Four in house; 『Larry Stylinson』 「l.s」 [M-preg]

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i; Versátil
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+18 (Tengo menos edad que eso pero, mE vALe un cAraJO)

—Harry, vamos, vamos, vamos, tengo ganas y pues, hace mucho que no lo hacemos— Le acarició el brazo un tanto juguetón, ronroneó contra su pecho.

—Louis— Su voz sonaba como una advertencia.

Tocó el culo del más bajo, vaya que los dos no hacían nada, todos los días se la pasaban dándose besos y caricias.

Otra de sus manos se metía dentro de el pantalón del contrario apretujando su trasero a la par de la otra.

—Vamos bebé— Lo jaló a la cama tirándolo sobre esta, sacando la mano traviesa de su pantalón, sentándose sobre su erección dando pequeños saltos simulando penetraciones.
Se movió de adelante hacia atrás, su gran trasero aplastándose contra su pene, haciendo fricción en la pelvis causándoles gemidos y estremecimientos a ambos.

—Bien Lou- oh dios— Gimió sin haber terminado su oración —Vamos bebé, quítate la ropa— Lo levantó de su pelvis jalando su camisa hacia arriba quitándosela rápidamente. Se acercó a sus pezones ahora erectos lamiendo en círculos, pasando por las puntas de estos y degustando su sabor agridulce.

—Demonios— Se volvió a recargar en su pene saltando de nuevo —Aguanta cariño, quitare mi ropa— Empujó su cabeza separándolo de su pezon izquierdo que estaba rojo y lleno de saliva, totalmente erecto —Quita la tuya igual— Ordenó demandante, parándose de su regazo y colocándose frente a la cama, deslizando su ropa lentamente por su cálido cuerpo meneándose mientras quitaba su pantalón.

El contrario gimió en respuesta levantando los brazos quitando su camisa negra, la aventó a una silla de madera desgastada que estaba al lado derecho de su habitación, desabotonó su pantalón y lo mandó al lado contrario de la silla haciendo que este caiga al suelo, cuando volteó de regreso vió a Louis sin ningún rastro de ropa, con el cabello desordenado y lo más importante, tomando su gran pene masturbándolo y metiendo uno de sus dedos en su trasero mirándolo y soltando algunas maldiciones.

—Oh dios, Louis te ves tan caliente justo ahora— Bajó sus bóxers rojos liberando su erección palpitante, con gotas de pre-semen, se encontraba roja de la punta, palmeó sus muslos dándole a entender a Louis que lo quería sentado justo ahí.

—Vamos papi, ¿me dejas sentarme en tu gran pene?— Se acercó a él, subiéndose de nuevo a la cama y gateando directo a él, arrastrando su pecho sobre su pene sintiendo como un poco de ese líquido blancuzco se quedaba en este, cuando los dos penes chocaron llegó a su cara, lo besó y lamió sus labios delineándolos y succionando el labio superior. Se separó y comenzó a chupar su cuello pasando su caliente lengua por la pálida piel del contrario, el otro gimió gustosamente degustando el tacto.

—Oh bebé, claro que si te dejaré— Pegó su pelvis directo a la de Louis tomándolo de su trasero, haciendo que los dos abrieran sus labios, soltando un gemido que salía desde lo más profundo de sus gargantas.

Louis sin dejar de mirarlo se sentó sobre el, haciendo que su pene roce su anillo de músculos, causando fricción entre estos

—Vamos entra en- mi-mierda— Sintió uno de sus dedos fríos en su ano haciendo círculos tanteando su entrada, segundos después metió su dedo medio lo movió de un lado a otro y rápidamente encontró su próstata, jodida mierda se venía, él tenía unos largos dedos que a Louis le encantaban.

—Joder bebé, me encanta que tus dedos sean tan largos, pero hay algo más largo ahí abajo esperando atención— Señaló el pene del rizado, retorciéndose de placer cuando el contrario añadió otro dedo.

—Bien lindo, solo quería prepárate, pero veo que estas más que preparado, por lo tan-

—Cállate y bésame tonto— Jaló al de rizos de los hombros y lo besó bajando su cadera haciendo que los dedos de Harry aumentaran la velocidad abriendo y cerrando sincronizados —Que bien se siente esto— Dijo sintiendo como sus paredes se abrían lentamente, soltando un gran gemido que juraría que hasta Obama lo oyó, rasguñó los brazos del rizado lloriqueando por más, el otro gustoso de esto, sacó sus dedos y los reemplazó por su pene, metiéndolo lentamente, el contrario se sentó sobre este rápidamente, necesitaba sentir placer.

—Lo-Louis— Jadeó cuando sintió la apretada entrada de su esposo asfixiando su pene. Comenzó un vaivén desesperado moviendo sus caderas rápidamente contra él, dando directo a su próstata, chocando sus testículos contra su trasero, provocando un sonido que los dos disfrutan

En las paredes de la habitación se perdían sus gemidos.

—Déjame hacerlo a mi— Lo detuvo y empezó a saltar sobre este metiendo y sacando el pene del rizado, generándose estocadas profundas, viendo como su propio pene chocaba contra el estómago de su acompañante, aveces dando con el suyo —Oh vamos, justo ahí— Saltó e hizo fricción contra su pelvis, contrayendo sus paredes, saltando rápidamente, se sintió en el cielo cuando sintió un cosquilleo en su estómago, Harry lo tomó de su espalda haciendo que sus movimientos se detuvieran, y chupó uno de sus pezones rosados, dejándolo sensible y ensalivado, lo dejó seguir con su gran trabajo, empujándolo hacia el frente, mientras Harry tocaba la punta del pene del contrario, este siguió saltando y restregándose contra su pene.

—Estoy apuntó bebé— Lo hizo moverse más rápido, tomó sus caderas y las apretó, viendo como sus dedos se marcaban en él —Oh Louis— Lo llenó por completo, sacó su pene de el trasero del contrario, viendo como un blanco y espeso líquido combinado con un poco de sangre salía de ahí, y con eso le bastó para tener más, antes de que dijera alguna palabra Louis lo interrumpió, parándose de su estómago y sentándose en la cama, su pene flácido se volvió erecto en un santiamén.

—Harry...— Se volteó viendo con lujuria los ojos dilatados del otro —Vamos por la segunda ronda— Ronroneó— Me toca a mi— Levantó las largas piernas del contrario y lamió la cara interna de sus muslos viendo como el pene de su esposo se volvía a endurecer lentamente golpeándolo en la frente.

—Louis— Levantó las caderas buscando atención, el otro solo metió la punta de uno de sus dedos de improvisto en su ano haciendo que este soltara un gemido —Más profundo— Le pidió a Louis, que, en vez de hacer eso primero metió otro dedo abriendo y cerrando, a la vez que empezaba a meterlos más adentro.

—Vamos solo déjame prepárate, créeme, yo ya quiero metértela— Exclamó, sin detener el movimiento de sus dedos —Suficiente— Se hincó frente a él, levantó sus piernas y las colocó sobre sus hombros, alzó su trasero metió su lengua y empezó a recorrer cada centímetro de su interior, las piernas de Harry temblaron, sintiéndose desfallecer, oh Louis, como recordaste que a Harry le encantaba sentir tu caliente lengua ensalivando su trasero.

—Louis, me encantas— Gimió, retorciéndose, sudando más de los debido, sus rizos empapados estaban pegados a su frente, el contrario sacó su lengua y lo cambió por pequeños y suaves besos a su ano.

—Louis, solo fóllame ya- Guardó silencio cuando sintió el pene del contrario entrar en él, cambiando su voz por un bello gemido a los oídos del chico de ojos azules, el otro lo llenó por completo con su pene, un jadeo inundó la habitación, los sonidos de chapoteo de su pene encerrándose en ese agujero resonaban contra las paredes, Louis metió el pene de Harry a su boca y continuó dando penetraciones a su interior, y así los dos se vinieron gimiendo el nombre del contrario, Louis salió de él y observó su semen dentro de el interior del de ojos esmeraldas, bajo delicadamente sus piernas, se paró de la cama, la rodeó y besó a Harry, sintiendo ese delicioso sabor que lo volvía único.

—Buenas noches Lou— Susurró correspondiendo al beso, cayendo dormido después de que este lo besara, Louis se separó de este.

—Contigo siempre Hazz— Lo movió suavemente lejos de la orilla, acostándose junto a él, subiendo lentamente sus pies.

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El primer smut de toda mi puta vida.
Acepto observaciones, y comentarios buenos y malos.