Mis Dos Daddys

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Melody

Me miro al espejo con una gran sonrisa en mi rostro, ya me encuentro totalmente lista para ir a la fiesta de Halloween con mis Daddys. Nana Marta me ayudó mucho en el peinado y me dio consejos para hacerme yo misma el maquillaje. El resultado me encantó demasiado, estoy realmente hermosa y realmente parezco una princesa de las nieves.

—Bueno linda princesa, aquí tiene su corona— La coloca con cuidado en mi cabeza —Ahora si esta lista para ser la niña más linda y tenebrosa de la noche—

—¿Lo crees Nana?— Pregunto con ilusión —Nunca he sido la más linda del lugar...—

—Creo que ganaras el premio a la Baby más hermosa de todas—

—¿Existe eso?—

—Hay muchas categorías para los Babys, lo veras cuando estén dando los premios—

—¿Crees que pueda ganar uno?—

—Yo creo que ganaras muchos— Besa mi frente —Vamos princesita, tus caballeros con elegante armadura esperan por ti—

Marta me ayuda a bajar las escaleras, al llegar a la sala veo como mis Daddys acomodan las mangas de su camisa. Voltean a verme y sacan una sonrisa grande, sus ojos brillan y me hace sentir como la persona más importante de sus vidas.

—Dios... Que hermosa— Papi se acerca, toma mi mano y deja un delicado beso en mi dorso —Mi amada princesa ¿Estas lista para irnos?—

Muerdo mi labio totalmente feliz —Si Papi caballero— Miro a Daddy, me guiña un ojo y camina hacia la mesita de café sujetando en sus manos una caja grande de terciopelo.

—¿Qué es eso Daddy?—

—Un regalo para nuestra princesa— Abre la caja al estar frente de mi —Las princesas llevan joyas hermosas y esta combinan con tu corona—

Miro el collar de un corazón con una corona y un anillo de corona. Se ven hermosos y muy valiosos, ellos no suelen darme este tipo de regalos, pero desde que empezamos a ser novios, ellos han estado siendo más detallista con estas cosas.

—¿Te gusta?— Pregunta Papi susurrándome al oído.

—Me gusta—

—Sé que estas cosas no te gustan, pero me gusta darte lo mejor, porque eres Melody, nuestra Baby, princesa y novia—

Sonrió con las mejillas coloradas —Son los mejores, Daddys. Me hacen demasiado feliz—

—Y tú a nosotros, linda—

Me colocan las joyas en sus respectivos lugares. Daddy deja un beso en mi dorso y Papi uno en mi cuello al terminar de colocar el collar.

—Debemos irnos— Daddy coloca su saco.

—¿Porque vamos tan temprano? El evento empieza en dos horas—

—Te tomaran varias fotos, mi amor. Así que llevara un tiempo—

—¿Fotos?— Miro a Papi sin entender.

—Estarás en una sesión de fotos cariño, eres la baby de los dueños por lo tanto eres la baby más importante del lugar—

—Pero a mí no me gustan las fotos— Miro mis dedos avergonzada.

—Mentira— Dice Daddy —Bien que te dejas tomar foto en cualquier lugar o ¿Debo recordarte que fondo de pantalla tiene mi celular?—

— O la mía— Ambos me miran con picardía, sé muy bien de que fotos hablan y me da vergüenza en solo pensar que alguien pueda verlas.

—Daddys pervertidos— Hago puchero.