Capítulo 2 (Yoongi)

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Cuando cerraba los ojos, todo lo que giraba a mi alrededor parecía desaparecer, todo parecía pausarse y solo escuchaba el traqueteo y el roce de las zapatillas con el suelo. También sentía mi cuerpo moverse de un lado a otro en formas serpenteantes como si de un cisne se tratase y mis piernas se deslizaban de una forma tan suave que parecían tirar del resto de mis partes del cuerpo como si hubiesen cogido el dominio de incluso mi propia mente.

''Un, dos, tres, un, dos, tres'' recitaba mi subconsciente desde algún lugar de mi mente. Sin embargo, cuando volvía a abrir los ojos allí estaba otra vez, en aquella sala de baile con aquel enorme espejo que de alguna forma hacía que desafiases a tu yo reflejado en el cristal como si de un enemigo al que retar se tratase. En mi caso, cada vez que me miraba a mi mismo en aquel espejo sentía la necesidad de demostrarle a mi yo del otro lado todas mis capacidades hasta el punto de quedar exhausto, porque solo me quedaba satisfecho si sobrepasaba mis límites o al menos, eso era antes.

- ¡Suga! - gritó alguien a mi lado.

Me sobresalté un poco y miré a mi alrededor algo aturdido. Mierda, me había vuelto a pasar. Todos mis compañeros me observaban desde los sitios que tenían asignados para la coreografía que llevamos ensayando unos cuantos meses y con la mirada me hacían muecas de preocupación e incomodidad por la interrupción que acababa de generar tanto a ellos como a la coreógrafa del baile. ''Ah... la coreógrafa. '' pensé nada más percatarme de que había sido ella quien me había gritado y volví la vista levantando un poco la cabeza para mirarla fijamente a ella.

- ¿En que estas pensando? Estábamos en el momento culmen del baile y de repente te has parado. ¡Hasta Jin que tenía que deslizarse hasta tu sitio en ese momento se ha chocado contigo y ni te has percatado! –

'' ¿Qué Jin qué? '' pensé.

Tras escuchar las palabras algo molestas de la coreógrafa me giré para mirar a Jin. Ni siquiera me había dado cuenta del impacto de nuestros cuerpos ni tampoco de que la clase se había interrumpido por mi culpa. Aun así, y algo avergonzado, me acerqué a mi compañero y apoyé mi brazo en su hombro a modo de disculpa.

- Perdona tío, de verdad. Tenía la mente en otro lado y no sé qué me ha pasado. -

- ¡Tranquilo hombre! Todos tenemos un mal día. - dijo Jin con una sonrisa en los ojos apartando mi brazo de su hombro para quitarle importancia a la situación.

Sonreí aún algo avergonzado y me aparté un poco. Al lado de Jin se encontraba Jungkook sonriendo de manera cómplice con el fin de calmar mi incomodidad y mi vergüenza y junto a él también Taehyung, Hobi, Namjoon y Jimin quienes me observaban de manera cómplice, aunque algo preocupados. Suspiré aliviado. Cada vez que sucedía algo por el estilo, da igual quien hubiese sido el causante, siempre estaba el resto del grupo para restarle importancia a la situación o para animar un poco el ambiente. Esa era una de las cosas que más agradecía de toda aquella vida que me había llegado hace 7 años y lo que nunca cambiaría por nada del mundo.

- A lo que iba. Tienes que controlar esos momentos porque te lleva pasando tiempo y estás parando al resto del grupo. ¡Céntrate! – dijo de repente otra voz. Aquella voz.

Chasqueé la lengua algo molesto y poniendo los ojos en blanco me giré para volver a mirar a la coreógrafa.

- Lo siento Haneul... de verdad que no va a volver a pasar. Se me ha ido la olla y me he descontrolado un poco. - respondí de inmediato.

- Siempre lo mismo. Interrumpes la clase, molestas a tus compañeros y acabas con la misma excusa de siempre, Suga. ¿Hasta cuándo? .-

- Haneul... que no pasa nada de ver...- intervino Jin de repente. Sin embargo, sus palabras fueron cortadas de inmediato por Haneul.

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