Doug y Jeff

279K 24.7K 20.1K
                                    


Doug y Jeff.


20 de octubre, 2013

—Por favor, solo tenlo un momento para prepararle el biberón— pido por enésima vez a Ethan mientras Jeff no deja de llorar.

—Esta llorando.

— ¡Ethan! Tiene hambre, sostenlo.

—Dime cómo hacer el biberón, yo lo hago.

—Esto vas a pagármelo un día— digo antes de comenzar a decir cómo hacer la comida para mi hijo. Cuando tiene el biberón listo y se lo doy comienza a comer con desesperación—. Ah, mira. Tenía hambre por culpa del tío Ethan.

—Claro porque yo controlo su estómago.

—Espero cuando crezca le des los mejores regalos si no quieres que le diga que te negaste a cargarlo cuando estaba famélico.

—Manipulador— lo mira con fijeza—. Creo que si se va a quedar rubio.

—Yo también lo creo.

Lo observo mientras come. Hoy cumple un mes y aun cuando ha crecido para mi se sigue sintiendo pequeño y frágil. Extrañamente creo que aun cuando con Hilary lloraba todo el tiempo, parece extrañarla por las noches en donde siempre parece inquieto. Supongo que se ha acostumbrado a ella.

Seguro que ahora puedo entender muchísimo a Hilary. Solo han sido un par de días y ya experimento la falta de sueño, camisas llenas de vómito de bebé. Muchos pañales sucios en la basura y un montón de miedo a que se me caiga cada vez que voy a bañarlo.

Sin contar los momentos frustrantes en los que no sé si ya terminó de botar todo sus gases. Ethan aun cuando no tiene práctica y parece no querer acercarse lo suficiente, por alguna razón conoce toda la teoría de lo que hay que hacer.

Cuando le pregunté cómo sabía dijo que al enterarse de April se nutrió de toda la información posible para hacérsela saber a ella, porque él evidentemente no iba a hacer nada con la información. Algo muy Ethan.

Camino hasta el sofá y él me sigue sentándose a mi lado. Con su atenta mirada en Jeff.

—Tranquilo Ethan, Rayito no va a ahogarse.

—Hombre es que él es tan...lindo que no parece tu hijo.

—Imbécil, yo soy digno de ser su padre.

—Ajá, pero seguro que la belleza de Hilary ayudó mucho.

—Ahora, eso no voy a negarlo— no puedo evitar bostezar— ¿Has visto a Hilary?

—No, pero sé que ya empezó sus sesiones con el psicólogo.

—Si, también lo sé.

Jeff termina de succionar y procedo a mi mayor sufrimiento: adivinar si bota o no todos los malditos gases.

—Dos deberían ser suficientes, si él llora entonces hay un tercero— dice Ethan notando mi sufrimiento sin saber si ha acabado de liberar todos.

—Amigo, gracias por ser un loco que buscó información de bebé para arrojarla a su mejor amiga.

Ubico a Jeff sobre mi pecho mientras me recuesto del sofá. Cierro mis ojos solo un momento. Entonces siento el flash.

— ¿Qué haces?

—De algún modo Hilary debe saber que su bebé esta bien, voy a enviarle la foto para que sepa que mal, no lo estás haciendo.

—Esa es una buena idea Ethan.

Escenas extras de El deseo Prohibido de DougWhere stories live. Discover now