Fragmento numero 3

22 1 0
                                    


"Por qué tendría que acostumbrarme a lo que me dice el resto de la gente?

Por qué tengo que escuchar sus palabras? Por qué tengo que seguir adaptándome al mundo si jamás me hizo sentir como en casa?

Por qué tengo que intentar ser amable, intentar socializar, esmerarme por conocer gente nueva, cuando en realidad eso es lo que menos deseo en la vida?

Intentaba explicárselo, decirle el por qué de mi ser, de mi personalidad.

La gente camina a lo largo de nuestras vidas, conocemos caras nuevas, almas nuevas, prácticamente todas no se transforman en más que en un recuerdo.

Estaba cansado de intentarlo una y otra vez, estaba cansado de fracasar en todo, cansado de fracasar en intentar ser alguien que no soy.

Me avergonzaba decirle al Doc, la manera en que los pocos amigos con los que me relacionaba se burlaban de mí, por el hecho de no poder acercarme a una chica que no conocía, que temía conocerla. Me costaba expresarles a mis pares que yo no sentía ningún conforte de estar con alguien una noche y después de acostarme con esa persona, apresurarme por cambiarme y alejarme del lugar. Lo que en realidad buscaba y busco dentro de mi ser es poder encontrar ese pequeño cable a tierra, que siento jamás tuve. Encontrar ese "Alguien" que los cuentos de hadas y libros románticos nos plasmaron de manera platónica. Ese alguien con quien puedas despertar todos los días, ese alguien a quién no le interese tus defectos, ni tampoco le interese que seas un amargado, o que en vez de rechazarte porque tenés ropa gastada y rota, que se ría de ello y contagie su momento feliz a vos.

Encontrar ese pequeño trozo de luz que pudiera desgarrar tanta oscuridad, que pueda devolver el sueño, que te quite la ebriedad voluntaria sin ningún esfuerzo alguno, que encuentre la manera de hacerte sonreír con cosas tontas, cosas sencillas, cosas espontáneas.

A veces intento explicarle también, que estoy consiente de mi deseo imposible, mi deseo lejano, que tengo entendido que mi fantasía no es más que eso: Una fantasía.

No era noticia nueva de que me gustaba mucho estar solo, que no me gustaba la compañía, que no me interesaba mucho en conocer gente nueva.

Cuando me preguntó "Por qué no te interesa conocer gente nueva?"

Le respondí que, siempre que conozco a alguien y se une a esta pequeña porción de mi vida, termina desapareciendo de manera inevitable, se aleja, nos obligamos a olvidarnos, a convertirnos en recuerdos y nada más.

Y le dije también que, estaba cansado de tener que olvidar a la gente, que mucha gente hoy en día no sé como se encuentran, qué es de su vida, siquiera si es que están vivos.

La gente se aleja de todo y todos, la gente se protege. Cada quién crea su propio escudo protector, aunque algunos (Como yo, por ejemplo) crean una coraza de titanio y no permiten que nadie toque lo mejor de ellos. Siempre intenté dar lo mejor de mí, pero siempre al final de cada historia que escribí de la mano con alguien, sentí que fracasé, que no fue suficiente, que no logré más que lastimar a alguien y lastimarme a mí mismo. Es verdad que extraño estar con alguien, que me gustaría poder volver a enamorarme como alguna vez lo hice, poder sentir que ese amor es retribuido de manera total.

Aunque comprendo que es imposible, el ser humano es la criatura viviente más problemática del mundo entero. Somos la única raza a las que se les ocurrió crear conceptos tan innecesarios como la política y la religión, que realmente mirando de manera  más profunda para lo único que sirven son para separar a los unos de los otros.

Podría seguir relatando y describir la manera en que su mirada no decía absolutamente nada, sentía que él pensaba que estaba perdiendo el tiempo conmigo, que mi pesimismo no tenía cura. Que mi cabeza estaba podrida y que tal vez debería optar por un chaleco de fuerza dentro de un manicomio, en vez de una terapia particular con un psicólogo.

Muchas veces pensé en decirle que yo creía que la vida conmigo fue muy injusta, que no quería seguir viviendo esto, que estaba cansado de tanto rechazo, de tanto abandono, de tanta violencia, pero siempre que lo pienso me doy cuenta de que el odio dentro mío se alimenta como si fuera un cadáver fresco flotante en un mar lleno de tiburones.

Pensando a pasado, creo que puedo ver por qué estoy solo. Creo saber el por qué todas mis parejas se alejaron de mí y se rindieron en un punto. Dejaron que me ahogara solo, como siempre sucedió. Tal vez pensaron que así iban a ayudarme, que así iba a cambiar.

Fracasé, pero ellas también fracasaron. Yo nunca cambié ni nunca voy a cambiar. Si tengo que seguir esperando a mi Cenicienta hasta el día que me vaya a la tumba, supongo que será así, estaré muy errado en que los pensamientos platónicos estén tan aferrados a mí? Madre santa, necesito un trago."

Blu Uroko

31/12/2016

Caminando por mi propia cuenta.Where stories live. Discover now