Conectando Estrellas *Notas de autora*

Túnel de Luz.

Hola a todos c:

Algunos me han estado preguntando por la novela corta que subí hace poco y que ya no está disponible. ¿Hay una razón? Sí, la hay. Yo subí esa historia hace más de un año en una crisis que tuve como un anecdotario para tratar de sentirme mejor. Pero ese día no llegó. Sólo quería desahogarme un poco y yo sé escribir así que dije ¿Por qué no? Con el tiempo, entré a universidad (estaba en último año de preparatoria cuando comencé a subirle) y ahora que acabo de cumplir 19 años veo hacia mi niña de 17-18 años como una persona completamente distinta.

¿En qué sentido? Super inocente, me creía todas las promesas que me hacían, muy vulnerable al daño y más que nada confianzuda en la gente que me rodeaba. Yo esto lo comenté con mi hermana que me ha acompañado en toda mi cuarentena y haciendo una observación objetiva, terminé de caer en la cuenta que así era... De hecho para medir intenté contar cada vez que lloré y no pude. Me di cuenta en que efectivamente, era tan inocente, tan frágil, creía totalmente en que si me prometían: me quedo. Yo me la creía, totalmente. Hace un año que salí de preparatoria y cumplí años hace unos días, me veo al espejo siendo la misma chica adorable, soñadora, que ama el dibujo y la escritura y ama a los suyos, que no deja de soñar pero que ahora cambia y evoluciona según la situación, que todo el día anda pensando en cosas divertidas o algo que hacer... Y tengo mucha tristeza de mi otra yo.

Antes de que empezara la pandemia estaba totalmente feliz. Ahora, quizá no tan feliz por lo que el mundo es y cómo se desarrollan algunas cosas, pero tranquila y llena de mi corazón de saber que las personas que me estiman se preocupan por mí, que tengo amigos y que mi familia está orgullosa de mí, la niña de la casa que ahora es la prácticamente adulta joven de la casa. Y están orgullosos de mí.

Con el paso de la pandemia al no poder ir al exterior, empecé a ver en mi interior y hacer cosas para sentirme mejor conmigo misma. Y es en lo que estoy haciendo, junto con mi hermana de modo objetivo y totalmente sincero. Lo primero que vi entonces fue que siempre pongo a los demás primero: si voy a hacer tarea y alguien me pide ayuda, me detenía para ayudarlos a hacerla. Si me hablaban aunque tuviera que ir a casa, me esperaba a ver que se sintieran bien (por lo general mis amigas, ya que vienen por ellas en la tarde y se quedan ahí), si alguno iba  tarde a clase, hablaba con el profesor para que supieran que venían tarde o pasaba algo. Y entonces llegaron las clases online.

Las odiaba. Por que había sido muy feliz en mi segundo cuatrimestre. Pero creo que todo bien, las cosas en mi tercer cuatri fueron un poco duras después, tuve problemas con mi horario, a algunas clases no podía entrar aunque mis amigos sí, le pedí al profesor que metiera a dos amigos y al chico más especial que había en mi corazón... Cuando tuve problemas, no pude ingresar, nadie preguntó por mí. Aunque le había pedido al profe que los metiera, eso por mencionar algunas cosas. No es que me importe, simplemente es la consideración de tener un detalle con otro.

Pero, lo más importante fue que retrocediendo en el pasado, cuando recién entré a la universidad... Fue de los peores días de mi vida. Pero esa historia no la quiero contar, para resumir, me detuve. 

Literalmente. Parecía un zombie yendo y viniendo de la escuela a mi casa y al revés. Dejé de salir y solía ir a pasear a la plaza que había a un lado de mi escuela con una amiga para despejarnos la mente. Dejé de tomar el aire, me encerraba en cafetería o la biblioteca, a veces huía al campus de prepa para estar sola, dejé de juntarme con mis amigos y dejé incluso de comer. Andaba deambulando por ahí, llorando a veces en los baños... Fue una tragedia. Me detuve completamente, cuando acudía a pedir algún consejo no había tiempo, estaban con sus parejas, ya se habían ido... Estuve totalmente sola. Pero me sirvió para estar por mi cuenta, aprendí a solucionar mis cosas, hacer mis tareas y poder acostumbrarme a la universidad.