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V

literature's teacher : O5.

era cerca del mediodía, estaba en su clase de matemáticas cuando la puerta fue tocada suavemente, no alzó su mirada.

estaba concentrado en los ejercicios que debía realizar junto a sus amigos.

—jeon jungkook—. escuchó la voz de la profesora, alzó su mirada a la puerta encontrándose allí con aquellos ojos avellana.

su cuerpo sintió un pequeño cosquilleo, se levantó sintiendo su rostro arder fuertemente.

salió del salón donde taehyung le sonrió en grande, sostenía una libreta en manos.

—hola, ¿necesita algo?—. preguntó, tratando de no sonar nervioso, la mirada de todos sus compañeros sobre él no le gustaba.

—algo así, venía a dejarte esto para que leas todos mis escritos y puedas elegir uno—. le entregó la libreta y jungkook la tomó tembloroso.

—muchas gracias—. agradeció sonriendo, sus mejillas aún prendidas en rojo —se lo entregaré lo antes posible—. aseguró.

—oh no, no te preocupes—. el profesor de literatura negó —es una copia de los que más me gustan, puedes quedártela, yo tengo los originales en casa—. comentó —por eso demoré en entregártelo—.

jungkook asintió al comprender, por eso se lo estaba entregando un día viernes.

—de verdad gracias—. no sabía que más decir, su cabeza estaba en blanco por la repentina aparición del hombre en su día.

—no hay de que, háblame cualquier cosa—. dijo como despedida antes de alejarse dedicándole una última sonrisa.

jungkook suspiró, como una chiquilla enamorada, y quizá lo era.

entró nuevamente al salón bajo la mirada divertida de sus amigos, se sentó junto a yoongi quien picoteo sus costillas.

—eres todo un galán—. bromeó baekhyun riendo junto a yoongi, mingyu sonreía divertido por la situación.

—seremos millonarios si sigues a este paso—. dijo yoongi rodeando sus hombros.

—apostamos nuevamente ya que quedan dos semanas para cerrar el año y obviamente, yo soy el que más fe te tiene—. volvió a hablar yoongi.

el azabache rodó sus ojos sonriente, no podía decir que él no tenía ilusiones estúpidas en su corazón y sabía que aquello solamente le llevaría a un muy doloroso final.

pero ¿qué más daba?, sería feliz aquellas dos semanas que quedaban del mes.

.

—elegí el tercer escrito que me dio, creo que es muy bueno y expresa mi situación actual—. dijo jungkook señalando aquella página a taehyung quien sonreía como siempre.

las palabras describían perfectamente como era un amor no correspondido y dolía saber que, quizá, kim taehyung había escrito aquello pensando en su prometido en un pasado incierto.

aquella solamente hizo más fuerte el impacto de las palabras en su corazón.

—ese lo escribí hace algunos años, me gusta mucho porque era un joven con ilusiones y esperanzas que un adulto no tiene—. comentó y jungkook asintió entendiendo.

—pero usted aún es joven—. murmuró, el profesor de literatura le miró unos segundos antes de soltar una risa nasal.

—voy por los treinta, señorito—. taehyung le dijo alzando sus cejas.

—oh vamos, treinta es joven—. le dijo riendo cuando taehyung lo hizo —la edad es solamente un número, lo importante es como y que sienta el alma—.

—¿quieres decir que tengo alma joven?—. preguntó, sonriendo divertido.

jungkook se sentía dichoso de tenerle bromeando un miércoles por la tarde.

—quiero decir, profesor—. se acomodó en su silla relamiendo sus labios —que usted es joven—. hizo énfasis en el "es" —la edad es una excusa para colocar limitaciones—.

taehyung le observó unos segundos que parecieron minutos, sus ojos analizando al adolescentes frente a él.

—entonces deja de tratarme de usted, no me molesta pero solamente me recuerda que soy más viejo—. dijo, como petición.

—oh, será difícil—. murmuró el azabache arrugando un poco su nariz —he estado acostumbrado a tratarle de usted por seis años, podría cambiarlo pero costará un largo tiempo y no tengo demasiado tiempo—.

—cierto, saldrás antes—. lo dijo en un murmuro, como si hubiera olvidado aquello.

—igual lo intentaré—. aseguró y taehyung asintió en su dirección.

ambos salieron de allí mientras hablaban de cosas triviales, hace algunos días jungkook le había comentado sobre su gusto por wave to earth y taehyung se dedicó a oír las canciones.

ahora tenían otra cosa en común.

jungkook amaba eso.

—estaba pensando en—. taehyung miró una cafetería cercana —que podríamos ir a beber un café—. propuso.

jungkook le miró atónito, no podía procesar del todo aquello.

¿kim taehyung invitándole a un café?

—tengo tiempo libre, no sé si tú lo tengas—. el castaño dijo, sus mejillas se habían teñido de rosa por salirse del protocolo profesional.

jungkook claramente no tenía el tiempo.

—estoy libre—. aseguró y taehyung hizo una seña en dirección a la cafetería que quedaba a una cuadra.

ambos fueron allí y jungkook no pudo haber sido el más feliz con taehyung frente a él bebiendo un café y hablándole de cosas personales.

el azabache tuteando a su mayor cada vez que recordaba la solicitud de el castaño.

y se sentía pleno y completo.

— koocinnamon.