La angustia y desesperación dominaban a Kokichi por completo, su pecho dolía y no lo aguantaba, "¿Dónde estás?" Preguntó una y otra vez al viento, rogando porque sus palabras llegasen a él, pero nada, no habían respuestas. No estaba seguro de como sentirse, pero sabía que había un asco dirigido a sí mismo, no podía quitarse de la cabeza las acciones de Rantaro, mucho menos el beso, y eso lo hacía querer vomitar o llorar. Y no, no es que no le agradase Amami o sintiese asco por él, pero, sus acciones fueron poco menos, despreciables, aún más cuando intentaba acercarse a Kokichi o ayudarle con la búsqueda, actuando como si nada hubiese pasado.
ㅡ Kokichi, vamos, no puedes seguir buscando por tu cuenta, estás adolorido y no puedes concentrarte ㅡ Dijo el peli-verde, una vez más, intentando que el oji-amatista le prestase atención.
ㅡ Quiero que sepas que mi paciencia es muy corta idiota, deja de actuar como si esto no fuese tu culpa y deja de intentar hablarme, me tienes harto ㅡ
ㅡ Piensa en tus palabras Kokichi... no estás razonando... ㅡ Tomó las muñecas del más bajo con suavidad, este reaccionó tirando sus brazos hacia abajo, soltandose de inmediato del agarre.
ㅡ ¡No me toques! ¡A menos de que sea una maldita disculpa o una explicación no quiero escuchar tus estúpidas palabras vacías! ¡No sabes como me siento y no necesito tu maldita lastima! ㅡ
Rantaro chasqueó la lengua, claramente su plan no estaba funcionando como él lo había planeado, pero bueno, Kokichi no es alguien predecible que digamos, y claramente no iba a caer en sus brazos en cuanto Shuichi se alejase, Amami simplemente era un idiota.
ㅡ Bien, encontraré a Saihara por cuenta propia ㅡ Escupió algo enfadado consigo mismo, y dejó a Kokichi solo.
ㅡ Que mierda ocurre contigo... ㅡReplicó, más para sí que para él, y siguió con su busqueda.
El peli-verde no sabía que hacer, claramente la había cagado, pero su arrogancia no le permitía decir perdón, golpeó una pared enfadado, haciendose algo de daño gracias a sus anillos, a la vez que soltó un gruñido, no podía ser tan difícil.
ㅡ ¿¡Cómo puedes amarlo a él y no a mí!? ㅡ
Gritó, sin notar que ya se encontraba llorando, nada, nada funcionaba, llevaba desde que entraron a ese estúpido reality enamorado del peli-morado y no había más que fallos en ese amargo y asqueroso amor que sentía por él. Sus celos por Saihara tampoco hacían más que crecer, ¿Qué tiene de bueno que Rantaro no tenga? ¿Acaso es su talento? ¿Acaso es ese estúpido y ligero tartamudeo, o su personalidad amable y tímida? No lograba entenderlo, pero, no podía odiar a Shuichi, aún lo consideraba su amigo, aunque dudaba si este le llamaría "amigo" luego de lo que hizo.
ㅡ Q-que mierda ocurre conmigo... ㅡ
"¿Cómo es que puedo ser tan egoísta?..."
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Al anochecer, Keebo acompaño a Kokichi con su busqueda, a la vez que intentaba aconsejarlo o apoyarle, pero era un poco imposible de hacer ya que el peli-morado negaba sus sentimientos y se cerraba, impidiendo el paso de las palabras del contrario. En cuanto el anuncio Monokuma sonó, ambos decidieron ir al laboratorio de Keebo a pasar el rato y tratar de distraerse, antes de ir a la cama.
ㅡ Kokichi... odio preguntar esto pero... ¿Por qué nunca hablar sobre tus sentimientos? ㅡ
Kokichi tragó duro, tensandose ante la pregunta, definitivamente no quería contestar aquella pregunta.
ㅡ No es de tu incumbencia, un robot como tú no puede entendernos a nosotros los humanos ㅡ
Keebo rodó sus ojos, claramente esperaba una respuesta como esa, mas, siguió insistiendo, hasta que el peli-morado se cansó, y decidió hablar.
ㅡ No... no quiero que piensen que soy débil... ㅡ
ㅡ ¿Qué quieres decir con eso? ㅡ
ㅡ Pues lo que dije Keeboy, no quiero que piensen que soy un debilucho y que pueden hacerme daño con facilidad... ㅡ
ㅡ Pero si es obvio que eres el más preocupado por Shuichi... ㅡ
ㅡ ¡Eso ya lo sé! ㅡ Gritó sin notarlo, aferrandose a sus ropas y apartando la mirada ㅡ Desde que... ㅡ Dudó un poco en confesarle a Keebo sus verdaderos sentimientos, pero sentía que de algún modo, podía confíar en él, así que siguió ㅡ Desde que conocí a Shuichi... me he vuelto aún más débil... es... difícil ocultar lo que siento... mucho menos ahora que sabe que estoy enamorado de él... bueno, dudo que lo crea ahora, gracias a Amami-kun... ㅡ
ㅡ ¿¡T-te gusta Saihara!? ㅡ
Soltó sin notarlo, luego de unos segundos, Keebo no sabía que contestar, así que simplemente se acercó a Kokichi, abrazandole con fuerza.
ㅡ Sé qué no soy humano y no puedo entenderte... pero, quiero intentar ayudarte, ¡Volaré por toda la escuela y usaré mi visión x-ray para buscar a Shuichi! Y... a mí no me importa que seas débil sentimental o físicamente Kokichi, al menos, yo sé que puedo llamarte mi amigo, ¡Y te defenderé si alguien te insulta! ㅡ
Kokichi quedó perplejo ante el repentino abrazo y las palabras del robot, pero, correspondió al abrazo, aún siendo de metal, se sentía algo tívio y cómodo, no se esperó eso, fue algo lindo de su parte. Se quedaron hablando por unas horas, para finalmente ir a sus habitaciones a descansar y seguir con la busqueda al día siguiente.
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ㅡ ¡Le encontré! ㅡ
