La chica de los lobos

Capítulo 7: Mentiras

Narra Sara:

Llegué a casa, estaba enfadada a decir verdad, porque me abrí totalmente a Juli y ella duda de mi, aunque fuera mentira todo lo que le había dicho me molestó, nunca hablaba de mis sentimientos con nadie...Pero que ahora lo hiciese y dudara de mí no me gusta.

Llegué a casa y mis tios me echaron la bronca por de desaparición de ayer, yo fingí que les escuchaba porque en realidad no quería escucharlos, me estaba agobiando con tantos problemas, ahora le tengo que mentir a Juli, fingir que tengo novio, mentirles a mis tios tambien y proteger a los lobos de ese patán...Me estoy estresando.

-No puedes coger y desaparecer así porque sí, ¿Tu sabes lo preocupada que estaba?- mi tía esperó una respuesta pero yo como no estaba escuchándola no respondí-

-¿Me estás escuchando?-yo me imaginé lo que pudo haber dicho y empecé a atenderla-

-Sí tía, te estoy escuchando- dije con desganez-

-No quiero que vuelvas a hacer eso, casi llamo a la policía-

-Vale, no volveré a hacer- sabía que mentía, obviamente me iba a ir, no me gusta estar aquí, prefiero ir al bosque, después por la noche me iré otra vez-

-Sara estás castigada- mi tío acaba de tomar la palabra-

-¿¡Que!?.. Pero si no fue para tanto, solo estuve estudiando con Juli y me pasé de la hora, despues me dí cuenta y os avisé...Porfavor no me hagais esto-

-Sara...No nos puedes mentir así- dijo mi tía-

-¿Perdón?-

-Ayer llamé a la madre de Julia y me dijo que tu nunca pasaste por su casa anoche-

-No no...Es que Miriam llegó por la noche cuando nosotras ya estabamos durmiendo, por eso no me vio-

-Está bien...No te castigaré si me dices en que piso vive Julia- mierda ahí me había pillado, no tenía ni idea, lo pensé hasta que me dí cuenta-

-Pregunta trampa...Julia vive en una casa- dije convencida-

-Está bien...¿Que le pasó a tu bici? Está echa trizas-

-Em...Ayer me caí de camino a casa de Julia, por eso está así, pero tranquilos ahora la limpio- dije rápidamente, soy una buena mentirosa, pero no me gusta usar esa virtud, la considero muy fea en algunas ocasiones y salvadora en la gran mayoría-

-Sabes que en el trayecto en bici a casa de Julia no hay tierra- estaba muerta porque es verdad, no lo había pensado, ahora si que estoy castigada-

-¿Porqué nos mientes tanto Sara?- dice otra vez mi tía, la veía apenada, me daba pena porque ella desde siempre sabe que miento para safarme de estar con ellos para estar en el bosque-

-Escuchad, es dificil para mi todo esto, así que porfavor dejad de preguntarme siempre a donde voy o que hago, me agobiais mucho, por eso os miento- no les miré a la cara porque de verdad ne sentía así, era horrible que siempre me estuvieran vigilando-

-Sara, no puedo consentir que siempre me estés mintiendo a mí y a Marina, así que de ahora en adelante te prohibo salir de esta casa, así aprenderás a no mentirnos-

-Carlos...No me hagas esto, sabes que siempre estoy fuera-

-Por eso mismo, ahora estudia y vete para tu cuarto-

Los miré con desprecio, saben perfectamente que odio quedarme aquí, a parte es fin de semana, no voy a estudiar cuando puedo descansar, ya me agobio 5 días a la semana así que estos dos los voy a disfrutar sí o sí.

Me fui a mi cuarto a dibujar para esperar que se hiciera de noche, mis tios se pusieron a ver series en Netflix así que yo tenía vía libre para coger mi mochila, comida, ropa cómoda y mi movil sin que se dieran cuenta, eran las 23:00, mis tios ya casi estaban dormidos, salí por la ventana de su habitación y no escucharon ya que estaban en el salón, cogí mi bicicleta y pedaleé hacia mi segunda casa.

Tiré la bici donde siempre y empecé a andar rápidamente, llegué a la cueva, los lobos estaban allí, les saludé y les dí de comer, de paso también comí con ellos, estaban bien, me alegra saberlo, pregunto donde estará ese ladrón y como se llamará...Tenía muchas preguntas sobre él.

Estaba algo agobiada porque me doy cuenta de que le tengo que mentir a todos mis seres queridos...Me duele, pero es lo mejor, siento como que estoy atada a un peso, pero supongo que se me pasaría cuando pase el tiempo.

Acabé de comer y salí a ver la luna al lago, hoy me parecía mas bonito que nunca, todo brillaba y se reflejaba en el lago, esto me acoge y me hace olvidarme de mis problemas temporalmente...Si ella estuviera aquí seguro que le encantaría este lago, la echo tanto de menos...Se me escapó una lágrima, pero me froté la cara suavemente y miré a las estrellas.

Al rato vinieron los lobos, hoy estaban juguetones así que jugué con ellos, los quería un montón, son una de las mejores cosas que tengo. De tanto jugar al final me acabé cansando, miré a mi alrededor y me di cuenta de que estaba perdida, no me preocupé porque me suele pasar, esa zona nunca la había visto, era mucho mas oscura que cualquier otra parte del bosque.

Empecé a escuchar voces, procedian de una pequeña casa, nunca la había visto, se me ocurrió entrar y ver si me podian guiar hacia alguna parte, pero la mejor opción era meterse en un arbusto disimuladamente y ver que pasaba.

Me metí en un arbusto, no veía muy bien lo que había dentro de la casa pero sí que escuchaba lo que decían...Fijé mi mirada en una persona muy grande, estaba cubierto de una tela muy negra y una máscara roja, sabía quien podía estar allí.