Cartas a Amores No Correspondidos

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Realmente hace mucho que no me siento enfrente del ordenador para dejar salir todos mis sentimientos, pero me da la sensación de que ya va haciendo falta. Teniendo en cuenta que esto parece ser que lo uso como diario personal.... vamos a decir que ahora que leo todo lo escrito anteriormente aquí (hace mucho tiempo ya) fue escrito con muchísimo sentimiento, y a juzgar por la fecha, iba sobre mi actual crush.

Pues dejadme deciros que los milagros existen y que los sueños se hacen realidad. Yo escribía sobre cuánto me dolía no ser parte de su vida y cómo jamás lo sería... Realmente yo no tenía ni idea de que un año más tarde yo estaría formando parte (y una gran parte) de su entorno (no como a mí me gustaría, pero más o menos). Justamente un año después de que todo eso fuera escrito, yo conseguiría incluirme en su vida, bueno más bien encajarme a presión en ella, debido a que... Querida yo del pasado, si yo te hubiera dicho que ibas a pasar fines y fines de semana con él tocando la guitarra... ¿Me habrías creído? Por supuesto que no. Es que realmente parece surrealista.

Por eso mismo hay veces que los cuentos son algo más que cuentos... Nuestra historia duró mucho menos de lo que a mí me hubiese gustado... pero supongo que duró el tiempo necesario para hacerme sentir que estaba viva. Lo necesario para sobrevivir pero no lo suficiente como para vivir.

Llegados a este punto en el que solamente queda decir adiós mentalmente y esperar a que le llegue de alguna manera extrañamente telepática... Supongo que ya solamente queda intentar olvidar. Bueno, no. Olvidar no. Pasar página. Dejar todo esto tomo un bonito recuerdo, pero nada más que eso. No como una historia que debe ser continuada, sino como una historia que duró lo que tenía que durar y me aportó lo que me tenía que aportar, sinceramente. Por eso digo adiós. Pero digo adiós con el corazón en una mano, gratitud y lágrimas en la mejilla. Como todas las buenas despedidas deben ser.