Grita | Teen Wolf #1|

Capitulo VII: Él lo sabe

 Lydia estaba en silencio con las manos cruzadas sobre la mesa de metal, su mirada parecía ausente y tanto el alguacil Stilinski como el oficial Parrish se preguntaban cómo demonios era eso posible.

—Parece como si estuviera en alguna clase de lugar dentro de ella —dijo Parrish aun observando a la chica que no se había movido desde que llego. Scott había sido llevado a otro cuarto, enseguida de que llamaran a la policía, estos habían llegado y habían encontrado a la chica histérica y a Scott abrazándola.

—Vio a una chica muerta, Parrish —dijo el sheriff— es normal que este aun en estado de shock.

Este asintió

—¿Ya se sabe quien era? —pregunto este sin despegar la vista del cubículo

—Kate Argent —dijo este— la familia estaba en Francia, vendrán al funeral.

El sheriff asintió antes de tomar la carpeta de la mesa frente a el y abrir la puerta de Lydia. Esta no levanto la vista cuando lo vio entrar. El alguacil dejo la carpeta sobre la mesa y se sentó en la silla.

—¿Quieres algo para beber?

Ella negó luego de un momento, lentamente.

—Tus padres están de camino —comunico el sheriff— ¿Quieres contarme que sucedió?

Ella se quedo en silencio un largo momento, tanto que pensó si respondería. Comúnmente esperaban 24 horas antes de hacer un interrogamiento y más si la joven había sido así de traumatizada.

—Me dio curiosidad el bosque—comento, apenas en un murmuro— quise ver el porqué todos hablaban de él, Scott decidió acompañarme y mientras caminábamos vi una casa a lo lejos. Estaba abandonada, así que simplemente entre.

El alguacil comenzó a tomar notas rápidamente, mientras Lydia continuaba relatando lo ocurrido.

—Oí un ruido en la parte superior —dijo mirando sus manos— así que subí las escaleras y cuando abrí la puerta...cuando abrí la puerta...

Su respiración se empezó a agitar.

—Lydia, este bien, estas a salvo aquí —dijo el sheriff intentando tranquilizarla

—Estaba la chica muerta —lagrimas empezaron a caer por sus mejillas— la...la sangre manchaba las paredes y...hacia tanto frio. Y solo podía gritar, no, no sé cómo llegue afuera...lo siento, pero no lo recuerdo.

El sheriff asintió

—Es normal que en este tipo de situaciones se entre en un estado de shock —dijo este tranquilizadoramente— a veces es la forma en la que podemos alejarnos del dolor.

Ella asintió, viendo como el sheriff abría la carpeta.

—¿Conocías a Kate Argent? —pregunto este

Ella negó

—Soy nueva en el pueblo, recién estaba empezando a conocer gente—.dijo lentamente mientras se pasaba una mano por la nariz y se limpiaba las lagrimas— solo conocía a Scott, Jackson y Stiles...

—¿Stiles? —Pregunto el sheriff— soy su padre, la está afuera, ahora entiendo la razón. ¿Algún familiar tuyo conocía a Kate?

Ella negó

—No lo sé, lo siento —dijo ella— no mantenía el contacto con mi familia fuera.

El sheriff bajo su vista a la carpeta que tenía entre sus manos.

—Míralo, ahora está mirando la carpeta...—la voz le susurro a su lado, antes de decir una impactante frase— él lo sabe

—Fuera...en el psiquiátrico ¿cierto?—pregunto el sheriff— Scott no parece saber de dónde vienes.

Ella respiro profundo

—Miente

—Quiero comenzar de nuevo —dijo ella— ser diagnosticada esquizofrénica de pequeña arruino prácticamente mi vida, ahora estoy curada.  No puedes hacer amigos si dices que desde pequeña eras...diferente.

El sheriff asintió cuando un golpe sonó en la ventana.

—Bien, tus padres ya están aquí —dijo este— los dejare pasar y luego te pedirán que escribas tu declaración ¿bien? luego podrás irte.

Ella asintió

El sheriff recogió la carpeta plateada y salió del lugar, cerrando la puerta detrás de si. Camino hasta Parrish quien se encontraba viendo todo el interrogatorio.

—¿Qué cree?

—No parece una asesina —dijo este— Scott estuvo con ella cuando encontraron el cuerpo y nunca sale de su casa, lo confirmaron sus padres. Además, su esquizofrenia no llegaba a ser violenta, así que no le hacía daño a nadie.

—¿Quien cree que hizo esto?—pregunto Parrish

—No lo sé—dijo el alguacil— pero sea quien sea, ahora estará observando a esta chica.

Ambos la miraron en silencio

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—Vas a una fiesta y encuentras un cadáver —dijo Jasón— eso es empezar por lo alto.

—Jasón, cállate—dijo su padre— ¿te encuentras bien?

Lydia asintió, por fin estaba fuera de la comisaria y apenas había podido ver a Scott y Stiles. Sus padres prácticamente la habían arrastrado fuera y ahora se encontraban en el coche conduciendo hacia la casa.

—Estoy bien —dijo ella asintiendo, cambio su vista hacia la ventana, la carretera se encontraba vacía, oscura y solitaria. Un auto venia más adelante que ellos, conduciendo lentamente.

—Esto es un desastre —dijo su madre— la prensa no la dejara en paz.

Ella suspiro, sus padres tenían la clásica idea de tener conversaciones frente a ella como si ella no estuviera. ¿Acaso no se incluía en la situación?

—Cariño, el sheriff dijo que se encargaría de ello —dijo su padre— deja de preocuparte.

Su madre negó

Lydia apoyo su cabeza contra la ventana mientras suspiraba, estaba envuelta en la chaqueta de su padre y sus zapatos estaban llenos de barro. Había sido llevada directamente a comisaria, interrogada, luego le habían hecho escribir la declaración y finalmente había podido irse. No era su plan, no lo era. No entendía porque la voz la había llevado hasta allí, que quería... ¿Por qué quería que gritara? ¿Cuál era su destino?

—Lydia... —la llamo su madre

Ella alzo la vista mirándola

—¿Qué sucede? —pregunto

—No hablaras de esto en la secundaria ¿bien? —Dijo su madre firmemente— tampoco a nadie. ¿Entendido?

Ella asintió

—No fue mi culpa, sabes —le dijo entre dientes, odiaba que la hiciera ver como la culpable...no lo era... ¿no?

—Bueno, podrías no haberte metido al bosque en un primer lugar —dijo su madre— ¿Qué estabas pensando al hacer eso?

—Lo siento, ¿bien? —Dijo ella ya cansada— siento no haber sido como esperabas, ¿okey? Estoy cansada de esto.

—¿De esto? —pregunto su madre casi gritando y girándose por completo en su asiento— no sabes realmente lo que fue...

—¡Tu no eras la que estaba en un psiquiátrico! —le grito— ¡Así que no digas que no sé como fue realmente! Yo fui la que estaba sola ahí dentro, allí donde tú no estabas... ¿Qué madre le hace eso a una hija?

Su madre se quedo en silencio

—¡Cuidado! —grito Jason

Lydia miro al frente justo para ver el coche moverse debido a la frenada abrupta de su padre

—¿Qué demonio...? —dijo ella cuando el auto comenzó a girar, parecía que todo empezaba a suceder en cámara lenta.

 Lo único que pudo recordar de esa noche, es oscuridad. Oscuridad con olor a sangre.