Soy un dios en el mundo primitivo (BL)

39. Primera puntada

Sarai escaldó la suave piel del animal con agua caliente y limpió con cuidado la sangre del cuerpo de Qin Fei. Pensando en la feroz batalla con la bestia voladora en este momento, Sarai no pudo evitar temblar con sus manos.

Tocó el cuerpo de Qin Fei con cuidado, sin escatimar cada centímetro de hueso y piel, por temor a que pudiera haber alguna lesión que no había notado. Aunque Ruma revisó a Qin Fei en el momento en que se desmayó, Sarai todavía estaba preocupada. Afortunadamente, la respiración de Qin Fei era constante y, aparte de algunos rasguños y hematomas, no había signos de lesiones internas.

Sarai limpió el cuerpo de Qin Fei con cuidado. Preferiría sufrir diez veces más lesiones que que estas heridas aparecieran en el cuerpo de Qin Fei.

Después de secar el cuerpo de Qin Fei, Sare le dio medicina a Qin Fei. Todas las heridas quedaron intactas y las manos de Sarai todavía temblaban un poco y apenas podía controlarse. Incluso cuando se encontró solo con una bestia aterradora, Sarai nunca había estado tan asustada.

Al acariciar suavemente el cabello de Qin Fei, Sare se maravilló en secreto. ¿Cómo podría su Qin Fei, con un cuerpo tan delgado, ser tan poderoso? Si Qin Fei no hubiera asestado golpes fatales a las bestias voladoras una tras otra y no hubiera matado al líder de las bestias voladoras, la tribu habría sufrido muchas bajas. Pero si Qin Fei falla, ¿se convertirá ahora en un cadáver frío?

"No... no, Qin Fei". Sarai abrazó a Qin Fei y lo encerró en sus brazos. Qin Fei se sintió un poco asfixiada y todo su cuerpo estaba dolorido y ardiendo como si lo hubieran esparcido. Se despertó de su confusión. . El olor familiar llenó su nariz y el líquido tibio se deslizó lentamente por sus hombros y cuello, dejando una sensación clara y fresca en la piel caliente.

"S-Sare... Sare, estás llorando..." Qin Fei extendió la mano con dificultad y le dio unas suaves palmaditas en la espalda a Sare.

Sa Lei abrazó a Qin Fei con más fuerza, "Qin Fei, Qin Fei ..." Simplemente llamó el nombre de Qin Fei una y otra vez.

Qin Fei luchó por un momento, "Sare, duele ..."

Sarai rápidamente se soltó, "¿Dónde te duele? ¿Dónde te duele..."

"Oh ..." Qin Fei gimió en voz baja, "Me duele todo el cuerpo, TNN, esa bestia voladora es tan capaz de revolotear, está atascada así y aún puede caer durante tanto tiempo".

El cuerpo de Sare tembló, agarró a Qin Fei y gritó: "¿No te dije que te escondieras en la tienda? ¿Por qué saliste corriendo? ¿Sabes que me morirás de miedo?".

Qin Fei gimió de dolor, lo que asustó a Sarai, que inmediatamente perdió toda su arrogancia y lo abrazó temblorosamente.

Los oídos de Qin Fei sonaron durante mucho tiempo debido al rugido de Sa Lei, y ella apoyó la cabeza en su hombro y susurró: "Yo también tengo miedo, pero sé que estás afuera y que las bestias voladoras están atacando a la tribu... Yo, no puedo esconderme y simplemente mirar. Vi cómo te lastimaron o incluso te mataron..."

"Fei ..." La voz de Sarai se ahogó por los sollozos, y abrazó a Qin Fei con fuerza, "Lo siento, lo siento, todo es mi culpa, no debería gritarte. Mi Qin Fei es tan valiente, ella es la más fuerte de la tribu. Poderosa guerrera. Sólo tengo miedo..."

Qin Fei también respondió con firmeza a Sarai: "Lo sé, está bien, no te preocupes por Sarai ..."

"Tos, tos ..." Walter tosió un par de veces, no quería molestarlos a los dos en ese momento. Pero Tolejia resultó gravemente herido y el sacerdote Ruma dijo que sólo Qin Fei podría salvarlo. También hubo varios varones gravemente heridos, aunque sus vidas no corrían peligro por el momento, era difícil sobrevivir a tales heridas.