CAPÍTULO 5 º 2 DE AGOSTO 01:34 a.m. GABRIEL

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JAMÁS EN LA VIDA ENCONTRARÉIS TERNURA MEJOR, MÁS PROFUNDA, MÁS DESINTERESADA NI VERDADERA, QUE LA DE VUESTRA MADRE. Honoré de balzac


Podía percibir el olor de la hierba, el calor relajante del sol de media mañana y su risa en el horizonte que me animaba a reunirme con ella. Pocas veces la había visto tan feliz. Estaba radiante con ese vestido blanco de tirantes y flores de colores suaves que destacaban en su larga melena oscura. Su sonrisa mientras me esperaba iluminaba todo el paisaje amenazando competir con nuestra brillante estrella. Me acerqué a ella, podíamos escuchar el sonido de un manantial de agua cristalina a pocos metros de nuestro prado.

Su mano aterciopelada tomó la mía, me guiñó un ojo y tiró de mí en su dirección. Un "mamá" se deslizo entre mis labios cuando sentí el tacto de su piel acariciando mis dedos. No recordaba un momento más especial en ese instante que aquel que estábamos viviendo.

Nos acercamos al agua, había un barranco por donde caía a modo de cortina de postal. "No tengas miedo" sonó a modo de murmullo acercándose peligrosamente al borde del precipicio. La idea dejó de convencerme de inmediato al otear la altura desde donde nos encontrábamos.

De repente, una fuerte brisa acompañó al empañamiento del cielo, sumiéndolo en una terrible oscuridad provocada por grises nubes que desencadenaban una cruel tormenta sobre nosotros. La mano de mi madre se despejó con crueldad de la mía y ambos nos miramos con sorpresa y pánico.

- ¡¡¡Mamá!!! – grité alarmado mirando como aquel barranco la iba rodeando.

- ¡¡¡Gaby, ayúdame!!! ¡¡¡No me dejes caer!!!

Su lamento activó mis piernas y corrí en su auxilio. Me tiré al suelo, y cogí con fuerza sus brazos. Bajo sus pies, el vacío quería apoderarse de ella y tragársela hacia su interior. Sus manos se escurrían de las mías y me sumían en la más absoluta desolación y soledad. Sus ojos estaban inyectados en terror, lloraba y pedía mi ayuda. Pero mi fuerza no era suficiente. Me sentí fracasar en mis esfuerzos por recuperarla, el viento y el vacío la arrancaban de mi lado sin dejarme poder hacer nada. Gritaba "mamá" una y otra vez.

- ¡Gaby!

En unos segundos, mi madre cayó en aquel agujero negro...

- ¡Gaby! ¡Despierta!

...apartándola de mi lado y dejándome con aquella mirada de desesperación sobre mis retinas y el pulso totalmente fuera de control.

- ¡Despierta! ¡Despierta! – La voz de Josh inundó mis oídos. Abrí los ojos agitado, envuelto en sudor y la respiración acelerada. – Estabas soñando con tu madre, pude oír cómo la llamabas – dijo sentándose a mi lado – tranquilo, sólo era una pesadilla.

- Todo esto está afectándome mucho – reaccioné tomando un poco de agua del vaso que dejaba cada noche en la mesilla.

- Es normal – susurró intentando consolarme – pero no te preocupes, mañana daremos parte de su desaparición y todo el mundo conocerá su cara. Alguien tiene que haberla visto Gaby, o saber algo. Ya verás, todo se arreglará. Intenta dormir un poco, hay que madrugar para ir a clase, yo me quedaré despierto un rato.

- Gracias Josh – dije dejando el vaso de nuevo sobre el mueble – pero no me mires mientras duermo – bromeé – que me da repelús.

Mi amigo rio y me tiró un cojín. Se lo devolví divertido, una y otra vez. Una de las muñecas de sus hermanas, que estaban en las estanterías del fondo, se cayó al suelo, parando de golpe nuestro juego.

- Estas niñas... - Josh se agachó para recogerla - ... lo colocan todo para que se caiga por nada. Venga duérmete princesita ¿quieres un besito de buenas noches?

- Que te den – me di la vuelta fastidiado arrancando una risa a mi amigo.

Josh tenía razón, la cara de mi madre iba a salir en todos los noticieros, pronto sabríamos algo de su paradero. Tomé una respiración profunda y cerré los ojos. Mi amigo había intentado consolarme y, en cierta medida lo había conseguido. Sin embargo, Erin Marino, no era una mujer que pudiera abandonar a su hijo bajo ninguna circunstancia.

Un escalofrío se apoderó de mi cuerpo cuando sentí algo...

No podía quitarme de la cabeza la idea de que mi madre me pedía ayuda en mi sueño. Nosotros siempre habíamos estado conectados, de una forma u otra, ¿sería esa su manera de pedirme auxilio? Lo sé, es una locura, de todas maneras, siento que está cerca...

. . .

A la mañana siguiente, tras una ducha reparadora y sin haber estudiado para el examen, Henry, el clon adulto de mi amigo Josh, nos esperaba con el coche arrancado para acercarnos al instituto. Ellos hablaban de sus padres y sus hermanas durante el trayecto, de que estaban nerviosas por su actuación de ballet y de los recuerdos que sus abuelos les mandaban a los hermanos. Yo, miraba al cielo, gris pizarra, a través de la ventanilla del asiento trasero.

Un rápido recuerdo me trajo de nuevo la pesadilla de anoche a la cabeza y pude ver los ojos de mi madre envueltos en terror cuando se precipitó al vacío.

Josh y yo nos despedimos de Henry y nos adentramos en nuestra aula atravesando los pasillos concurridos de adolescentes empapados en hormonas. La clase del Señor Smith era la primera, química avanzada, el valiosísimo examen del que no tenía noción alguna.

- ¡Eh, parejita! – nos gritó alguien desde atrás antes de que el profesor hiciera acto de presencia – seguro que habéis estudiado juntitos – se burló haciendo reír al resto de la clase.

- No le hagas caso – Laura, la bella Laura, echó un vistazo hacia atrás a modo de protesta – Logan es un capullo.

Sonreí con timidez ante su comentario e intenté concentrarme en lo que habíamos repasado en clase para el examen. Ese había sido Logan Buster, el típico guaperas que gusta a todas las niñas sin cerebro, el que tiene su propio séquito para reírle las gracias y que no le da ningún pudor meterse con quien le dé la real gana.

Laura era diferente, ella no había caído en sus encantos, veía más allá de que alguien sea guapo y popular. Siempre estaba con nosotros en el descanso del almuerzo acompañada por su amiga Carlise. Aunque éramos una piña, de momento no tenía pensado admitir lo que esos ojos marrones provocaban en mí.



EN 3...2...1...

AQUÍ SEGUIMOS AMIGOS, UN POQUITO DE TERNURA DENTRO DE ESTE CAOS, Y CAOS DENTRO DE LO BELLO... ASÍ ES LA VIDA EN REALIDAD, ¿NO?

GRACIAS POR SEGUIR A MI LADO, CONTINUANDO CON LA MISMA ILUSIÓN.

BESIS CARIÑOSIS

MARGA 

LUSS: EL LÍMITE DE LA VERDADWhere stories live. Discover now