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IV

literature's teacher : O4.

—¿cómo podría ayudarme?—. preguntó, taehyung miró su teléfono al sentirlo vibrar.

—puedo ayudarte a repasar, estudiar o con tus tareas, dime que días tienes literatura y podríamos juntarnos luego de clase—. propuso.

jungkook encontraba tedioso tener que quedarse luego de las tres y media de la tarde, sobretodo porque debía tomar micro a su hogar y eran cada una hora.

pero era un tiempo con kim taehyung.

—me gustaría mucho, de verdad—. dijo y no mentía, lo tedioso de la situación se opacaba por la presencia de kim taehyung allí.

—¿qué días tienes literatura?—. preguntó viendo a jungkook buscar su horario.

—lunes y miércoles—. respondió, taehyung asintió antes de sonreírle.

—¿tienes tiempo los miércoles?—. preguntó y jungkook asintió sin dudarlo dos veces —y... sé que esto es algo que me prohíben hacer, ¿puedes darme tu número para acordar bien la hora y lugar?—. preguntó.

jungkook sintió su cuerpo llenarse de un sentimiento inexplicable.

—c-claro, no hay problema—. y recibió el teléfono de taehyung para anotar su número de teléfono.

cuando entregó el teléfono el timbre sonó terminando la hora de filosofía y con ella, la estadía de taehyung allí.

—gracias—. le dijo con una sonrisa ordenando sus cosas —seojoon dijo que las guías se las queden ustedes—. comentó apuntando las guías en las manos de jungkook.

el azabache asintió viendo como se dirigía a la puerta con sus cosas en brazos, viéndose tan perfecto como siempre.

—guarden bien sus guías, adiós—. se despidió de todos antes de desaparecer.

jungkook se quedó en su lugar, procesando todo lo que había sucedido en aquella media hora, los brazos de yoongi le devolvieron a la realidad.

—¡jeon jungkook, eres mi ídolo!—. baekhyun exclamó agitando su cuerpo de un lado a otro.

yoongi carcajeaba y mingyu sonreía al verles.

—dime que tanto veías en su teléfono—. pidió el castaño, sus ojos demostraban su emoción.

—vi fotos de sus pinturas, su cachorro y... pidió mi número para clases de literatura fuera del horario de clase de ambos—. respondió.

el rostro sorprendido de sus amigos le hizo reír procesando todo aquello.

sin duda era su día.

.

jungkook había recibido esa misma tarde un mensaje de su profesor donde le decía que se juntaran en el salón de profesores a las tres y treinta y cinco minutos.

aceptó sin dudarlo y le deseo una buena noche a taehyung antes de despedirse.

aquel día miércoles esperó con ansias la salida de clases y eso no pasó desapercibido por sus amigos quienes no dudaban en molestarle.

el timbre de salida sonó en todo el liceo y jungkook empezó a guardar todo con rapidez.

yoongi, a su lado, parecía divertido con la situación mientras arreglaba todo con pereza.

había estado tomando una siesta.

—no hagas el ridículo, he ganado mucha plata por confiar en ti—. le dijo yoongi antes de pasar por detrás de él y apretar uno de sus glúteos como normalmente lo hacía.

se despidió de mingyu y baekhyun antes de salir del salón directo a la sala de profesores.

esperó unos minutos hasta que vio la cabellera de taehyung acercarse, se levantó de la banca en la que esperaba y sonrió en su dirección.

taehyung alzó su mano en forma de saludo antes de abrir la puerta donde algunos profesores aún guardaban sus cosas.

—¿darás clases?—. preguntó una bonita mujer que le sonrió a jungkook como saludo.

—así es, jungkook es un excelente alumno y solamente le falta subir su promedio de literatura para ser el mejor—. comentó taehyung, quizá orgulloso del estudiante a pesar de no hacerle clases.

—siempre tan generoso—. la mujer le sonrió arrugando su nariz antes de despedirse y dejarles a solas.

—¿ella de qué es profesora?—. preguntó sentándose junto a taehyung.

—hace clases de gastronomía en inglés—. le respondió —¿cómo estuvo tu día?—.

—estuvo bien, aunque estoy complicado por literatura, como deberá imaginar—. respondió soltando una suave risa que acompañó la de taehyung.

—están dando sus últimos exámenes para cerrar el año, ¿cierto?—. preguntó recibiendo un afirmación —oí que tu profesor de literatura pensaba en una lectura a voz alzada de algún relato o fragmento de su preferencia—.

—así es, estuve pensando en la lectura que quería entregar pero, debo admitir que es complicado porque mis lecturas son limitadas, y aunque el profesor dio la opción de crear nuestro relato, es difícil para mi expresarme en palabras—. comentó y taehyung asintió.

—lo entiendo, sería más fácil en pintura—. afirmó y jungkook asintió sonriente —si te gusta la idea, podría prestarte uno de mis escritos—. dijo, sus mejillas tiñendose de rosa.

jungkook le observó como si fuera lo más hermoso que podría haber visto en el día y quizá lo era, kim taehyung era hermoso por naturaleza pero la timidez plasmada en su rostro le hacía etéreo.

—¿de verdad?—. preguntó luego de unos segundos donde tuvo que conservar la compostura, sus pensamientos no ayudaban, llevándole a lugares y escenarios donde solamente eran ambos en distintos contextos.

—no es por presumir, pero escribir se me da bien y aunque no estoy conforme con la mayoría de mis escritos, podría dejarte elegir uno que gustes—. le dijo.

jungkook no dudó, tener aquella oportunidad no era la de todos los días y eso significaba solamente más cosas en común con su profesor.

no había por donde perderse.

—me encantaría, de verdad—. se sinceró y taehyung le sonrió tan hermosamente.

esperaba que su suspiro pasara desapercibido.

— koocinnamon.