Cartas a Amores No Correspondidos

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Estoyaprendiendo. Por fin lo estoy haciendo después de todo este tiempo.Estoy aprendiendo que no vale la pena vivir por alguien más que noseas tú misma. Que los dueños de tu destino no tienen que serextraños, tan solo tú.

Yfinalmente creo que puedo hacerlo. Finalmente me creo capaz de vivirmi propia vida. No necesito a nadie que me diga que es lo correcto yque es lo que no se debe hacer. Eso lo juzgaré yo misma.

Mehe dado cuenta tarde, bastante tarde... pero mejor tarde que nunca,¿no?

Estáclaro que esta va a ser una nueva etapa para mí. Sin nadie en mente.Nadie que pueda controlarme de ninguna de las maneras posibles. Apesar de que en este mundo siempre hay alguien por encima denosotros, ya no dejaré que sea nadie que pueda hacerme ni siquieraun 1% infeliz. Yo decido quien entra en mi vida y también quien salede ella.

Eshora de empezar una nueva etapa. Y por fin me veo realmente preparadapara entrar en ella. Debo acostumbrarme a decir adiós. Adiós a lascríticas de los demás. Adiós al qué dirán. Adiós a los "ysi...". Adiós a todo aquel que se crea dueño de mi vida. Porquequiero dejar clara una cosa... la única que tiene poder para decidirsobre mí, soy yo.

Definitivamentehe pasado por muchas cosas que no tendía que haber sufrido. Tantaslágrimas derramadas por tantos imbéciles... y es que de tanto queme ha pasado, llegó un punto en el que me acostumbré. Y eso es lopeor que pude hacerme a mí misma. Llegué a creer que la vida eraeso.

"Loschicos son todos iguales" me repetía una y otra vez. Con laesperanza de terminar de creérmelo, y así no tendría que volver atener la pequeña esperanza de que alguno fuera diferente. Conmigo.

Peroahora llego a entender que el verdadero problema no era ese. Lo queyo creyera o dejara de creer. Era yo misma. Estaba tan enfocada engustarle a los demás que no podía ver que eso controlaba mi vida. Yesa era la imagen que le daba a los demás. Cohibida. Callada.Aislada.

Yno, por si os lo estabais preguntando. No. Esa no soy yo.

Porquehace ya bastante tiempo que necesitaba vivir mi propia vida.

Ypor primera vez me siento capaz de hacerlo.