Nadie va a salvarte.

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Mi historia sigue con Aileen y Stella. Dos chicas súper diferentes a las demás. Iban a mi clase pero no empecé a relacionarme con ellas hasta que Hayley se marchó de mi vida. Primero conocí a Stella, pero luego empecé a llevarme mejor con Aileen. Al principio nos lo pasábamos genial, hacíamos todos los trabajos del instituto juntas, pero no solíamos salir juntas.

Solía pasar los días de instituto con ellas y unas amigas más pero todo acababa cuando las clases llegaban a su fin. Pasaba las mañanas con ellas y las tardes conmigo misma. 

Unos meses después, Aileen me invitó a su cumpleaños. Pero no uno cualquiera: iban a ir diez amigos suyos (de los que solo conocía a Stella) a cenar, después a una discoteca y luego a beber. Dieciocho añeros...

Lo peor es que acabé yendo. Fue una noche bastante... incómoda, por así decirlo. Solo esperaba hacer algún amigo -sí, habían chicos-, cosa que no pasó, ya que después de la cena me fui a casa. 

La verdad es que no me gustaba la gente de este tipo, no quería empezar a fumar ni liarme con nadie, no estaba preparada. Quería que cuando el amor llegara a mi vida fuera especial y no así.  De todas formas, era la primera vez que salía con mucha gente, y encima por la noche. Me sentía mayor. Todo esto era nuevo para mí. Algo nuevo que iba a terminar pronto. 

Con el paso del tiempo, las chicas dejaron de quedar conmigo y solo hablábamos en algunas clases. Nuestras conversaciones se basaban en si habían deberes, que día de la semana era x examen y alguna que otra cosa más. Ellas pasaban el tiempo con su grupo de amigas. No quería que pensaran que me acoplaba con ellas porque no tenía con quién estar, así que me automarginaba. 

Recuerdo que una de sus amigas me dijo, mientras yo estaba estudiando en la biblioteca del instituto:

''Lucy, eres muy posesiva con la gente. Se nota que no has tenido muchos amigos.''

Y tenía razón. Sé que no lo decía con mala intención, pero intenté no tomármelo muy a pecho.
He tenido muchos amigos, pero todos ellos han acabado cansándose de mí. 

Después de esto, empecé a sentirme mal conmigo misma. Tenía ansiedad y estrés. También empecé a tener más miedos e inseguridades, lo que provocó la peor decisión que he tomado en mi vida: hacer novillos. Empezaba saltándome una clase hasta que faltar días enteros porque no quería estar con nadie. Intentaba evitar todo lo que me hacía daño. 

Estaba aprendiendo qué era la soledad y lo peor de todo era que me gustaba. Me gustaba el dolor porque creía que me lo merecía, me lo merecía por haber sido una muy mala amiga. 

-Nadie va a salvarte, Lucy. - me repetía a mí misma. 

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Hola! Llevo muchos días sin publicar ningún capítulo, ¡lo siento! El próximo capítulo es el final ;)

-LittleVampire21

La chica solitaria #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora