The Prince © 𝐝. 𝐦𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲 🐍

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El prisionero de Azkaban ❅ Capítulo 6

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Los meses pasaron rápidamente entre clases y clases y finalmente habían llegado a otoño. Saraphine pensó que el tiempo había pasado volando y sintió que no habían pasado ni dos días desde su llegada a Hogwarts, aunque claramente no había sido así.

Su relación con su compañera de habitación, Emerald Black había comenzado a avanzar, hasta ser buenas amigas, o al menos así lo sentía Sara con respecto a la morena. Aunque claramente no se contaban todo y había cosas que mantenía para ella misma, todavía al menos, si sintió que por fin tenía a una amiga con quien hablar y lo agradeció desde el fondo de su corazón.

Hacía mucho tiempo, incluso que nunca había tenido a una persona lo suficientemente cercana para poder hablar de cosas cotidianas como si fueran la cosa más importante del mundo.

Durante ese tiempo finalmente había podido preguntarse a Black sobre su padre, el mismo que había intentado entrar en Hogwarts anteriormente, ya que se comentó que había rasguñado el cuadro de la entrada de la torre de Gryffindor un poco antes de la llegaba del Otoño y, a pesar de que Emerald no había dicho nada en claro y mantenía una actitud bastante pasota y de desinterés, Saraphine sintió que realmente aquello le importaba, hasta el punto de distraerse lo suficiente para darse ella del asunto.

Por otro lado, estaba Theodore Nott, aquel joven que conoció en su primer día en el Gran Comedor y, a pesar de que no habían intercambiado demasiadas palabras, siempre estaba con ellas y no se separaba de las chicas, aunque mantenía las distancias. En ese tiempo se percató también que, Black y Nott eran cercanos, al menos más que Sara con ellos en la actualidad, ya que Emerald varias veces hablaba con Nott de temas que Saraphine no quiso entrometerse. Si Em no quería decirle o comentarle, tendría sus motivos y lo respetaba.

Esa mañana estaban esperando al profesor Lupin junto a los alumnos de Gryffindor para la clase de Defensa contra las Artes Oscuras cuando, un Snape con caminar rápido apareció en escena. Los alumnos se quedaron callados al momento que lo vieron entrar y lo miraron extrañados ya que no le tocaba en esa aula. El profesor Snape cerró todas las ventanas con un movimiento de varita algo brusco y se colocó delante del aula, sacando la cortina para poder proyectar algo, algo que los alumnos no tenían idea hasta que Severus añadió con el tono seco y frío que lo caracterizaba: —Pasen a la página 395 del libro.

Los alumnos a pesar de que se miraron entre sí extrañados, obedecieron sin rechistar. El profesor Snape retrocedió sus pasos para ir en dirección al Proyector que estaba al final de la sala y cuando pasó cerca de Harry Potter éste preguntó: —Perdone, profesor. ¿Dónde está el profesor Lupin?

—Basta con decir que el profesor Lupin hoy se siente indispuesto para enseñar el día de hoy, así que, vayan a la página 394.

Sara, quien se encontraba sentada junto con Emerald en segunda fila, se miraron extrañadas ante aquello, pero no comentaron nada, tampoco dijeron nada al ver el tema que el profesor Snape les quería enseñar ese día. Aunque alguien sí que preguntó por ello.

—¿Hombres lobo? — dijo Ron en voz alta.

—Pero profesor, apenas empezamos con los Gorros Rojos y los Hinkypunks. Faltan semanas para las bestias nocturnas— añadió Hermione, apareciendo de la nada y llegando de dios sabe dónde.