Razones para ser feliz

293K 24.2K 9.9K
                                    

Razones para ser feliz.


14 de diciembre, 2013

— ¿Qué te parece?— pregunto con las manos sosteniendo mi barbilla. Mamá sonríe, creo que sus ojos se humedecen. Ahí viene el llanto.

—Es hermoso, estoy segura de que a ella va a encantarle.

—Eso espero.

— ¿Cuándo vas a pedírselo? ¿Por qué aun no lo has hecho?

—No lo sé, todos están concentrados en la boda de Harry. Es el momento Karry— río—. Hemos vuelto muy recientemente y no he sentido que sea el momento.

Ella cierra con cuidado la pequeña caja y me la entrega. La envuelvo en mis dedos y la evalúo. Vivo pensando cuándo ese anillo rodeará el dedo de Hilary.

Mamá camina hasta mi y me abraza, envuelvo mis brazos a su alrededor correspondiendo el abrazo.

—Has crecido tanto cariño y sigues siendo mi Doug. Me llenas de mucho orgullo. Hubo un tiempo en el que temí no haber estado haciéndolo bien, en el que odié el entorno en el que se rodeaban.

—Lo has hecho más que bien. Yo estoy orgulloso de ti.

Besa mi frente sin dejar de abrazarme. No puedo evitar sonreír ante el pensamiento que pasa por mi cabeza.

— ¿Por qué no estás siendo amable con Hunter?

—No entiendo.

—Si. Para Hunter no hay pastel, desayunos o tomarse un mechón de cabello.

—Ni te atrevas...

—Comenzaré a pensar que tienes preferencias en mis guardaespaldas.

En pocos segundos una de sus manos esta en mi barbilla y la otra tirando de mi cabello. Hago una mueca.

—No olvides que soy tu mamá.

—No lo olvido. Y tampoco olvido que Pet parece ser tu guardaespaldas favorito.

— ¡Doug Nicholas! No tú también, suficiente con Jeremy.

Río y abro muchos mis ojos, noto que lucha con una sonrisa, las esquinas de sus ojos se arrugan. Me gusta este momento.

—No me importa. Si decides que es tu guardaespaldas favorito, no me importa. Porque es un hombre asombroso y porque yo quiero que tú seas feliz.

— ¿Qué?

—No me importaría si tú decidieras... ¿Ser más amable con Pet?— intento haciéndola reír—. No le guardaría rencor, el pobre hombre nunca tuvo oportunidad de no caer en tus encantos.

—Oh ¿Estamos teniendo esta conversación? ¡Yo soy la mamá!

—Si, pero yo te estoy dando mi bendición, no te quejes.

—Pórtate bien ¿Si?— pregunta peinando mi cabello.

—Soy un ángel, tú muy bien lo sabes.

—Un ángel con el camino desviado, seguro— se ríe alejándose.

***

16 de diciembre, 2013

— ¿Quién es el bebé de mami? ¡Jeff!— dice Hilary antes de acercarse y besar su mejilla, él ríe.

— ¿No soy yo tú bebé?—bromeo, ella voltea notando mi presencia.

— ¿Cuándo llegaste?

—Llevo cinco minutos observándote con Rayito— entro a la habitación y me inclino dejando un beso en su boca—.Uhm... sabes a chocolate.

Escenas extras de El deseo Prohibido de DougWhere stories live. Discover now