Me Enamoré De Un Criminal

Capitulo 6: El Zorro de la lujuria

XiChen se encontraba tendido en el suelo después de haber rechazado, no de la mejor manera, a aquella chica que a fuerzas quería casarse con él. Lan WangJi corrió con todas sus fuerzas para poder socorrer a su hermano, quien, para su suerte, todavía seguía vivo. Lo tomó entre sus brazos con cuidado, este se sujetó de él apretando levemente para demostrar que todavía tenía energía. Aún así, su estado resultaba preocupante.

— WangJi, es solo un pequeño rasguño, no es nada — su voz se escuchaba agitada — Pónganse a salvo, rápido. Estaré bien.

Era mentira. Había sido perforado profundamente y de la herida brotaba cada vez más y más sangre. Tendría una larga y lenta recuperación, aunque siendo un Lan esto se podría acelerar.

WangJi estaba visiblemente furioso, quería hacerla pedazos por lo que le había hecho a su hermano, a su gente y a su negocio familiar. Su ética y moral se perdía cuando se trataba de defender a sus seres queridos.

Aquella mirada fría y llena de ira pudo sentirlo a metros Wang Lingjiao, que temblaba al ver lo que había hecho. El arma cayó al suelo junto con ella de rodillas que profundamente estaba arrepentida de su accionar.

— Tú.. hiciste que yo hiciera esto, Xichen — balbuceó Lingjiao en dirección a su "amado"— Tú debías ser mío... El destino lo quería así…

WangJi había llegado a su límite. ¿Cómo podía culpar a su hermano de sus decisiones? ¿Por qué debería recaer la culpa en un inocente? Era totalmente injusto e incoherente sus palabras.

Ya había armado el plan en su cabeza para su siguiente movimiento y acabar con ella junto con todo su clan. Pero los gritos que venían a metros suyos, específicamente donde se encontraban los miembros del clan Wang, lo hizo detenerse.

Uno a uno empezaron a caer cuerpos de ese clan al suelo. Junto con ellos, cabezas que rodaban con una expresión de terror absoluto. Expresiones que retrataban a la perfección el miedo a la muerte.

Todos se preguntaban: “¿Qué es lo que está pasando?" Por el humo de las llamas no se podía apreciar bien el caos que se estaba formando allá arriba. A los segundos, el humo poco a poco se esparció y la sombra de un hombre que corría de un lado a otro a una velocidad impresionante se hizo presente. Daba cortes precisos y perfectos cada que tocaba a un enemigo. Sus movimientos atractivos y seguros hacían la ilusión de estar bailando en pleno enfrentamiento. Su silueta se le hacía familiar, solo que no podía ver su rostro por completo ya que traía una bandana roja amarrada de la nariz hacia abajo. Además, de que traía puesto el uniforme blanco con nubes impresas en el de su clan junto con su característica cinta de la frente, pero no era propio de este esa técnica de batalla. 

— "El zorro de la lujuria" — dijo Lan QiRen acercándose para tomar a Xichen en sus brazos. Estos lo miraron confundidos, era la primera vez que escuchaban ese apodo tan raro — Es él, puedo reconocer esos movimientos a simple vista.

— ¿Por qué ese nombre? — preguntó Xichen desconcertado. 

— Lleva ese nombre porque es igual de astuto y bandido que un zorro, e insaciable cómo el pecado de la lujuria. Es un maestro cuando de robar se trata.

— ¿Cómo es que nunca lo hemos escuchado? 

— Es alguien que trabaja solo, no pertenece a ningún clan hasta dónde sabemos. Nunca se le ha podido capturar ya que es muy hábil para escapar. Tampoco conocemos su identidad. Lo único que sabemos es que siempre carga consigo algo de nuestro vino.

WangJi regresó su mirada a dónde se encontraba aquel hombre para apreciarlo una vez más. Sin embargo; este ya había desaparecido. Ahora lo único que se podía apreciar era la desesperación del líder del Clan Wang al ver que sus subordinados estaban muertos, dejándolo totalmente indefenso.