Remember Me / Caché

Capitulo 5

- Oyeeeeee, despierta - Abro los ojos con pereza pero la luz que entra por la ventana hace que los vuelva a cerrar - MARIA JOSÉ GARZÓN, ¡DESPIERTAA! 

- Dani, no grites, me duelen mis oídos - me volteo y escondo mi cabeza bajo la almohada.

- Poché - dice con voz tierna, recordando la manera en la que me llamaba cuando eramos pequeñas. Eso me conmueve así que levanto la almohada y la miro.

- Eres una niña muy mimada, ¿no? siempre obtienes lo que quieres - le sonrío y la abrazo.

- ¿Majo? - lo voz de Valentina me hace girar a mirarla.

- Hola, ven, ¿La recuerdas? - señalo a Daniela, Valentina niega con la cabeza - Dani, ella es Valentina, llegó antes de que te fueras.

- ¿En serio? Tampoco la recuerdo - Daniela sonríe, y acaricia la mejilla de Valentina.

- Es tu reemplazo - me río y Daniela me da un codazo en las costillas.

- Oye, sabes que soy irreemplazable - bromea.

- Vale, ve a bañarte ¿sí? - la niña asiente y yo la bajo de mi regazo con cuidado. 

Nos quedamos viendo como Valentina corre hacia el baño tarareando una canción. 
Me acerco a Daniela y la abrazo con fuerza, aspirando el aroma de su cabello.

- Aún no puedo creer que estés aquí - le tomo la cara con las manos y le doy un beso en la frente. 

- Aún no puedo creer que... - piensa un minuto, esbozando una sonrisa - YA SEA MÁS ALTA QUE TÚ - me quedo mirándola con seriedad, odio que me molesten por mi altura.

Giró los ojos y la suelto, cruzando los brazos.

- Oye...No te enojes - se acerca a mí con una sonrisa y se abalanza encima mío para hacerme cosquillas.

***

- Calle muévete - empujo a la niña, que es más o menos 7 centímetros más alta que yo para que me deje limpiar.

- Oye - ella se queja, como siempre, y me sonríe

- ¿Quieres que haga tu trabajo o no? - ella me abraza y niega

- ¿No te bastó con hacerlo durante todo ese tiempo? Ahora puedo hacer lo que me toca.

- Vale, luego no te quejes de que te arden las manos o te duelen los pies - Rueda los ojos y me saca la lengua

Pasamos el resto de la tarde limpiando las paredes del segundo piso, Valentina nos ayuda trayendo el agua y sacando el jabón de las paredes con una toalla enorme. 

Cuando acabamos es casi la hora de la cena así que esperamos en la habitación. 
Decido cambiarme la ropa que traigo puesta, ya que está húmeda y me puedo resfriar. 

Confío en Daniela así que me quito la blusa frente a ella y voy a buscar otra.

Me tiró en la cama, a su lado, mientras desdoblo la camiseta que me voy a poner.
Valentina juega con una muñeca en el piso.

- ¿Qué es eso? 

- ¿Qué es qué? - le sonrío y levanto una ceja, confundida. Y escondo mi brazo por inercia, aunque ella no mira hacia mí

- Eso - ella señala un bulto tapado con una sabana en el rincón de la habitación.

- Me asustaste, boba. No es nada, solo un maniquí - me pongo la blusa, que cubre mis brazos, y quito la sabana llena de polvo - ¿ves?

- Que miedo, Majo - me río y le golpeo la frente con delicadeza

- Me asustaste, estúpida.

- ¿Por?

- No sé...pensé que había una araña o algo - me pongo un pantalón corto y tomo a la niña del suelo para cambiarla. 

Valentina es demasiado pequeña para su edad, así que normalmente la visto bien cubierta para que no vaya a enfermarse. Hoy le pongo un sweater de fresas y unos shorts, porque está bastante cálido. 

- ¿Y si aprovechamos que no hay nadie y salimos al jardín a jugar? - Le sonrío a Daniela y asiento. 

- ¿Futbol?

- Lo que quieras - agarro el balón y tomo a Vale de la mano, bajamos las escalas corriendo, con Daniela delante mío.

- Dani, sacas - le lanzo el balón y ella lo atrapa con rapidez.

- Es extraño oír que me dices "Dani", en el colegio habían varias Danielas así que todos me llamaban por mi apellido adoptivo: Calle.

- ¿Prefieres que te diga así? - le sonrío y pateo el balón, pero ella lo tapa.

- Dime como quieras, Poché - pronuncia mi apodo con tono infantil.

- Como quieras, la que gane el partido lava la ropa mañana - Me burlo y pateo el balón, pero no veo que Hugo está en la entrada y lo golpeo sin querer.

***