Capitulo X: Fuego y Sangre

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La noche estaba asolada por una fuerte lluvia, cuando el primer disparo destrozo una de las ventanas y se clavo profundamente en al pared, Lydia, quien estaba a unos centímetros del disparo abrió sus ojos.

—Supongo que eso es un "estamos aquí" —dijo esta

Un tiro volvió a romper el aire, pero no fue dirigido al interior de la casa, todos fruncieron el ceño mirándose entre si.

—¿Qué esta sucediendo? —pregunto Jackson al resto

—¡Escuchame Scott McCall! —la voz de Gerard rompió el silencio—tus amigos lucharían por ti,  al igual que por Derek Hale. Pero eso no es lo que quiero,  no quiero la sangre de tu manada, quiero la tuya, la tuya y la de aquel que causó la muerte de mi hija.

Hizo una pausa.

—Ahora te hablo a ti, Derek Hale —continuo— esta noche, estas permitiendo que tu manada sea enviada a la muerte, al igual que tres humanos que se encuentran en tu casa. Permites que tu manada muera por ti, no hay deshonra más grande para un Alfa que nunca debió serlo. Si quieres conservar tu honor, saldrás fuera ahora y te enfrentaras a tu destino, o sino, matare a cada ser sobrenatural o humano que se cruce en mi  camino hacia ti. 

Todos miraron a Derek en ese instante, no se encontraron la duda en su mirada, sino una decisión. Lydia lo sintió antes de verlo caminar, sintió su decisión de salvar a todos allí sacrificándose.

Antes de pensar en su acción, su mano se deslizo hasta tomar su brazo, deteniéndolo.

—No puedes hacerlo —dijo, este frunció el ceño, girandose— Te mataran y luego nos mataran a todos. Derek, piensa. Todos somos testigos de lo que sucedió hace años, Gerard no quiere testigos, quiere venganza.  Quiere matarnos a todos porque en su retorcida mente, fue  nuestra culpa la muerte de Kate.

Se detuvo un momento para mirarle

—Confía en mi, Derek.

Este la miro durante un largo momento, antes de finalmente asentir. Miro a través de la ventana, donde pudo ver parado a Gerard en medio. Detecto también a varios cazadores su alrededor.

—Entonces tendremos que luchar

***

El siguiente disparo se encontró más cerca aun, Lydia se agacho a tiempo para evitarlo, sino fuera por sus sentidos tan alerta, estaría muerta.

La realidad era que ella era el eslabón débil, incluso Stiles, el cual tenia su bate, estaba luchando para salvarlos a todos.

—¡Lydia, despierta y mantente abajo! —oyo que le gritaba Jackson, miro levemente a traves de la ventana, Scott lanzándose ferozmente hacia uno de los cazadores, ambos, junto a Derek y Malia, estaban tomando la delantera para no dejar que estos se acercaran a la casa.

Lydia trago saliva mientras intentaba asimilar lo que estaba sucediendo alrededor, se levanto temblorosa, mirando nuevamente a través de la ventana, cuando vio a Scott caer al suelo con su rostro contorsionado por el dolor.

—¡SCOTT! —grito, vio a Chris acercarse a el, con una mueca de satisfacción coloreando su rostro mientras alzaba su pistola para dar el tiro final.

Pero antes de que pudiera hacerlo, una flecha corto el aire, lanzando la pistola a metros de distancia.

Lydia tuvo que volver a ver la escena para darse cuenta de quien era la persona que había salvado a Scott de su muerte, Allison...Allison había vuelto.

Ella corría a una gran velocidad, tomando a Scott mientras se alejaba de su padre, y esquivaba las balas que se dirigían hacia su alrededor.

Isaac, Boyd y Érica les facilitaron el camino sorteando a los cazadores para que pudieran avanzar.

La puerta se abrió, revelándolos a ambos.

—Allison—dijo Lydia, esta alzo la mirada, para mirarla.

Esta hizo algo parecido a una sonrisa de consuelo, y dejo a Scott en el suelo, luego cerro la puerta tras de si.

Este la miro

—Regresaste

Ella asintió, aunque su mirada era acero.

Jackson, Stiles, Lydia y Scott se levantaron, preparados para lo que vendría a continuación.

—¿Qué es ese olor? —pregunto Jackson, frunciendo el ceño

Lydia imito su acción y se concentro

—Parece... —comenzo

—Humo... —termino Stiles, y al decirlo, todos se dieron cuenta de lo que eso significaba.

Estaban incendiando la casa, Allison hizo un movimiento para voltearse a verlos.

—No hay tiempo, síganme, manténganse ocultos y corran lo más rápido que sus piernas le den. Tengan por seguro que si los atrapan, los mataran.

El resto asintió, golpeando la puerta para poder salir hacia el bosque, Lydia corrió detrás de Stiles, Allison y Scott quienes se mantenían al frente, cuando un grito de dolor la detuvo.

Se giro incluso antes de sentirlo, corriendo hacia Jackson mientras este se sostenía la pierna por el dolor, un disparo la había atravesado de forma limpia.

Ella paso sus brazos a trabes de su hombros

—¡Sigan! —les grito al resto que se habían detenido, si querían salir de allí, debían de hacerlo ahora.

Jackson tenia fuertemente apretado los ojos, apenas podía verlo por la lluvia que caía, haciendo borrosa su visión y haciendo más trabajoso el caminar entre el bosque.

Por momento, se resbalaba por el barro que ensuciaban sus botas, pero se mantuvo firme en arrastrar a Jackson a un lugar seguro.

Apenas podía ver al resto, solo esperaban que estuvieran a salvo, porque no sabia exactamente a donde debían de ir. Tampoco se atrevía a gritar pidiendo ayuda, podían encontrarlos aun más rápido.

—El claro...tenemos que ir al claro —dijo Jackson entre dientes— debe...debe estar cerca ¿no?

Ella asintió, aunque sabia que el no notaba ese hecho, podía oler y casi paladear el sabor metálico de la sangre que corría por la pierna de Jackson.

Esperaba realmente que no estuviera tan mal como parecía, sabia que el había tenido suerte, la bala había pasado limpiamente.

Pero quien los estaba cazando estaba detrás de ellos en ese instante, esperando,  esperando para matarlos a todos.

Se resbalo haciendo que ella y Jackson cayeran al suelo, y con esfuerzo, logro levantarse de nuevo.

—Lydia —le llamo este

—Ya casi llegamos al claro —le dijo, tanquilizandole

Este negó

—No lo haremos, soy inservible sin mi pierna, tienes que dejarme...

Ella nego

—Jackson, ya estamos llegando, solo...necesito que resistas un poco más...

—¿Y luego que? —pregunto este—nada dice que el resto este en el claro, podría ser otra trampa, y correrás más rápido sin mi...dejame...salvate.

Lydia le miro, un rastro de lágrimas oscureciendo sus ojos, por un momento, vacilo. Como si la sola idea podría cruzarse le por la mente.

—Nunca te abandonare, Jackson —dijo esta— aun tienes que decirle a tus padres que le quieres, y aun tienes que   ganar esa apuesta. Solo...vamos...se que podemos hacerlo.

Este se resigno, haciendo un esfuerzo para ayudarla a moverse más rápido. Lydia rezo en silencio para no estar siendo conducidos a una trampa.


Dispara | Teen Wolf #3|Where stories live. Discover now