Meteor Shower

-Atentamente, Raine-

Tras ver a Amelié caer frente a mis ojos y no poder hacer nada, regresé a la realidad. Estaba de vuelta en la clase junto a Amelié y Evan, ella separó mi frente de la suya y dejó de palpar mi mejilla con su mano para dejarme mi espacio.

Me faltaba el aire y temblaba incontrolablemente, se había sentido demasiado real. Con mi mano alcancé mi pecho y arrugué la camisa sintiendo que mi corazón se saldría. A pesar de que en el fondo sabia como iba a terminar, me impactó demasiado verlo en primera persona, tan de cerca...

"Eso fue todo."

Miré hacia Amelié y sin pensármelo la tiré al suelo de un abrazo mientras seguía llorando.

—Había muchas otras soluciones Mel, muchísimas otras.

No podía dejar de llorar, quizás había ocurrido realmente hacía 30 años pero para mi acababa de ver frente a mis ojos como Amelié acababa con su propia vida y yo no podía hacer nada al respecto. Noté como ella al fin también comenzó a abrazarme, y su ira de antes se convertía en tristeza poco a poco. Volvió progresivamente a su forma normal mientras comenzaba a llorar también.

"¿Qué demonios ha pasado?"

Preguntó Evan, no era el mejor momento así que ninguna de las dos respondió, Evan se acercó y doblando sus rodillas para alcanzarnos nos rodeó a ambas con sus brazos sin entender nada. Al cabo de unos minutos nos separamos, y, sentada en el suelo, sequé mis lagrimas. Mi voz seguía quebradiza pero había logrado tranquilizarme un poco, seguía teniendo esa especie de espasmos con la nariz, como cuado tienes mocos.

"Raine, ¿ahora lo entiendes?"

—Ehh, depende de a qué refieras.

"¡Que te conocí en el pasado! ¡Es un bucle! Por eso sentía esa conexión desde el principio."

—... Espera qué, ¿TÚ TAMBIÉN SENTÍAS ESA CONEXIÓN? Pensaba que simplemente yo era una flipada que se enamora DEMASIADO rápido.

Me puse a pensar en ello, y tenía razón. Ella me conoció hace 30 años, bueno, conoció a la yo que conocía a su yo del futuro... Era un poco lioso de entender, ni si quiera yo lo hacía del todo, el punto estaba en que estuvimos conectadas desde el inicio. Cuando volví a la realidad después de enredarme en mis propios pensamientos, miré hacia Amelié la cual estaba boquiabierta y sonrojada por lo que había dicho antes. Al recordarlo, automáticamente me puse nerviosa, había hablado de manera demasiado transparente.

—¡PERDÓN! ¡No quería incomodarte con eso...!

Miré a Evan en busca de respuestas y puso cara de "No la cagues ahora, que te veo", así que pensé bien mis palabras. La tenía frente a mi mirándome con los ojos bien abiertos, como si estuviera esperando a que hiciera algo. Confundida, apoyé mi mano hacia delante para acercarme y aproximé mi cara a tan solo algunos centímetros de la suya mientras nuestras respiraciones se entrecortaban por no saber qué hacer. Probablemente era demasiado repentino porque estaba actuando instintivamente. Cerré mis ojos con fuerza y en un impulso acerqué mis labios hacia los suyos. El beso duró solo unos segundos de lo avergonzadas que estábamos ambas, después de eso se hizo un silencio incómodo por no saber que decir. Ella siguió callada, y como si pensara que ha sido un sueño tocó sus labios con sus dedos para comprobar que había sido real.