Capítulo 51 - Ajuste de Cuentas

31.7K 1.1K 1.4K
                                    


POV Calle

Abrí mis ojos lentamente, sintiendo el dolor en mi cabeza. Me giré de un lado a otro en la cama, buscando el cuerpo de mi mujer. Pero estaba vacía. Gruñí palabras incoherentes tan pronto como mis ojos vieron la claridad que venía desde la ventana.

¿Donde está Poché? Jesucristo.

Me senté en la cama, frotando mis ojos ligeramente. La noche de ayer fue más emocionante de lo usual. No recordaba mucho, pero sabía que en medio de todas las borrachas yo era la que estaba mejor. Solo tuve la ayuda de Kim que por cierto era la única sobria, para ayudarme a sostener a todas esas mujeres.

¡Dios!

-¿Que estuvieron haciendo?- Preguntó Paula en cuanto puso sus ojos en nosotras cuatro.

Se había quedado en la mesa con Kim y Laura, que estaba acurrucada en los brazos de una hermosa rubia.

Aida dejó salir una graciosa y ruidosa risa, los efectos se hicieron presentes en la mujer.

-No quieres saberlo.-

Paula amplió sus ojos y abrió su boca.

-¿Sexo grupal? ¿Y no me llamaron?- Dijo emocionada y algo borracha. Poché ya me había dicho del apetito sexual de Paula.

-Ni siquiera para compartir, huh.- Fue el turno de Laura de hablar. -Te extraño, Poché.-  Completó guiñando a mi novia.

Observé a la mujer de manera seria. La maldita mujer de negocios siempre se aseguraba de coquetear a mi mujer. Todo para provocarme, y como siempre, no pude controlarme.

-¿Puedes callarte?- Exclamé con ira.

-Calle... Mantén la calma.- Me susurró Poché.

- Ella me provoca.- Resoplé con ira.

Poché dejó salir una sonrisa inocente y se giró para verme, haciéndome mirarla en sus intensos ojos verdosos.

-Soy tuya, te lo demostré, ¡¿o no?!-

Dejé salir una sonrisa relajada y besé sus labios muy despacio. Girándome hacia Laura para mostrarle mi expresión victoriosa. La mujer rodó sus ojos y tomó a la rubia de su lado.

-Se ven destrozadas. ¿Lo hicieron juntas?- Preguntó la amiga de Poché con mucha curiosidad.

-¡Por el amor de Dios, Paula!- Exclamó Kim. -Estaban bailando.-

-Casi eso.- Dejó salir Alba.

-Voy a rezar mucho por ustedes esta noche. A Jesús no le va gustar esto, chicas.-

-Paul, cállate.- Hablé empujándola.

-¿Nos vamos?- Susurró Poché.

-Sí, vamos, bebé.-

-¡No, no, no! ¡Vamos a beber!- Dijo Aida alzando su vaso a lo alto.

Y bebimos, mucho. Hasta el punto de no poder estar de pie. Han sido muchos años desde que no salía así y me divertía mucho.

Salí de la cama lentamente y fui al baño. Con cada paso hacia el baño podía escuchar el sonido de la ducha. Dejé salir una risa suave y tan pronto como abrí la puerta pude ver el maravilloso cuerpo de mi novia. Estaba concentrada en la ducha caliente. Las gotas de agua hacían que el cristal de la ducha fuese algo borroso. Pero podía ver fácilmente sus hermosas curvas.

-Linda vista.- Dije.

Poché en un salto se giró hacia mí.

-¡Jesús! Me asustaste.- Exclamó asustada.

The Stripper [Caché]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora