07. Plátano y arándanos

31.1K 2.4K 1.4K
                                    

«Just have a drink and you'll feel better
Just take her home and you'll feel better
Keep telling me that it gets better
Does it ever?
»

In my blood - Shawn Mendes

KALE ♫

El ejercicio de ayer fue extraño.

Me sentí expuesto al tener que contarles lo que ocurrió, no le había contado a nadie en voz alta, ni siquiera a mí. Lo que parecía ser una situación donde soy un completo idiota que mejor debería callarse para conserva un poco de su dignidad se convierte en un ambiente donde tengo por completo el control de la situación.

De pronto, puedo decir lo más oscuro y asqueroso que venga a mi mente. Puedo ser yo mismo, si es que todavía queda algo de mí por encima del personaje de Kalightnigh, ¿Qué se supone que uno haga con tanta capacidad en las manos? ¿Es así como debería sentirse escribir?

Reír de lo que se suponía era para llorar fue muy liberador. Fue como si alguien hubiera limpiado los vidrios azules a través de los cuales veía el mundo y hoy es mucho más claro, pero a la vez, al ser más claro es más doloroso y esta vez no me da pena admitir que lo es.

Son las cuatro de la mañana y estoy despierto porque no puedo dormir, el enojo, es solo tristeza, traición, soledad y frustración porque las cosas se dieran de esta manera. Es como si yo fuera una esponja que ha absorbido toda la oscuridad y de pronto pudiera torcerlo y convertirlo en tinta sobre el papel.

Así que sí, voy a pasar tres horas usando las 50 hojas blancas que me regalaron para contar que últimamente, todo es horrible. Lo que creo es desolador, son canciones tristes de ritmo lento, no pretenden ser otra cosa. Son las frases que se te vienen a la cabeza cuando no puedes dormir y no es tu culpa.

Son diálogos sin contestar.

Es triste tener tantas cosas para decirle a alguien y saber a ciencia cierta que no solo no podría hacerte sentir mejor, sino que tampoco sabría que decir o como arreglarlo. Estoy casi seguro de que Candy no me escucharía. Entonces esa energía ardiente se va apagando hasta ser cenizas y las cenizas intoxican el aire.

Cenizas, aire... Quiero hacer una con metáforas sobre quemarse en el infierno.

Y otra con meses, quiero ser especifico. Quiero que la charla de cierre sea esta mierda y luego no volver a ver a esa gente en mi vida.

No he mirado las noticias o el internet, no tengo cómo, no tengo teléfono y aquí solo hay dos computadoras. Una que usa Oliv en el trabajo y otra que tiene la hermanita de Aster.

Tengo confianza en adivinar lo que ocurre, puedo predecir el futuro: Candy está llorando frente a las cámaras, él la esta consolado a un lado, ella se queda en casa con mi familia, luego se desaparece para ir a fiestas camuflada y que no la cancelen en redes por el duelo nulo que le hace a su novio muerto.

Nazar me prestó su guitarra. Salí temprano a varios metros de la cabaña para no despertar a nadie, asumo que habré transmitido mis emociones a mis acciones porque tiré una con tal fuerza que rompí la cuerda.

—¿Emocionado? —casi me caigo del tronco del susto cuando siento una mano posarse en mi hombro.

—¿Hortencio? ¿Qué hace aquí? El viento está demasiado fuerte, se va a resfriar.

—Podría preguntarte lo mismo —con dificultad, él logra agacharse lo suficiente para sentarse en el tronco conmigo—. No sabía que tocabas la guitarra, se te escucha desde mi cuarto.

—¿De verdad? Lo siento mucho, pensé que...

—Este sitio es hueco, el eco es el mejor amplificador —me sonríe—. No es un reclamo, llevo escuchándolo hace dos horas, ya son las seis —me muestra su reloj—. Eres bueno.

No apto para artistasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora