◇Rutina◇

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Edad: 15 años

Era muy noche, me dirigía hacia mi casa después de mi trabajo, si es que así se le podía llamar.

Después de todos los sucesos que viví juntos con aquellos villanos, trate de disfrutar mi libertad, pero simplemente no podía. El recuerdo de que fui culpable de asesinatos por ser tan inútil me atormentan cada día, mi meta de ser un héroe sigue en pie pero mi mente no puede descansar del todo, sueños de mi madre, padre e incluso de aquella familia que murió y no hice nada, todo eso es lo que me despierta por las noches dejándome un insomnio insoportable.

Necesitaba una distracción de todo esto, algo mas fuerte que todas las medicinas que el psicólogo me recomendó. Y es que le pedí a mi tío Yagi una oportunidad para un héroe clandestino...

Ser héroe clandestino consistía en ayudar y salvar personas por las noches, sin necesidad de tener una licencia, mi tío y algunos de sus amigos después de ver mi situación la cual ningún medico, psicólogo o cualquier persona podría curar, solo yo podía hacerlo, y para eso tenia que pagar por mis pecados.

Así fue como, desde los 12 años salia a las calles en las noches, me dirigía a un departamento de héroes y salia a patrullar o a hacer alguna misión que ellos me otorgaban, me las daban héroes con licencia, todo esto con la condición de siempre esconder mi identidad y no hacer misiones muy difíciles. Esto despejaba mi mente por las noches, me ayudaba entrenar para cuando entre a la UA, no podía usar mi kosei ya que daría a conocer mi identidad en un futuro, nadie mas tiene este kosei, así que lo entrenaba de día en el patio de mi casa. Esta casa es una que tenia mis padres, herede sus 3 casas, incluyendo la que esta frente de la casa de Shouto.

Hablando de el, no me e atrevido a saludarlo o verlo, se que sigue en la misma casa, ya que cuando fui a recoger unas cosas pude ver a través de la ventana su irreconocible cabellera.

Tengo que admitir que me da miedo confrontarlo, probablemente este enojado por que no me atuve en contacto, yo no tenia la culpa pero me era difícil explicárselo, y otra de las razones es que no me siento preparada para contarle todo lo que ocurrido, necesito mas tiempo.

Volviendo a lo habitual, yo regrese a casa solo para tomarme un baño y dormir, terminaba el trabajo en la madrugada el cansancio producido por este me ayudaba a dormir profundamente, no asistía a una escuela, uno de los amigos de mi tío se ofreció como tutor particular, lo que me servia mucho pues no tenia que cumplir con horarios matutinos y usaba las mañanas para descansar, mi tutor llegaba en la tarde cuando yo ya estaba mas que descansada y comida, y la verdad terminábamos rápido, mis niveles de inteligencia eran elevados para cualquier chico de mi edad.

Mi jornada de hoy había terminado, acababa de despedir a mi tutor cuando decidí visitar a mi mejor amigo el cual vivía en la casa de enfrente, el no era para nada como Shoto, de hecho, el sentimiento que sentí una vez con el nunca podría compararlo con nadie.

Solo abrí la puerta como si de mi casa se tratara, ya que si tocaba la puerta esto molestaba a Mitsuki-san la cual siempre me decía que me sintiera como en casa.

-Hola Mitsuki-san, ¿como le va?- ella se encontraba en la cocina por lo que me acerque a esta y olía muy bien.

-Ash, ¿cuantas veces te he dicho que no agregues honorifico y me llames solo por mi nombre?- su expresión parecía estar enojada, por lo que solo sonreí.

Una luz para Todoroki - Todoroki Shouto X LectoraWhere stories live. Discover now