que no escuchaba absolutamente nada.

—Está bien—la seguí hasta la barra, sin embargo, no quería alcohol, así que solo me pedí un agua.

—¿Segura que no quieres un trago?—pregunto Sofia.

—No—. Negué.

—Sofia que gusto que hayas venido—una chica muy guapa se acercó a nosotras, tenías el cabello castaño, ojos verdes, piel blanca y llevaba un vestido que favorecía todo su cuerpo.

—Hola Jime—sañudo mi amiga. –Te presento a Ingrith—La salude de forma amable a lo que ella respondió mi saludo.

—¿Quieren ir a bailar? —pregunto Jimena.

Sonríe una ultima vezWhere stories live. Discover now