Capítulo treinta y dos

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Capítulo treinta y dos.

12 de junio, 2015.

— ¿Crees que olvidarán venir por mí?

Skylie parece genuinamente preocupada, así que envío con rapidez el mensaje a Leslie y le doy atención a la niña impaciente que aparece frente a mí luego de un baño. Alzo la vista y Dexter rueda sus ojos y me dice que niegue.

—No. Ellos no van a olvidar venir por ti, dudo que Harry haga eso.

—Ah, porque Dan prometió que iríamos por helados y juego, Halle dijo que sí —Me explica, luego estira su pequeño pie frente a mí—. ¿Me ayudas? Olvido cómo amarrar mis lindos cordones ¿Viste que brillan?

—Son muy bonitos.

Me levanto de la silla y me agacho para poder amarrar sus cordones, sus pequeñas manos se posan en mi hombro para sostenerse. Le explico cómo hacerlo y ella escucha atenta, cuando termino, besa mi mejilla en agradecimiento. Se gira hacia Dexter, para luego llevar sus manos a su cabello húmedo.

—Debes peinarme, Rojo.

—Debo hacerlo —Se ríe—. Ve por un cepillo que luche con tu cabello —Bromea, porque el cabello de Skylie de hecho es fino y muy lacio.

Sky va corriendo por un cepillo, Dexter se deja caer a mi lado, en el sofá, golpea su pierna con la mía. Le sonrío, pero estoy tensa porque en el fondo de mí, no olvido que le pedí nos viéramos hoy para conversar sobre las cosas que han estado sucediendo en mi entorno.

—Estás un poco callada y no es que seas Grace hablando a lo loco, pero es una jodida cosa rara en ti.

—Solo estaba pensando.

—Bien, hablaremos apenas el bastardo de ojos azules venga por ella.

Asiento en acuerdo. Harry quedó de pasar junto a su esposa por Skylie, puesto que tienen unos bonitos planes para darles diversión a los niños el día de hoy. Estoy muy segura de que Skylie lo pasará increíble. Dexter toma mi mano y besa mis nudillos antes de darme una sonrisa que incluye su hoyuelo. Me inclino y le doy un beso rápido. Skylie viene de regreso mostrando el cepillo como un trofeo.

Ella se deja caer en cojín que Dexter ubica en el suelo frente a él, deja unas colas, cintas y otras cosas al lado de él, mientras yo observo embelesada como con mucha concentración y cuidado, Dexter cepilla su cabello. No me pierdo ningún detalle sobre cómo toma un pequeño mechón del lado izquierdo del cabello de Skylie, lo trenza y luego lo deja fijo en su cabeza con un lazo rojo que combina con la camisa que ella lleva. Cepilla el resto de su cabello y sonríe muy complacido antes de repetir el mismo proceso con un mechón del otro lado de su cabeza.

El timbre de su apartamento suena y me pide que abra por él, cuando lo hago lo primero que hay es un grito de "hola" que alarga la última vocal, se trata de Halle que me sonríe mientras abraza a su hermano que parece resignado y me da una pequeña sonrisa. Me encantan estos niños.

Les devuelvo el saludo y me hago a un lado para que pasen, saludo a Harry y a Kaethennis, cierro la puerta detrás de mí. Los niños ya se encuentran alrededor de Skylie y ella ríe. Dexter les saca una foto y sonríe con los resultados. La confianza en esta familia no se niega, Kaethennis camina hasta la cocina y cuando vuelve trae consigo un vaso de agua.

— ¿A qué hora vas a traerla? —pregunta Dexter a su hermano.

—Luego de la hora de la cena, debería estar totalmente agotada para cuando vuelva a casa. Quizá, tienes suerte y llegue dormida —Harry baja la vista hacia el niño que tira de su pantalón.

La D no es por Dexter (BG.5 libro #4)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora