Un Accidente El Conocernos

Arriesguemonos

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Calle despertó por la alarma, se levantó y fue a la cocina para desayunar, se dio cuenta de que Tuti ya había salido, terminó de alistarse lo más rápido que pudo y empacó sus maletas, cuando volviera del trabajo las recogería e iría a buscar donde quedarse.

Llegó a la empresa y en recepción no estaba Tuti, tal vez estaba arriba con Poche, así que dejó su bolso y subió, pero ahí sólo estaba Poche

- Hoooola Dani, que sorpresa - fue hacia ella y le dio un beso en la mejilla

- Hola, estoy buscando a Tuti ¿La has visto?

- Si, Adrián se la llevó porque tienen una reunión externa con el dueño de la empresa

¡Con su padre! Pensó

- Hmm ya

- Me encargaron que este abajo acompañándote, más bien aprendiendo, pero como alguien debe estar en recepción, no puedes estar aquí arriba enseñándome

- Claro, te espero abajo

Al poco tiempo de que Calle estaba en su puesto llegó Poche a ocupar el de Tuti

- Bueno básicamente tú eres asistente, así que las labores de recepcionista no te las voy a enseñar

- Entiendo... espera ¿Tu ocupas ambos cargos?

- De hecho Tuti y yo ocupamos ambos cargos... Resumiendo la historia, yo estoy en periodo de prueba por haber llegado tarde a mi entrevista, Adrián me iba a dejar como su asistente pero yo no lo acepté, así que él por no darme toda la razón nos tiene en prueba junto a Tuti para decidir luego de un mes que puesto nos deja

- ¿Por qué llegaste tarde esa vez?

Si le contara porque lo hizo, sonó el teléfono y era Adrián para solicitar un dato, luego colgó

- ¿Qué has pensado del baile?

- ¿A que te refieres?

- A volver a ensayar

- No lo creo, cualquier lesión puede ser grave para mis huesos

Calle trato de animarla para que volviera a practicar pero no lo consiguió. Pasó la mañana explicándole cosas del trabajo y preguntandole sobre su familia, luego salieron a almorzar

- Casi se me olvida, Vale te envío saludos

- Qué linda, mandale también saludos de mi parte

- Claro que sí, desde el hospital se ha querido volver a ver contigo, creo que ya te considera su amiga

- Vaya que alago en verdad, después de cómo me miraba al comienzo en el hospital

- Jajaja Sí ella es así, ni te imaginas cómo fue con Pau o Cristóbal o hasta con Adrián y ahora resulta ser su mejor amigo

- Uff entonces de entrada es complicada con todos, tal vez busca protegerte de quien te va a rodear y hasta que pasen por su filtro son buenas para ti

- Oye si, puede ser

- Te habrá ahuyentado muchos novios

Hubo un silencio incómodo por algún tiempo

- la verdad es que no, jamás he tenido pareja

- Oh, pues... bien

Continuaron el almuerzo con menos palabras de las esperadas, luego volvieron a la oficina

- ¿Vas a quedarte lo que queda del día callada? - dijo Poche - ¿Tan extraña fue mi respuesta?

- No, no es eso, es que pensé te había incómodado

- Pues no, hasta que te quedaste sin tema de conversación - subieron al ascensor para ir por unos documentos en el escritorio de Zurita

- Lo siento, en verdad no era mi intención

Llegaron al otro piso y antes de abrir la oficina de Zurita, Poche miro a Calle

- Deja que te pregunte algo, y contesta con toda sinceridad

- Claro, si así quedamos a pases

- ¿Eres heterosexual?

Y esa pregunta ¿A qué se debía?, con su respuesta podría alejarse o...

- No, soy bisexual

Sintió un peso en su pecho que la empujó hacia adentro de la oficina y en un movimiento ágil estaba contra la puerta cerrada, y muy cerca a ella estaba Poche sujetandola de la cintura contra la puerta, se acercó lentamente hacia sus labios, Calle cerró los ojos esperando volver a sentir sus labios, pocos centímetros las separaban

- Esto es por el incómodo silencio después de tu pregunta - dijo Poche

Faltaban solo milímetros para que se besaran, pero Poche tomó la perilla de la puerta, abrió y ante la mirada desconcertada de Daniela salió, no sin antes picarle el ojo y sonreírle con picardía. Calle fue al escritorio lo más rápido que pudo por el archivo que habían ido buscando y bajo para encarar a Poche.

Allí estaba, en la silla que era de Tuti, fue a hablarle pero justo llegaron Adrián, Zurita y Tuti

- Buenas tardes damiselas - Zurita fue el primero en saludar - Poche vamos arriba que tengo mucho por hacer y no quiero salir tarde

- Si señor. Chao - se despidió de los demás presentes, cuando pasó por el lado de Daniela le rozó la mano

Adrián se quedó un rato más pero luego fue a su oficina

- Tuti ¿Estás molesta?

- ¿Debería? ¿Acaso alguien en quien confiaba resulta que me ha mentido desde hace como dos semanas?

- Perdona, pero entiendeme también

- Ahora no quiero hablar de eso ¿Si?, como dijo el doctor Zurita hay mucho por hacer y no quiero irme tarde

Fijó su mirada en el computador y luego de unos minutos volvió a ver a Calle

- Por cierto, conocí a tú padre, se parecen bastante... calculadores y en todo ven un negocio

Calle iba a opinar pero prefirió dejar así, Tuti necesitaba desahogarse y lo estaba haciendo.

Minutos más tarde recibió un correo:
"No te enojes por mi venganza", sabía que era de Poche. Más claro no podía ser, tenía una oportunidad con ella y no la iba a desaprovechar, asi que haría lo que debió hacer en un principio.

Pov. Poche

Después de que le envié el correo a Daniela, Zurita empezó a bombardearme con tareas, así que no tuve tiempo de bajar a verla.

Como tres días después de que ella no volviera al hospital a verme y por pensar en ello todo el día, al final concluí que me gustaba, por más loco que parezca me había enamorado de ella con sólo haberla visto dos veces.

Cuándo me dieron de alta y pude volver a casa, les comenté a mi familia que era bisexual, lo aceptaron muy bien, de hecho hicieron algún que otro chiste porque casi acababa de salir del coma y resultaba con esa noticia, pero es que el verdadero motivo fue Daniela.

Anoche luego de dejarla en su casa, hablé con Cristóbal de lo que me había pasado con ella y sobre lo que yo sentía, me impulso a aventarme e intentar algo con ella. Sin más rodeo me propuse intentarlo.

Llegó la hora de salida y me alisté lo más rápido que pude, me despedí de mi jefe y bajé, pero ya no estaba Daniela, le pregunté a Tuti por ella y me dijo que ya se había ido, en ese momento salió Adrián de su oficina y nos fuimos los tres.