The Best Of Me ≈Emiliaco≈

Capítulo 6: Malentendidos

≈Emilio≈

Camino a la escuela de ballet de Joaco, vamos montados en mi moto, él me está abrazando fuertemente de mi cintura, su cabeza va recargada en mi espalda, y puedo jurar que va con los ojos cerrados, no puedo evitar que se me salga una sonrisa, todavía no puedo lograr que se le quite el miedo, espero pronto pueda tener el dinero suficiente para comprar un carro y que ya no tenga que pasar por eso, aunque, definitivamente no me molesta que me abrace fuerte, aunque eso implique no poder respirar, yo puedo vivir con ello.

Hoy volvió a tocar el tema del "amor" y de mi sexualidad, quería que la tierra me tragara, sé que va a llegar el momento en el que le tengo que explicar el por qué no creo en el amor, es algo que he estado evitando desde hace muchos años, sé que le va a doler más de lo que me afecto a mí, es por eso que le he guardado eso, no quiero que sufra.

Lo de mi sexualidad, de por quién supe que era bisexual, yo creo que es un secreto que me voy a llevar a la tumba, es algo imposible...

-Ya llegamos moco- dije una vez que aparque la moto.

-Gracias por traerme-dijo bajándose

-¿Sales a la misma hora?, digo, para pasar por ti

-Sí, o más seguro que me quede un poquito más, ya sabes para practicar, de todas formas, vente con cuidado, no te apures, cualquier cosa, te mando mensaje.

-sale pues entonces me mandas mensaje- termine diciendo, se despidió con un beso en el cachete y se alejó por el pasillo.

Yo lo seguí con la mirada, antes de entrar a su salón vi que en el de enfrente salía un vato y lo saludaba de beso en el cachete, sabía perfectamente quien era, Andrés, él es dos años mayor que yo, enseña ballet a los más pequeños, me quede viendo un rato más hasta que alguien me obstruyo la vista, en el momento reconocí de quien era esa cabellera rubia y china. Sandra.

-Hola Emi, que gusto que vengas otra vez por acá, ¿te vas a quedar para que veas como practico?- dijo con una voz bastante chillona, pestañeaba mucho, sentía que tenía un tic.

-Hola Sandy- hizo un chillido raro- no, solo vine a dejar a Joaco- su cara se puso más seria

-que lastima, yo quería que te quedaras para que me vieras- hizo un puchero

-será para la otra, yo ahorita tengo que ir a mi clase de guitarra y composición-

-eso es muy cool, como tú- dijo pasando una de sus manos sobre mi pecho- oye, quizás un día podrías traerme a mis clases y de paso de quedes para verme, y de ahí nos vamos a divertir, ya sabes- eso no sonaba mal, y no creía que a Joaco le molestara que lo dejara solo un día.

-mmm, eso me parece muy bien- dije con una sonrisa coqueta

-perfecto, ya vez que dentro de dos semanas es nuestra presentación- asentí- pues estaba pensando...-

En eso deje de escuchar a la mujer de enfrente, pues en ese momento alcance a oír esa risa que me alegraba muchas veces, y más porque la mayoría de ellas eran para mí, desvié la mirada de Sandra para ver de dónde venía esa melodía para mis oídos, y si, en efectivo, era la risa de Joaco, el problema era que en esa ocasión no eran para mí, era para el tipo que estaba con él. 

Ese tal Andrés no me caía bien, se mostraba demasiado perfecto, y no le quedaba, porque para perfectos, estaba Joaquin. De un momento a otro, el pensar que en algún momento pase este tipo de cosas con su pareja y no conmigo, me dolió, sentí un sabor amargo.

-¡ey! Emilio- de nuevo esa voz femenina me trajo de mis pensamientos- no me estas escuchando- puso su cara triste

-no, no es eso, estaba pensando en lo que me estabas diciendo