Requiem a una nereida

8 0 0
                                    

Telarañas de unos cuencos olvidados
mirando hacia un mar que no le mira
remando por el cielo va enviando
telegramas entre pestañas y párpados.

Gaviotas mensajeras llegan por el delta
cantando como delfines alados
a un mar sordo de su cantar marino,
réquiem de un entierro salado.

Nereida que nada
en sus propias lágrimas
pues hasta Poseidón le ha olvidado.
Sirena que por cama tiene una caracola
y por corazón un rompeolas oxidado.

Letras inundadasOnde histórias criam vida. Descubra agora