3. Una niña algo extraña

63 2 1
  • Dedicado a Andrea Jara
                                    

Cuando desperté estaba algo aturdida y tenía un dolor en mi cabeza, sentía que mi cuerpo era más pesado de lo normal, intente moverme pero el aire era incluso más denso y me era imposible, pero me di cuenta que ya no me encontraba en esa urbanización, todo habia cambiado, ya no se encontraban la hilera de casas de color carmesí, ni la acera pavimentada por la cual  habia venido caminando, todo era  mas ambiguo de lo que en verdad era, de un segundo a otro me encontré en un espacio en blanco en el cual no se encontraba nada ademas de un escritorio, algo extraño en cualquier caso, pero no podía dejar de preguntarme que era lo que habia sucedido para traerme aquí. Todo era diferente y no es escuchaba sonido alguno, ni si quiera de mis propios pasos, y cuando llegue hacia el escritorio se veía totalmente vacío, era de madera caoba, y se veía muy bien conservado, hasta que divise un cajón, intente abrirlo pero no parecía ser suficiente, ya que estaba cerrado con llave, cosa que en serio me extraño, ya que es ilógico cerrar con llave un escritorio en mitad de la nada.

Aunque me hubiera gustado abrirlo no pude hacerlo, pero tampoco podía quedarme en uno solo lugar sin hacer nada, asi que seguí mi camino, pero todo parecía seguir estando de un solo color, no habían caminos, aceras, ni algo parecido y ya me estaba cansando de transitar sin rumbo alguno, ni si quiera sabía si estaba caminando en círculos, asi que decidí descansar un poco y me senté, no pude evitar pensar en que hora seria, o en donde rayos me encontraba pero estaba segura que ninguna de mis pregunta seria respondida, o al menos no por ahora. Intente imaginar que solo era un mal sueño y que  en cualquier momento me despertaría para ver a la testaruda de Natalia pero por más que pestañeaba seguía estando en el mismo lugar, era un espacio infinito, de un color que en realidad ya me estaba cansando, y no entendía el motivo ni la razón para estar aquí. O mejor dicho para soñar con algo asi, después de todo mis sueños siempre fueron un poco mas creativos, aunque claro estar varada en un espacio en blanco no era mi idea de un “fin de semana perfecto”, pero ya podía tacharlo de mis lista de cosas paranormales.

A todas estas me preguntaba donde estaría la mujer de blanco que me perseguía, no es que quisiera volver a verla claro esta, pero tampoco me parecía lógico que de pasar a una persecución por parte de un fantasma pasara a estar varada sin rumbo alguno en un espacio en blanco, aunque ahora que lo pienso jamás habia estado tan cerca de que un fantasma me atacara o al menos no de esa manera, incluso llegue a pensar que queria matarme.

-Asi que ya veo que lo has comprendido-Dijo una vocecita algo chillona

Para luego darme un susto de muerte y ver que detrás de mi estaba un niña de quizás unos 11 años, vestida de una forma particular, tenía una chaqueta rojo carmesí que era larga y llegaba a sus rodillas mientras que por debajo se podían divisar sus pantalones de color azul eléctrico, y unas zapatillas negras que parecían nuevas, su tez era demasiado blanca para mi gusto, y sus labios era morados pero algo resecos, sus ojos eran de un azul cielo que jamás habia visto en alguien, mientras que su cabello se veía extremadamente liso de color negro azabache pero muy bien peinado en dos coletas rojas.

-¿Qué ahora el gato te comió la lengua?-Dijo mientras se reía y veía mi expresión de susto

Pero como demonios no queria que me asustara, llevaba horas caminando y no habia visto a nadie ni nada y de un segundo a otro ella aparece, como si fuera algo normal, ella se veía algo intrigante, después de todo no es normal ver a una niña tan pequeña en lugar como este.

-¿Y quien dijo que soy pequeña?, Tengo 12, para tu informacion-Dijo mientras se sentaba a mi lado

-Acabas de…..-Y no pude terminar la frase sin que ella contestara

-Si, acabo de leer tu mente, ¿Que tiene eso de extraño?-Dijo mientras jugaba con unas pulseras que tenía en su mano derecha

-No es quiera ser descortés pero que se supone que haces aquí-Dije algo directa

Secretos Ocultos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora