Kiss

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–Deku– con voz suave, Katsuki lo llamó con aquel apodo que le había dado desde primaria.

–¿Hum?

–Si te molestan en la Yuuei prométeme que me lo dirás.

–Kacchan, en una escuela como la Yuuei no creo que pasen esas cosas.

–Nunca falta el idiota al que se le haga fácil hacerlo. Así que escúchame bien, nerd, si te molestan, dímelo a la primera.

Desde aquel incidente, Kacchan se había vuelto extremadamente sobreprotector, por suerte le había dado su merecido a los bastardos que tocaron a su Deku, y después de hacer unos cuantos movimientos con ayuda de sus padres, logró que el director aceptara expulsarlos.

No dudaría en romperle un brazo (otra vez) a quien se atreviera a tocar lo que le pertenece.

–Esta bien Kacchan. Lo prometo– y le regala una sonrisa al más alto, tan radiante y llena de ternura, adornada con un sonrojo en sus mejillas llenas de pecas. Como lo adoraba.

–Chicos, la cena esta lista, bajen a cenar– Inko había roto su pequeña burbuja, pues aún había que celebrar su graduación de la secundaria.

Ambos se dieron una sonrisa cómplice y bajaron, abas familias se habían reunido para celebrar a sus retoños, después de todo llebaban siendo amigos desde hace mucho y Mitsuki e Inko se llevaban bien también, por lo que fue inevitable no considerarse familia.

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La Yuuei sin duda era muy diferente a lo que era su antigua secundaria, sus compañeros eran una masita, todos amables y serviciales. No tardo en hacer amigos, o bueno, los chicos no tardar en querer ser su amigo, Izuku aún seguía poniéndose nervioso debido a la atención positiva que le daban sus compañeros y no sabía muy bien como reaccionar, sin embargo, daba su mejor intento y trataba de no ser tan friki.

Bakugo, por su parte también consiguió amigos, por no decir que el grupo de chicos revoltosos lo había adoptado. Y aun que lo niegue, Katsuki también les tiene cierto aprecio. Pues nunca tuvo a nadie más que a Izuku, nunca lo vio realmente necesario, con Deku era más que suficiente y estaba bien, pero el autonobrado bakusquad se ha ganado su cariño en estos pocos meses.

Por su parte, Izuku cada vez que mira al bakusquad convivir siente un amargo sentimiento en su pecho, detesta sentir eso inexplicable por qué se siente egoísta. Katsuki no le pertenece y sabe que es dueño de su propia personas, sin embargo, ver a otras personas tan cerca de él le genera cierta molesta.

A pesar de que él mismo convive con más gente, el simple hecho de no compartir el mismo tiempo que antes con Kacchan le hace sentir triste y frustrado, por que aún que sabe que no es verdad, algo le grita que lo esta perdiendo.

Su pequeña inseguridad creció cuando lo miró más cercano al pelirojo de singular sonrisa; Kirishima. El mencionado le hablaba con tanta familiaridad como si se conocieran de toda la vida e invadía el espacio personal de su Kacchan como di quisiera robarle el oxígeno.

Peor se sintió por pensar tan mal del pobre chico sonriente, él era tan amable y siempre ha sido amigable con él, pero o puede evitarlo. Su relación con Katsuki nunca se a definido como noviazgo como tal. Recuerda solo que empezaron a darse besos desde primaria, Kacchan lo hacía para tranquilizarlo y dejara de llorar y Deku cuando Katsuki estaba molesto y quería que se le pasará.

En secundaria no cambio mucho, seguían con el titulo de amigos a pesar de que los demás molestaban a Deku por ser gay. Kacchan siempre estuvo para él. Pero nunca se habló de una relación en concreto.